(Diario El Sur) Todo el mundo está hablando de la irrupción de los vehículos eléctricos, la que se estima será más rápido de lo esperado. Sin embargo, y por ahora, la masificación en el país de estos móviles se ha centrado en el transporte público, micromovilidad y algunas empresas que han dispuesto autos para su personal.
Por eso ¿qué falta para dar el salto a los particulares? El alto costo de las baterías, la falta de infraestructura, que de a poco crece, y la baja producción serían a juicio del seremi de Energía y un ejecutivo de una marca en Chile las razones principales por las cuales aún no hay un parque automotor masivo.
Nicolás García, gerente corporativo de Renault en el país, afirmó que para que haya mayor acceso a los vehículos eléctricos, primero tiene que haber mayor oferta. «Nosotros estamos poniendo de nuestra parte, presentando al mercado vehículos innovadores, con precios atractivos y competitivos, pero esto funciona en base a una infraestructura. Sin eso, es muy difícil que las personas piensen en tener un vehículo eléctrico», apuntó.
Agregó que los principales responsables de la infraestructura, no es sólo el Estado, sino todos los que en el futuro se verán beneficiados del consumo. Hoy un vehículo eléctrico sigue costando sobre $20 millones, por lo que su demanda aún es algo escasa, pero va en crecimiento.
Rol activo
Cree que los dueños del combustible, en este caso las compañías eléctricas, también tienen que tomar un rol más activo en desarrollar algo que después les va a beneficiar. Algunas compañías están operando como parte de esta cadena, trayendo mejores tecnologías y generando cada vez más alianzas con proveedores afuera, para tener mejores cargadores, más inteligentes, que sean amigables con el usuario y generando políticas de instalación que sean mucho más comprensibles.
Otro elemento importante, agregó, es el interés de las empresas, pues si bien hoy un vehículo tiene un mayor costo promedio de adquisición que los térmicos, su característica principal, de cero emisión, les genera una serie de beneficios.
[VEA TAMBIÉN: En tres meses SEC recibe 30 declaraciones para instalar electrolineras]
También añadió que el alto costo actual se debe a la producción a baja escala, por lo que los costos son muy altos. Sostuvo que es casi una producción artesanal, no tiene una masa de producción que permita todo lo que generan las otras producciones en línea: por ejemplo, plantas casi 100% robotizadas, con utilización casi 100% de la capacidad. Todo eso mejora mucho los costos.
En cuanto al Estado, el ejecutivo piensa que está haciendo una parte, más allá de los incentivos como se hace en Europa, mediante la licitación de importantes flotas eléctricas, que significan un mejor servicio para la gente.
El seremi de Energía, Mauricio Henríquez, sostuvo que para masificar la electromovilidad existen dos cosas. Primero la infraestructura es una clave, pero el gran avance a nivel mundial está en las baterías. «Cuando sean energéticamente más densas todos vamos a tener autos y buses eléctricos», apuntó.
Hoy, sumó, hay caminos que están tomando los acumuladores se estima que de aquí al 2025 los autos van a valer lo mismo que los convencionales. Una de las baterías podría ser con celdas de hidrógeno, lo que sería un salto cuántico, que se sumarían a las de aluminio aire.
Aparte, hizo ver que para moverse entre Concepción y Chiguayante o la Ruta, por ejemplo, hay que tener un bus de grandes dimensiones y es probable que en algunos sectores les va a costar pasar, por lo que se necesita la infraestructura vial como de electrolineras.
En todo caso, remarcó que se está avanzando a pasos agigantados e incluso en el país ya hay autos que tienen un autonomía de 400 kilómetros y de hecho, un auto como este puede funcionar como colectivo o taxi, que pueden circular unos 50.000 km anuales, cuando recién se paga el móvil.
Mantención
Nicolás García agregó que un auto eléctrico puede durar muchos años. «Lo que primero se consume es la batería y la vida útil de éstas está expresada en ciclos de carga que debiesen durar entre 8 y 10 años. Además, a las baterías de autos eléctricos se les están encontrando segundos usos, por ejemplo, como almacenadores de energía. Hay que recordar que estas son baterías de tracción, por lo tanto, generan una energía tal que pueden mover a un vehículo de equis toneladas», explicó.
En cuanto a mantención, el ejecutivo de la marca de origen galo señaló que en gasto mes, si el usuario paga $100 mil en un vehículo térmico por combustible, en uno eléctrico debería ser alrededor de $19 a $20 mil pesos. Respecto a las mantenciones, éstas cuestan alrededor de un 30% del valor de las de un auto térmico.
El seremi anexó que las mantenciones son mucho menos que los tradicionales, sobre todo porque como no tienen piezas ni cilindros móviles es más baja, es de alrededor de un 20%, lo que hace que el desgaste también sea así.