(Economía y Negocios) Lo habían advertido expertos eléctricos, pero ayer Juan Clavería, gerente general de GDF Suez -matriz de E-Cl, empresa que lleva a cabo la interconexión de los sistemas-, reconoció que esta obra beneficiará al sistema en toda su magnitud solo si se desarrolla en sus plazos otro proyecto: La línea de transmisión entre Cardones y Polpaico, que lleva a cabo la colombiana ISA.
«La gran incertidumbre pasa por un proyecto hermano nuestro, el de ISA, que aún no está aprobado ambientalmente. Sin este proyecto que está aguas abajo, nuestra interconexión no va a satisfacer todas las condiciones», advirtió el ejecutivo. El 95% de los terrenos por los que transita el proyecto de E-Cl son fiscales, pero no es el caso de la línea de ISA, por lo que llamó a apoyar fuertemente la iniciativa.
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La línea entre Cardones y Polpaico tiene 753 kilómetros y contempla una inversión por US$ 1.000 millones. La iniciativa es clave para fortalecer el sistema eléctrico y con ello, contar con más capacidad en la red y lograr bajar las tarifas de luz, trasladando efectivamente la energía producida entre el SING y el SIC. Pero el proyecto tiene una serie de oposiciones.
Si bien ha sido definida como estratégica para el Gobierno, y éste ha desplegado esfuerzos para impulsarla, varias comunas, sobre todo de la V Región, han criticado fuertemente el trazado.
De hecho, trascendió que buscarán pronto judicializar la línea. Además, hace unas semanas en la Cámara de Diputados se pidió al Gobierno retrotraer el proceso a la fase de ingreso del Estudio de Impacto Ambiental y definir un trazado viable.