(El Mercurio) Mientras el mercado de vehículos nuevos en Chile creció 7,4% anual entre enero y junio de 2016, la marca francesa Peugeot expandió 63% sus ventas en nuestro país en igual período. Esta alza le permitió subir desde el noveno al séptimo puesto en volumen comercializado a nivel local en el último año.
El gerente general de Peugeot Chile, Federico Rocca, comentó que -contrario al pesimismo que expresaba la mayor parte de la industria a fines de 2015- «nosotros pensábamos que 2016 no sería tan malo». El ejecutivo explicó que el fuerte incremento que registra la marca está ligado a la ampliación de su gama de modelos -como ocurrió con los sport utility vehicle – y a la renovación de estos desde 2011.
A lo anterior, indicó, se añade el fortalecimiento de la red de concesionarios -19 a nivel nacional- y la fuerte demanda de vehículos comerciales, que hoy explican el 45% de su actividad. Ese segmento -donde participa con el furgón Partner (el más vendido en Chile)- sigue siendo requerido por las empresas, pese al menor crecimiento de la economía, añadió.
En este contexto, la firma quiere expandirse al segmento de camionetas pick up. «En una declaración del grupo PSA, de parte del presidente del directorio, Carlos Tavares, se expresó que la marca Peugeot tendrá un modelo pick up mediano, aproximadamente en 2019, para todos los mercados mundiales con potencial. Chile claramente es uno, dado que las pick up son el 20% de las ventas totales. Está en nuestros planes sumarla al portafolio», sostuvo Rocca.
Incentivos fiscales
Federico Rocca comentó que hoy los clientes en Europa se fijan más en los niveles de contaminación de los autos que en temas como la potencia o el equipamiento, lo que revela el interés por comprar unidades más amigables con el medio ambiente. Indicó que si bien Peugeot y otras marcas cuentan con propuestas de autos eléctricos o híbridos (con motor eléctrico y a gasolina), aún no es económicamente atractivo comercializarlos masivamente en Chile, debido a la inexistencia de incentivos estatales para estimular la demanda, a diferencia de otros países.
«Nadie individualmente está dispuesto a subsidiar el bien común, nadie pondrá el doble de su patrimonio para pagar un auto eléctrico para no contaminar el aire, eso es una utopía. El Estado, como responsable, tiene que alentar y buscar medidas para hacer que los consumidores se tienten y deriven su demanda a ese tipo de vehículos. Debe existir un incentivo impositivo», señaló.
Entre los estímulos que se pueden implementar, indicó, están los descuentos en el pago de las patentes o menores tasas de IVA. «Debe haber un beneficio impositivo para que en la cuenta económica cada cliente diga que si bien paga algo más, porque se trata de tecnologías más caras o menos masivas, cuenta con esas otras ventajas», agregó.
Rocca no ve probable que las personas compren un segundo auto para evitar la eventual restricción permanente a autos catalíticos en meses de invierno, como lo pretende el Gobierno. «Es más lógico que, ante la restricción, se tenga un transporte público alternativo o haya coordinación con otros automovilistas», planteó.
Proyecciones
El ejecutivo estimó que este año se comercializará en Chile un volumen de cero kilómetros semejante al de 2015, cuando se vendieron cerca de 282 mil unidades. «Pueden ser 10 mil unidades más o menos», añadió. En ese contexto, Peugeot espera mantener una participación de mercado de 5% (hoy tiene el 5,3% de la industria).
Rocca comentó que este año sus clientes, que compran autos sobre los $9 millones, no han tenido problemas para acceder a créditos. Sobre el impacto del Brexit para la marca en Europa o en nuestro país, sostuvo que «más allá de los vaivenes iniciales, habrá que esperar. No vemos un impacto en Chile y, en un análisis interno, estamos más expectantes que otra cosa».