(El Mercurio) Mientras participaba en el Chile Day, en Londres, el ministro Máximo Pacheco recibió la primera quincena de septiembre un llamado de George Soros. El magnate estadounidense quería invitarlo a un encuentro especial, en Nueva York, a fines de ese mismo mes.
La reunión se produjo el martes 29 en el Hotel Plaza de Manhattan y, además de Soros y Pacheco, acudieron el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio; el director de la Reserva Federal durante los gobiernos de Jimmy Carter y Ronald Reagan, Paul Volcker; y la líder demócrata de la Cámara de los Representantes, Nancy Pelosi.
El ministro partió leyendo una carta dirigida al empresario. En uno de sus párrafos se lee : «Cuando el plebiscito inscrito en la Constitución de Pinochet se vislumbraba más como una trampa que como una oportunidad, tú apoyaste la realización de estudios y la de obtención de datos que nos entregaron información que se nos había ocultado por 17 años. Lo que ahí aprendimos fue crucial para la preparación del famoso programa televisivo de la campaña del NO».
Pacheco relata en esta entrevista el encuentro con Soros y, al abordar la actual situación política, parafrasea a Sigmund Freud: quien nace melancólico extrae tristeza de cualquier acontecimiento.
«Estábamos en esta reunión y Soros señaló: ‘Voy a decir algo que no lo digo para congraciarme con Máximo, porque lo conozco hace muchos años y, por lo tanto, sé que me va a creer lo que le voy a decir’. Y me dijo: ‘Yo dificulto que haya hoy día en el mundo un país más atractivo para invertir que Chile». Mientras lo escuchaba, pensaba, pucha, cuánto nos falta tomar un poquito de distancia de las cosas y ver esto desde la óptica de largo plazo. Tenemos que enfrentar las cosas con una actitud más positiva, constructiva, equilibrada», dice.
«A veces -continúa- nos sumimos en un negativismo y una melancolía que nos hacen mucho daño como país».
-¿A qué atribuye usted que la Presidenta Bachelet haya obtenido el 22% de aprobación en la última encuesta del CEP, el más bajo desde 1990?
-Hay muchos factores. Por un lado, el que estamos en una situación a nivel mundial de más incertidumbre, hay un proceso de ajuste aquí en la economía. Hay una situación más difícil para gobernar (…) La Presidenta fue elegida con una voluntad de cambio del país y, bueno, obviamente hacer estos cambios es más complejo de lo imaginado. Entonces, también la sociedad empieza a vivir esta incertidumbre y, de alguna manera, a expresar sus dudas. Yo lo que creo es que, cuando uno gobierna, tiene que hacerlo con una cierta visión de largo plazo, lo que en el corto plazo puede costar popularidad.
-El desglose de la encuesta del CEP muestra que la mayor caída en la aprobación presidencial se concentra en los sectores populares, en las mujeres y en quienes se identifican en el centro político.
-Bueno, no soy encuestólogo ni analista político. Trato de decir en mi condición de ministro que construir una mirada estratégica tan importante como es la educación gratuita y de calidad es algo que está en el ADN de este gobierno, esto va a ser parte del legado de esta administración. Mire, si lo vamos a conseguir en un 30%, 40%, eso para mí no es la discusión. La discusión es que fuimos capaces de poner una mirada estratégica, de poner una mirada larga. Iremos haciendo los ajustes en función de cómo esté la economía, de cómo avanza la discusión política y también del respaldo que la misma sociedad nos va dando.
-¿Cuál es su autocrítica? El ministro Nicolás Eyzaguirre realizó hace unas semanas un mea culpa y apuntó a la simultaneidad de las reformas.
-No, no, yo no le he dado esta entrevista para hacer ningún mea culpa . Al contrario. Yo lo que quiero reivindicar acá es los valores, el ideario de construir una sociedad más igualitaria.
Burgos y el ambiente de diálogo político
Al transitar por la arena política, el ex ejecutivo de International Paper aborda su experiencia desde el Ministerio de Energía. Relata primero el trabajo de un consejo consultivo de 27 personas, que elaboró una hoja de ruta para el sector energético con miras a 2015. Luego se refiere a la aprobación en general del Senado -esta semana- de un proyecto que permite a Enap entrar al negocio de la generación eléctrica.
«Es un tema complejo porque toca un tema de alta sensibilidad política: hay gente que se opone a que el Estado pueda contribuir a perfeccionar el funcionamiento del mercado. Los senadores de la UDI y RN se abstuvieron, no votaron en contra. ¿Por qué? Porque dicen que es importante que discutamos esto, que nos concentremos en un tema que es de país, estratégico, y que tratemos de construir ciertos acuerdos. Me siento interpretado por esa forma de hacer política: mirada de largo plazo y diálogo. Un compromiso de entender la posición del otro y ver cómo avanzar».
-En la oposición han criticado que La Moneda apele a la «gradualidad» del llamado «segundo tiempo», pero luego anuncie que la reforma laboral no permitirá el reemplazo en huelga y se defina el cronograma de la reforma educacional sin trabajo prelegislativo.
-No me voy a meter en los problemas específicos de cada uno de los colegas de gabinete. Pero le puedo decir una cosa: no le hace bien al país exagerar. Aquí se ha hecho un esfuerzo, yo creo que muy consistente y muy serio por parte de Jorge Burgos, como ministro del Interior, por liderar un ambiente de diálogo político. Hay un esfuerzo muy serio, muy comprometido del ministro de Hacienda por participar en discusiones de estos temas y construir un equilibrio. Aquí lo complejo es que son equilibrios que cuesta alcanzar. Y cuando el ministro de Hacienda plantea que necesita tener una reforma laboral con un buen equilibrio, creo que efectivamente se está en ese proceso. Como sociedad, necesitamos superar un poco estas desconfianzas, desconfiar para partir.
«No estoy entre los que piensan que Chile vive una efervescencia social»
-¿Acudió usted al comité central del PS de agosto?
-No me pierdo ninguno.
-En la reunión, el ministro Marcelo Díaz hizo críticas a la Nueva Mayoría. «Los afectos oscilan al ritmo de las encuestas», dijo. ¿Lo comparte?
-Yo creo que la Nueva Mayoría es una coalición más amplia que la Concertación y que, obviamente, ha tenido como principal logro el que da cuenta de la diversidad que hay en Chile y de la necesidad de ampliar el espectro para la gobernabilidad de Chile. En lo personal, no estoy entre aquellos que piensan que Chile vive en efervescencia social. Creo que Chile es un país que tiene muchas tareas pendientes que debe y quiere enfrentar, pero que, en lo fundamental, es un país que vive en paz social y que tiene grandes desafíos por delante para construir una sociedad más igualitaria (…) La primera tarea es asegurar que la Nueva Mayoría sea una coalición que funcione mejor, que tenga más, mejor sintonía, y que trabajemos más unidos. Eso le va a hacer bien al país.
-El ex Presidente Piñera aseguró que solo la vaguedad es lo que permite a la Nueva Mayoría seguir unida.
-Mire, yo con Sebastián Piñera tengo muchos temas pendientes y uno de los cuales es la vaguedad de él. Durante el gobierno de Piñera por dos años no se tramitaron los decretos de aumento de tarifas eléctricas, y yo sé que es obligación legal de un gobierno cursarlos. Llevo 18 meses como ministro pidiéndole al ex Presidente Piñera o a cualquiera de sus ex ministros a que me diga sin vaguedad por qué no se tramitaron los decretos de alzas de tarifas eléctricas cuando era obligación legal hacerlo. No ha habido respuesta. Ni una. Ni él ni nadie de su gobierno le han respondido a las dueñas de casa de Chile, y yo, como ministro, tuve que ir a ver al ex contralor, don Ramiro Mendoza, y poner la cara.
-La Nueva Mayoría manifestó hace algunos días su preocupación por la figura presidencial, al tiempo que la Mandataria dijo que no pensaba en renunciar y criticó a quienes esparcían rumores. ¿Cuán nocivo cree usted que es hacerse cargo de estos comentarios?
-La gente ve mucha televisión y ve muchas de estas series, como «House of Cards», que son siempre conspiraciones e inventos, pero que no se condicen con la realidad. Quien esté cerca de la Presidenta va a notar que lo único que transmite es energía, sentido del deber y convicción de que lo que estamos haciendo es transformador y que ella se está haciendo cargo de cambios que la sociedad necesita y reclama.
Carrera presidencial: Enríquez-Ominami y Lagos
-Hace unos meses recibió en esta oficina a Marco Enríquez-Ominami, convirtiéndose así en el primer ministro que lo hizo. ¿Cree usted que la Nueva Mayoría debe abrirle un espacio?
-Yo recibí a Marco Enríquez-Ominami como lo hice con casi todos los candidatos presidenciales y en un momento en el cual, como país, estábamos en la preparación de la agenda de Energía, un tema que este gobierno lo ha definido como estratégico.
-La pregunta es si usted cree que la Nueva Mayoría debe abrirle o no un espacio a Enríquez-Ominami.
-Ese es un tema que está para ser resuelto por los partidos políticos. Estimo que aquí, obviamente, va a haber una discusión muy profunda, porque Marco Enríquez-Ominami ha sido parte de la oposición a la Nueva Mayoría, no ha sido parte de la Nueva Mayoría. Entonces, creo que resolver eso va a ser un tema de altísima complejidad.
-El vicepresidente del PS, Camilo Escalona, señaló que el ex Presidente Ricardo Lagos «es una opción real». Usted participó activamente en la campaña de Lagos de 1999, ¿volvería a apoyarlo?
-Al ex Presidente Lagos lo conozco muy bien. Es una persona de la que me considero cercano, que no solamente valora su obra, sino que aprecia enormemente su liderazgo. Ahora, si es o no el candidato presidencial, es algo que tiene que resolver él. No estoy dentro de aquellos que esté convencido de que él vaya a dar ese paso. Y, dicho eso, obviamente el ex Presidente Lagos es una persona que tiene una experiencia, una trayectoria y una contribución que explican lo que él ha estado haciendo: ha estado ayudando a que este país pueda discutir los temas relevantes de manera seria y responsable. No estoy entre aquellos que piensan que lo que está haciendo es participar de una campaña presidencial o de una campaña electoral.
»Con Sebastián Piñera tengo muchos temas pendientes, uno de los cuales es la vaguedad de él».
»Se ha hecho un esfuerzo muy consistente y serio por parte de Burgos, como ministro del Interior, por liderar un ambiente de diálogo político».
»Enríquez-Ominami ha sido parte de la oposición a la Nueva Mayoría. Resolver eso va a ser un tema de altísima complejidad».
«Luksic lo ha pasado mal»
-Usted es reconocido como uno de los amigos históricos de Andrónico Luksic. ¿Ha estado con él?
-Yo tengo una relación de cercanía con él desde la época de mi padre, que era muy amigo de don Andrónico Luksic Abaroa, fueron compañeros de universidad. Después, muchos años venareé en el norte y teníamos ahí oportunidad de vernos. Luego, no es ningún misterio, yo fui miembro del directorio del Banco Chile, por lo tanto tengo una relación de mucho conocimiento. Sí, sé de él. Lo veo.
-¿Después del caso Caval?
-Claro que sí, pues. Si es una persona que es pública en Chile, lo he visto en varios eventos y en varios actos sociales.
-¿Cómo lo ha visto?
-Lo ha pasado mal.
-¿Por su imagen?
-Así lo he visto…
-El presidente de la DC, Jorge Pizarro, es familiar suyo.
-Es mi consuegro 2.0. Tengo dos hijas casadas con dos hijos de Pizarro.
-El senador Pizarro fue al Mundial de Rugby, en Londres, mientras estaba en una semana distrital. ¿Qué juicio tiene al respecto?
-Yo primero me he acostumbrado a no opinar donde tengo conflictos de interés. Mi opinión no es una opinión independiente. Piense usted que tengo dos hijas casadas con dos hijos Pizarro, y en segundo lugar en relación al punto específico que me pregunta, el senador Jorge Pizarro ha dado una opinión pública sobre esto y ha manifestado que de haber imaginado que esto iba a producir este revuelo y esta reacción, no habría ido.
-¿También lo ha visto afectado?
-Todos somos personas de carne y hueso. ¿Quién puede imaginar que en situaciones como esta alguien puede ser tan olímpico como para no verse afectado? Esos seres humanos no existen.
[Destacan inicio de construcción de ocho centrales en septiembre]