El director de Systep y académico de la Universidad Católica, Hugh Rudnick, señaló que la reforma al segmento de la distribución que impulsa el Gobierno con el sector privado debe “rediseñar las tarifas de precios, revisar los nuevos perfiles de usuarios y cuál es el uso que les dan a las redes”.
El académico participó en el seminario “El futuro de la distribución de energía eléctrica”, organizado por Empresas Eléctricas A.G. en la casa central de la Universidad Católica, donde sostuvo que “se están desarrollando nuevos paradigmas donde aparecen nuevas arquitecturas de redes, pero por sobre todo, nuevos modelos de negocios. Hay que ofrecer nuevos servicios, nuevas funciones y oportunidades”.
Sobre la política energética Energía 2050, Rudnick agregó que la meta para el año 2035 es que la indisponibilidad de suministro eléctrico promedio, sin considerar fuerza mayor, “no supere las 4 horas al año en cualquier localidad del país. En 2050, se espera que no supere a 1 hora al año”.
Para el catedrático el objetivo de las modificaciones “está en proveer un buen servicio que sea viable y sustentable, eficiente y de calidad, económico, tanto para la industria como la población”.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE), Andrés Romero, planteó “que la distribución no sea un obstáculo y facilite la instalación del sistema inteligente, donde los usuarios se empoderen y puedan ser productores y consumidores”.
Desafíos
En el segundo panel se abordó sobre la energía y desarrollo de la ciudad, donde también el presidente del Consejo Nacional de Desarrollo Urbano, Luis Eduardo Bresciani, quien expuso los desafíos desde el punto de vista urbano para la industria de la distribución:
-Abastecimiento seguro y eficiencia energética: son las formas de abastecimiento y la capacidad de optimizar el consumo principalmente en las empresas y los hogares. Especialmente en la generación de normas. Hoy el consejo nacional de desarrollo urbano está discutiendo la generación de los estándares.
-Desentralización de la producción y distribución de energía: “Hay que generar gradualmente oportunidades para programas urbanos descentralizadores, basados en fuentes de energías renovables”.
-Descarbonización de la energía y el transporte: “se requiere mitigar los impactos del cambio climático generado por emisiones de CO2. Se debe dar prioridad al transporte público y motorizado, ya que el reemplazo de la edificación es mucho más lento”.
-Planificación urbana integrada para eficiencia y mejor gestión: “realizar planes que integren la evaluación urbana de costos de energía, gestión de transporte, una mejor regulación de la edificación y el financiamiento para mejorar las infraestructuras de distribución.
-Participación e información ciudadana: “se debe prestar un servicio de mayor participación a los usuarios. Debe existir un uso abierto de las bases de datos para recopilar, organizar y gestionar información sobre consumo y cumplimiento de metas”.
[Partió proceso de reforma al segmento de la distribución eléctrica]