El Coordinador Eléctrico Nacional publicó el «Estudio de capacidad técnica disponible en sistemas de transmisión dedicada», donde se abarcó 315 instalaciones de este tipo entre Arica y Chiloé, siendo la zona norte del sistema eléctrico local la que cuenta con el mayor potencial para recibir conexiones de proyectos de generación.
La investigación que elabora anualmente el organismo, consignó que en 2020 el total de instalaciones, la mayoría (166) tienen un nivel de tensión de 220 kV, seguidas de 93 con 110 kV; 48 con 66 kV, y 8 con 154 kV.
Zona Norte
Según el documento del organismo, la zona norte del sistema es la que tiene 177 instalaciones dedicadas, de las cuales 74 son para uso de inyección de energía eléctrica 71 para el retiro y 32 son de uso mixto, por lo que entre las regiones de Arica-Parinacota y Coquimbo se concentra concentra el mayor potencial para recibir conexiones de nuevos proyectos de generación, especialmente en la Región de Antofagasta, debido a «la extensión de los sistemas dedicados que se encuentran esencialmente dispuestos para abastecer consumos mineros».
«Del total de instalaciones dedicadas analizadas en la zona norte, se observa que predominan las instalaciones con capacidad disponible para inyección mayor a 80 MW con un valor que asciende a 91 instalaciones, lo que representa un porcentaje del 51% respecto del total analizado. A su vez, las instalaciones con capacidad menor a 50 MW y capacidad entre 50 y 80 MW , corresponden a 33% y 15% del total; respectivamente», indica el estudio.
Por el lado del retiro, esta zona registra 177 instalaciones, las cuales son encabezadas por las que tienen una capacidad entre 50 y 80 MW (27%), mientras que 7% de estas tiene una capacidad de retiro menor a 50 MW.
Zona Sur
Entre las regiones de O’Higgins y de Los Lagos se señalan 99 instalaciones de transmisión dedicadas, de las cuales 78 se ocupan para inyección; 18 para retiro y 3 son de uso mixto. Las capacidades menores a 50 MW encabezan la lista, representando 59% del total de instalaciones, seguidas de 33% que son mayores a 80 MW y 8% entre 50 y 80 MW.
«Lo anterior es reflejo que los sistemas dedicados en esta zona son construidos principalmente para inyección de sus respectivas centrales, con baja posibilidad de incorporar grandes montos de inyección de energía. Sin perjuicio de ello, dado los montos de inyección disponibles, es posible incorporar proyectos de menor tamaño que optimicen el uso de los sistemas existentes», se señala.
La capacidad de retiro en esta zona cuenta con 54% de instalaciones mayores a 80 MW, mientras que 36% tienen menos de 50 MW y 10% entre 50 y 80 MW. «La Región del Biobío concentra las capacidades de retiro con un total de 25 instalaciones con posibilidad de permitir inyecciones mayores a 80 MW. Mientras que la Región del Maule concentra las instalaciones con menor capacidad de retiro con un total de 14 instalaciones», detalla el estudio.
Zona Centro
En las regiones de Valparaíso y Metropolitana existen 39 instalaciones dedicadas, de las cuales 16 son para inyección, 15 para retiro y 8 para uso mixto. «Ambas regiones de la zona Centro se caracterizan por presentar un mayor número de instalaciones con capacidad de inyección de al menos 50 MW. En el caso de la región de Valparaíso, los puntos con mayor capacidad de generación se encuentran ubicados en la zona costera, mientras que en la región Metropolitana se ubican en la zona norte, asociados principalmente a instalaciones cuyo uso actual es de retiro de energía», se indica.
La menor capacidad de inyección se ubica en la zona sur de la Región Metropolitana, debido a la presencia de desarrollos hidroeléctricos, en tanto que en la Región de Valparaíso el menor potencial está en la zona de Acongacua-Los Maquis, dada también la existencia de proyectos hidráulicos.
Según el estudio, «ambas regiones se caracterizan por presentar mayoritariamente capacidades para retiro de al menos 50 MW».
«En el caso de la región Metropolitana, los puntos con mayor capacidad de retiro corresponden a instalaciones que ya tienen un uso típico actual de retiro de energía, y que están destinadas a abastecer desarrollos mineros en la zona de Polpaico. Ello da cuenta que estas instalaciones pueden ampliar su carga conectada sin requerir la ampliación de la infraestructura eléctrica existente», señala la publicación.
Y agrega que también destacan como puntos de interés las instalaciones que actualmente presentan flujos de inyección ubicadas al sur de la región, razón por la cual presentan un alto potencial para conectar proyectos de inyección de energía.
«En el caso de la región de Valparaíso, la zona Costera también constituye una zona de interés para conectar nuevos desarrollos de consumo en razón de la presencia de instalaciones cuyo uso actual es inyección», se concluye.