(El Mercurio) Posibles acciones legales podrían tomar algunas empresas mineras en contra de la central de Endesa, GasAtacama. La información inconsistente que habría entregado la empresa al Centro de Despacho Económico de Carga del Sistema Interconectado del Norte Grande (CDEC-SING) les habría generado sobrecostos que ascenderían a más de US$ 500 millones, según cálculos de la industria.
Luego de una serie de denuncias contra la central, el 27 de octubre el CDEC-SING le presentó a la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) el resultado del informe de auditoría respecto de GasAtacama que había solicitado el directorio. Allí se demuestra que los mínimos técnicos y los tiempos mínimos de operación son sustancialmente menores a los informados por la empresa, lo que habría afectado el despacho de las centrales más eficientes y de menores costos, perjudicando con ello a los clientes y al sistema.
En otras palabras, GasAtacama habría declarado un mínimo superior al real y, con ello, habría elevado los tiempos de partida y detención, con lo que se habría colocado en posición de no ser llamada a operar para responder a las variaciones del sistema, causados ya sea por cambios en la demanda o también por la generación que proviene de centrales eólicas y solares, principalmente. De esta manera, el CDEC-SING habría activado unidades diésel de mayor costo de operación, lo que eleva los costos marginales del sistema.
La SEC está hoy investigando el caso.
Larga data
El 28 de octubre, la SEC ofició al CDEC-SING para que este le informara desde cuándo esta central había estado operando con información incorrecta, el costo para el sistema y quiénes podrían verse afectados.
Ante esto, el 13 de noviembre ese organismo respondió que la operación de GasAtacama se realizó con los parámetros incorrectos desde 1998, cuando inició su operación. El costo solo para los últimos tres años sería entre US$ 115 millones y US$ 120 millones. El CDEC añadió que para identificar a los afectados habría que observar la situación contractual de los clientes.
El organismo agregó que conceptos como el mínimo técnico y el tiempo de partida en el que empiezan a despachar las centrales se volvieron fundamentales luego que se profundizaran los cortes de gas de Argentina -al menos en 2007-, por lo que puede extrapolarse que el costo que han pagado los usuarios por la información incorrecta entregada por la central de Endesa es de más de US$ 360 millones.
Las empresas mineras, además de los sobrecostos por esta información incorrecta que habría proporcionado Endesa, habrían enfrentado otros costos: en 2007, 13 empresas habrían realizado un salvataje a GasAtacama por el corte de gas argentino, con lo que enfrentaron costos por US$ 280 millones. Esto formaría parte de los US$ 500 millones calculados por las firmas.
[Endesa: “Estructura de operación de GasAtacama no busca perjudicar a otros generadores”]