Con el objeto de proteger la salud de trabajadores, colaboradores y clientes, de manera de disminuir las posibilidades de contagio por Coronavirus (Covid-19), Enel Distribución activó un plan de acción preventivo que implica la entrada en funcionamiento de distintos protocolos para la operación de la red y atención de clientes, que permitan al mismo tiempo mantener la continuidad operacional de la compañía.
«Producto de la pandemia declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), y con el propósito de frenar la propagación del Coronavirus, Enel Distribución ha adoptado una serie de medidas, como implementar protocolos de actuación para los trabajadores y sus grupos familiares, para que estén preparados sobre qué hacer y a quién acudir en caso de presentar síntomas», informó la empresas.
«Todas las personas cuyo trabajo puede ser realizado a distancia pasaron a la modalidad de trabajo remoto, privilegiando así el uso de herramientas y plataformas digitales, para actividades que se pueden realizar remotamente, distintas a la operación de la red de distribución y la atención a clientes», se agregó.
Además, se ha restringido el acceso a dependencias correspondientes a la operación de la red eléctrica exclusivamente para el personal autorizado, aumentando a su vez la frecuencia de limpieza y desinfección diaria en las instalaciones. Por otra parte, todos los cambios de turno se realizarán bajo estrictos protocolos, incluyendo medidas de resguardo adicionales.
Atención
Según indicó la distribuidora, en la atención a clientes, se adoptaron medidas preventivas «para proteger a nuestros trabajadores y sus familias de los riesgos de contagio, estableciendo medición de temperatura antes del ingreso, medidas de higiene y protocolos de actuación que permitan dar continuidad a los procesos de atención que realiza la compañía».
La compañía también formuló un llamado a los clientes para privilegiar el uso de los canales de atención digital, «evitando concurrir presencialmente a nuestras oficinas comerciales, de manera de resguardar la salud de todas las personas, clientes, trabajadores y colaboradores, y de esta manera disminuir los riesgos de contagio. Al no realizar los trámites de forma presencial, se evitará el traslado a lugares concurridos, el uso del transporte público y también manipular monedas y billetes».