(El Tipógrafo.cl) Tras las intensas lluvias que afectaron a la Región de O’Higgins entre los días 15 y 18 de abril el río Tinguiririca tuvo una fuerte crecida, la cual provocó una fisura en uno de los oleoductos de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), por el cual circulaba petróleo en ese momento.
La situación se volvió preocupante, y a raíz de esto desde la empresa se activó un plan de contingencia que consistió en cerrar el paso de combustible a través del ducto y evaluar en terreno eventuales derrames de diésel.
Desde la estatal señalaron que se estaba analizando la opción de entrar al río a través de lanchas, sin embargo, un sistema frontal afectó a la zona, razón por la cual el trabajo no se materializó.
Según explicó el gerente de Asuntos Corporativos de Enap, Gabriel Méndez, “suspendimos los trabajos que iban a dar inicio a la reparación del oleoducto, porque el fin de semana hubo una alerta amarilla producto del tiempo, entonces solo nos mantuvimos haciendo trabajos menores que tenían que ver con reforzar las defensas del lado sur del río”.
Pese a esta situación el representante de la estatal sostuvo que “nos mantuvimos haciendo recorridos con la empresa especializada para ver si aparecían nuevos rastros de combustible”. Como resultado de esa labor, Méndez destacó que “no encontramos nada nuevo a lo que ya se había retirado hasta el viernes”.
Sin embargo, el trabajo continúa, ya que durante la jornada de hoy nuevamente personal de Enap realizará un monitoreo junto a autoridades regionales con el fin de analizar la situación y eventualmente levantar el plan de contingencia.
“Vamos a monitorear el río y el lago. Nos van acompañar la seremi de Medio Ambiente (Giovanna Amaya), la seremi de Energía (Alicia Barrera), y gente de los municipios, para ver si aparece algo más de combustible, para levantar el plan de contingencia y dejar un monitoreo más normal en el río, asumiendo que no debiéramos encontrar nuevos rastros”, aclaró el gerente de Enap.
Una vez que el plan de contingencia se desactive comenzaría una nueva etapa, la cual consiste en reparar el oleoducto. En este momento “se está trabajando en dejar la zona en condiciones para poder hacer la reparación. Estamos trabajando en fortalecer las defensas del lado sur del río y preparar el cauce para que nosotros podamos intervenir el oleoducto”, aseveró Méndez.
“Lo que uno tiene que hacer es recorrer toda esa zona para verificar que no exista otra fisura, y una vez hecho eso se puede evaluar un plan de reparación”, concluyó el directivo de Enap.
[Enap activa plan de contingencia por crecida del río Tinguiririca]