(El Mercurio) Aunque aún los automóviles eléctricos no forman parte importante del parque automotor local, el cada vez menor precio de estos vehículos y los avances de la industria para reemplazar los motores más contaminantes pronostican que los 200 vehículos eléctricos que actualmente circulan por las calles del país se multiplicarán varias veces.
Sin embargo, el avance de esta verdadera revolución del transporte sería imposible si no va acompañada de la proliferación de los puntos de recarga a lo largo del país. En abril de 2011, Enel X inauguró en la estación de Petrobras ubicada en la esquina de Av. Vitacura y Américo Vespucio el primer cargador rápido para vehículos eléctricos (o electrolinera) en Latinoamérica. Ahora, casi siete años más tarde, el panorama es bastante distinto, con veinte nuevas estaciones inauguradas por la misma compañía.
Solo esta semana debutaron dos de ellas en la Municipalidad de Vitacura, con lo que ya se cuenta con seis cargadores en esa comuna, 14 cargadores en Las Condes, cinco en Santiago Centro, dos en Pudahuel, La Florida y Providencia, mientras que San Bernardo, San Joaquín y Huechuraba cuentan solo con uno. Destacada es la presencia en Viña del Mar y Valparaíso, únicos cargadores fuera de Santiago, ubicados en Av. Libertad y las Oficinas de Chilquinta, respectivamente.
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Nuevas plazas y desafíos
«Para que los vehículos eléctricos puedan operar, se requiere de la infraestructura eléctrica necesaria para proveerlos de energía. Para ello, continuaremos aumentando los puntos de carga en el país, a medida que la tecnología se vaya masificando, esperando duplicar las electrolineras existentes durante 2018», explicó Simone Tripepi, gerente de Enel X Chile.
Hasta la fecha, la gran mayoría de los lugares seleccionados han sido en el sector oriente de la Región Metropolitana, hecho que debiese modificarse este año, debido a que la mayor autonomía que ha alcanzado este tipo de vehículos ha planteado el desafío de expandir las electrolineras a regiones y a otros puntos de la capital.
Cada una de estas nuevas plazas se elegirá según las estimaciones de venta de los modelos eléctricos, en coordinación con las automotoras y con los sectores donde viven o circulan los clientes que compran estos autos, razón por la que aparece como una de las alternativas más probables la instalación de electrolineras en centros comerciales, en donde durante la estadía promedio de los compradores de al menos una hora, un vehículo lograría una recarga casi completa.