(El Mercurio) A pesar de la desaceleración económica registrada en el último año en el país, la demanda de combustibles en general aumentó impulsada por la baja de precios.
Según datos de la Comisión Nacional de Energía (CNE), las ventas en estaciones de servicio de la gasolina de 93 octanos aumentaron 14% entre enero y noviembre de 2015, comparado con igual período de 2014, mientras la de 95 octanos se incrementó 12% y el diésel 10%. Sin embargo, la demanda de gasolina 97 disminuyó 17% y la de kerosene doméstico cayó 4%.
Nicolás Correa, gerente general de Enex -empresa del grupo Luksic que opera Shell en Chile-, explica que la baja en los precios de los combustibles es una variable que incide en esta mayor demanda. «Adicionalmente, la base de comparación -el año 2014- fue de bajo consumo, por lo que amplifica el efecto», sostiene.
Asimismo, Marc Llambías, gerente de refinación y comercialización de la Empresa Nacional del Petróleo (Enap), explica que si bien la economía está desacelerada, aún hay crecimiento. «La demanda de combustibles crece con el crecimiento del país», asegura. Agrega que el efecto se entiende tanto por la baja en el precio de las bencinas, como por el aumento del parque vehicular que ya se había producido en 2014. Recalca que la demanda de gasolina en las estaciones de servicio depende mucho de la disponibilidad de los recursos de las personas individuales, que aún hay un porcentaje alto de personas trabajando -no ha aumentado la cesantía- y que, por lo tanto, esas personas se movilizan o salen de vacaciones, entre otros factores. Todo esto genera una mayor necesidad de combustible, añade.
Nicolás Correa afirma que «para gran parte de los consumidores el gasto en combustibles es significativo dentro de su presupuesto mensual. La caída de los precios permite más consumo con el mismo gasto».
No obstante, la caída de la gasolina de 97 octanos se explicaría por un efecto de sustitución, es decir, muchas personas estarían optando por opciones de menor octanaje para potenciar el efecto del menor precio de los combustibles en sus compras.
Proyecciones para este año
Llambías asegura que para 2016 no se espera que baje la demanda, pero sí se prevé que subirá de forma menos acelerada. «Es difícil estimar cuál va a ser el comportamiento de las personas y del precio, además que las expectativas han ido cambiando en las últimas semanas. Si los precios se mantienen en estos niveles, uno debería esperar un crecimiento de 1% o 2%», dice.
Correa, en tanto, dice que el crecimiento de la demanda se espera más acotado. Esto «porque los precios debieran estabilizarse, a no ser que las variables macro, como tipo de cambio y precio del petróleo, cambien de manera significativa. Adicionalmente, se proyecta una menor venta de vehículos y menor actividad industrial, alineado con un menor crecimiento de la actividad económica».
Aumento del parque vehicular
Además de los precios, los ejecutivos estiman que en el aumento de la demanda también incide el incremento del parque vehicular. Bencina de 97 habría bajado $27 si no hubiera operado el Mepco
Las bencinas en el territorio nacional volvieron a bajar a partir de ayer. Su descenso fue de $5,4 promedio en el mercado chileno. Con ello se materializa la segunda caída consecutiva de estos combustibles, acumulando un retroceso de $11,2.
Gran parte de este retroceso responde a los bajos precios que ha experimentado el valor del petróleo a nivel mundial. Durante varios días de este mes operó por debajo de los US$ 30 el barril, alcanzando su mínimo el día 20, cuando cotizó a US$ 26,55 en los mercados internacionales.
Pero si bien la cotización del petróleo ha descendido considerablemente -en lo que va del año acumula una caída de 10,31%-, esto no se ha visto reflejado en el precio de las bencinas a nivel local. Sin ir más lejos, de no existir el Mepco, la bencina de 97 octanos podría haber caído $27 más de lo que retrocedió esta semana.
Para Jorge Hermann, director de la consultora Hermann Asociados, la actual situación muestra que el Mepco «en este período de bajos precios del petróleo ha estado recaudando recursos. No ha traspasado del todo la baja del petróleo internacional».
Otro que también fue muy crítico con el actual mecanismo para fijar los precios de la bencina fue el senador de Renovación Nacional (RN) Baldo Prokurica. Consultado por «El Mercurio», dijo no tener duda de que el Mepco «tiene un sesgo recaudatorio. Fui de los pocos que no votaron a favor. Es un engaño, no es un mecanismo que beneficie a los consumidores».
El senador agregó que el actual sistema no permite traspasar las rebajas. Y puntualizó que ya ha planteado a las autoridades la posibilidad de «estudiar una alternativa que permita un impuesto específico móvil, que establezca como premisa mantener la recaudación fiscal».
Por último, Luis Edwin González, economista de Clapes UC, dijo que en el sistema de fijación de precios del Mepco «juega un rol importante las depreciaciones y apreciaciones cambiarias».
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