(Pulso) La demanda china por gas natural se duplicará a casi el doble en los próximos cinco años, a medida que el país busca usar combustibles más limpios para reducir la contaminación de sus ciudades, según la Agencia Internacional de Energía (IEA, su sigla en inglés).
La electricidad, el sector industrial y el transporte impulsarán la demanda de gas de China a 315 mil millones de metros cúbicos en 2019, un incremento de 90% desde 2013, dijo el organismo respaldado por la OCDE ayer en su reporte de gas.
China busca fuentes alternativas de energía para impulsar su crecimiento, a medida que el uso extendido del carbón para producir calor y generación eléctrica, particularmente en el norte del país, ha inundado Beijing y otras ciudades con smog.
“Las preocupaciones ambientales ahora son el factor dominante en la demanda por gas natural. La gente ya no está dispuesta a vivir en nubes de contaminación cada invierno”, dijo Anne-Sophie Corbeau, analista senior de gas en IEA. “El gobierno ahora está tomando todas las medidas posibles para alcanzar su meta de cambiarse a energías más limpias”.
Tras una década de negociaciones, China llegó a un acuerdo de US$400 mil millones de entrega de gas con Rusia el mes pasado, como parte de una estrategia de largo plazo para elevar las importaciones de gas natural a través de gasoductos y GNL. El país se convirtió en importador neto de gas en 2007.