(El Mercurio) El 73% de los consumidores cree que de los servicios básicos -donde también figuran agua, TV de pago, bancos e internet hogar- la electricidad es el más caro, mientras que el 39% se declara insatisfecho con el servicio que le entregan las empresas de este sector.
Estas son dos de las conclusiones de una encuesta que la Asociación Chilena de Comercializadores de Energía (ACEN) encargó a Criteria para conocer los hábitos, evaluaciones e intereses de las personas en relación al uso de energía eléctrica. La medición se efectuó en medio de la tramitación en el Congreso del proyecto de portabilidad eléctrica que liberaliza el segmento de clientes regulados -entre los que están los usuarios residenciales- e introduce la figura del comercializador de energía, separando las labores de venta de la energía y operación de la infraestructura eléctrica, que hoy recaen en las distribuidoras eléctricas. La Comisión de Minería y Energía de la Cámara postergó la discusión para priorizar proyectos, como el nuevo royalty a la minería.
«La conclusión más importante de la encuesta es que el servicio de energía eléctrica tiene bajos niveles de satisfacción entre sus clientes y que las distribuidoras conforman una industria cuya imagen está deslavada, principalmente por una percepción de altos costos y poca transparencia en un servicio que no ha innovado, que presenta fallas de suministro mal compensadas y que, además, no muestran preocupación por el medio ambiente, ni por la comunidad, ni por sus trabajadores», explica el director de mercados y consumidores de Criteria, Marco Silva, respecto de la medición, aplicada a 1.440 personas de distintas zonas del país, entre los días 5 y 16 de marzo.