(El Mercurio) El último reporte de mayo de la consultora internacional EY sobre los cuarenta países con mejores oportunidades en el desarrollo de energías renovables vuelve a poner a Chile en el liderato del sector a nivel latinoamericano, al tiempo que lo posiciona en el sexto lugar del listado mundial, que lideran grandes como mercados, como China, India y Estados Unidos.
Este año la publicación destaca los avances en materia de impuestos a la contaminación que comenzarán a regir en el país. El 1 de enero de 2018 Chile será el primero en Sudamérica en gravar las emisiones de dióxido de carbono, con un tasa de US$ 5 por tonelada de CO {-2} producida en las centrales eléctricas que tengan una capacidad igual o mayor a 50 megawatts.
Esta nueva disposición afectaría a más de 85 compañías que cumplen esta cuota y que utilizan combustibles fósiles para abastecerse, las que perderían competitividad frente a otras industrias que se decidan por energías limpias. Según un estudio de la Pontificia Universidad Católica, las empresas que continúen utilizando este tipo de energías no renovables generarán alzas en los precios, que se traspasarán a las cuentas de los clientes, y que podrían reducir el PIB un 0,4% para 2030.
En todo caso, la posición de Chile en el «Renewable Energy Country Attractiveness Index» supone una baja respecto al año pasado, cuando la publicación situaba a Chile en el cuarto lugar, atractivo marcado por la inminente e histórica licitación de energía eléctrica de julio de 2016. Pese a la caída, el país continúa liderando a nivel regional, superando a México, que se situó en el noveno lugar; Argentina, que se quedó con el duodécimo, y Brasil, que aparece en el puesto número quince.
El reconocimiento internacional como un polo de desarrollo de energías renovables podría aumentar la producción de energía producida a través de fuentes no renovables, cifra que alcanza el 17%, según cifras del Ministerio de Energía.