(La Tercera-Pulso) “Estamos muy preocupados”. Con esas palabras describe el country manager de CGE, Luis Zarauza, el proyecto de ley que busca disminuir la rentabilidad a las distribuidoras y que está en pleno trámite parlamentario.
La iniciativa, conocida como ley corta de distribución, surgió tras la crisis por los medidores inteligentes, ya fue aprobada en la Cámara de Diputados y actualmente se encuentra en discusión en la Comisión de Minería y Energía del Senado. Uno de los principales aspectos del proyecto es la reducción de la rentabilidad de las empresas distribuidoras, hoy en 10% (antes de impuestos), a un rango de entre 6 y 8% (después de impuestos).
Hace algunas semanas, Zarauza asistió como invitado al Congreso para entregar su punto de vista sobre el proyecto. Tras su intervención, conversó con PULSO y explicó los puntos que preocupan a la distribuidora si es la ley se aprobara tal como está.
A su juicio, el proyecto se traduce en que “se reduce en 22% el reconocimiento retributivo de las inversiones de la compañía. Esto significa que hay menos recursos para todo lo que la compañía tiene que hacer en la red con sus clientes. Esto tiene un efecto que no puede ser más negativo”.
Además, señaló que antes de que la industria tenga la discusión para bajar la rentabilidad, hay otros temas que deben tratarse. “Pareciera que lo que estamos haciendo, es poner primero a la tasa con la ley corta y luego hablar de los riesgos que debe asumir una compañía distribuidora en la ley larga, que es calidad de suministro y contingencias (…)”. Entonces, explicó, primero se debe definir qué diseño se busca para el sector, cuáles son los riesgos de las distribuidoras y sobre esos riesgos, aplicar la tasa de rentabilidad.
“Estamos haciendo el orden inverso. Nosotros estamos definiendo una tasa, una cuestión política y dejando para el futuro la definición de los riesgos de las compañías”, indicó.
Por lo mismo, Zarauza manifestó que las señales que entrega la regulación no están siendo las correctas y que con la ley corta eso empeora. “No es una situación que podamos clasificar de sostenible”, dijo.
[VEA TAMBIÉN: CGE inició devolución de cobros por medidores inteligentes]
Los otros frentes
Hace cinco años, la empresa española Naturgy -cuando aún se llamaba Gas Natural Fenosaarribó a Chile para tomar el control de CGE. Y si bien ha habido algunos rumores de que la hispana podría vender sus activos en el país, Zarauza descartó esa posibilidad en forma tajante.
“Estamos contentos en Chile. Hemos venido para quedarnos. Una distribuidora no es una compañía que va y viene, son compañías centenarias, que tienen historia muy larga. Las regulaciones vienen y van, pero las empresas permanecen”, enfatizó.
Actualmente, CGE avanza en tres grandes frentes: mejorar la calidad de suministro -es la distribuidora con más clientes de Chile-, solucionar las demandas que tienen por los incendios ocurridos en las regiones de O’Higgins y el Maule y un posible arbitraje con la generadora AES Gener.
En relación a la judicialización por los incendios, el country manager de CGE señaló que la solución no ha llegado a la velocidad esperada. “No logramos que el acuerdo se materialice, no logramos que haya una decisión. Se está postergando todo y entendemos que son simples maniobras dilatorias de unos pocos clientes que lo que están intentando es un beneficio particular y que no son los más vulnerables precisamente, a costa del prejuicio que supone que todos los afectados estén sin percibir ni una sola compensación”, dijo.
Sobre si se justifica ir a arbitraje con Gener, indicó que “cuando veamos las documentaciones podemos opinar. Eso va a ser pronto”.