(El Mercurio) Biobíogenera y Electricité de France (EDF), propietarios del proyecto El Campesino, central de ciclo combinado de 640 MW que se ubicaría en Bulnes, se adjudicaron el segundo mayor bloque de energía en las licitaciones de suministro del año pasado.
El 1 de enero de 2019 comienza la obligación de abastecimiento comprometido en ese proceso, pero aún no obtienen su permiso ambiental y tampoco figuran en el plan de obras que publica mes a mes la Comisión Nacional de Energía (CNE).
Juan José Gana, director ejecutivo de Biobíogenera, asegura que la central que contempla una inversión por US$ 660 millones se hará, pero reconoce que los plazos están ajustados. Comenta que en noviembre de 2014 ingresaron el Estudio de Impacto Ambiental (EIA), y en febrero el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) publicó la primera adenda, dando plazo para responder hasta el 30 de abril. «Les pedimos ampliación de plazo porque no hemos recibido todavía todas las consultas ciudadanas», puntualiza.
Si bien un proyecto no es condicionante del otro, el modelo de negocio está pensado para que la central se abastezca del terminal de regasificación que también desarrolla Biobíogenera, pero en conjunto con Cheniere.
Esta última iniciativa tiene una capacidad de regasificación de entre 10 y 12 millones de metros cúbicos. Se acaba de firmar un contrato de suministro con Cheniere en Estados Unidos por 0,63 millones de toneladas por año de GNL. Gana comenta que la firma utilizará, en un principio, 2,5 millones de metros cúbicos para abastecer a El Campesino, y luego pretenden desarrollar una segunda unidad de similar capacidad que se abastecerá también de 2,5 millones de metros cúbicos.
En el caso de la capacidad restante, entre julio y agosto de este año se hará un open season para recibir ofertas. El ejecutivo asegura que ya tienen a varios interesados.
Aunque por ahora Juan José Gana descarta ese escenario, en la eventualidad que El Campesino no cumpla con los plazos establecidos en la licitación debería pagar una multa.
Las nuevas licitaciones de suministro eléctrico establecen que si por una razón de fuerza mayor el proyecto se atrasa por un lapso de doce meses consecutivos, la compañía puede pedir la cancelación del compromiso.
Tarifas de energía
Durante el primer semestre, el Gobierno debería presentar el proyecto de ley de asociatividad, que busca dar distintos beneficios a aquellas comunidades donde se instalen proyectos.
Juan José Gana dice que Biobíogenera buscará adelantarse a esas propuestas. «No sabemos en qué término va a salir la ley, pero estamos trabajando para dar un paso más allá», dice.
La empresa ya está pagando patente en la comuna de Bulnes -aunque es mínima porque aún no entran en operación- y además buscan ayudar a bajar las tarifas de esa zona, idea que ha planteado el ministro de Energía, Máximo Pacheco.
«Trabajamos con algunas distribuidoras para ver cómo lo podemos lograr. El tema es cómo hacer que estas traspasen ese ahorro a los consumidores, y eso es lo que va a determinar la ley. Las distribuidoras están con buena disposición para conversar y dispuestas a buscar mecanismos para lograr bajar las tarifas», comenta.
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