El ministro de Energía, Andrés Rebolledo, afirmó que la empresa Interchile, que construye la línea de transmisión Cardones-Polpaico entre Copiapó y Santiago, deberá cumplir con «prontitud» a las exigencias planteadas por el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) para realizar cambio en algunos tramos de la obra.
«El SEA determinó que falta información respecto a la tercera pertinencia que presentó la empresa. Estamos hablando de 11 kilómetros y 29 torres en una obra que tiene más de 750 kilómetros de extensión y más de 1.700 torres de transmisión. Es un hecho que esta obra está funcionando con plazos muy ajustados. Pero es importante remarcar que cuenta con su RCA y que deberá someterse a las exigencias con prontitud para avanzar en una infraestructura que es fundamental levantar para aprovechar el enorme potencial de energía renovable que tenemos como país”, sostuvo la autoridad.
Relevancia
Rebolledo destacó la importancia del avance de esta línea de transmisión eléctrica para el sistema eléctrico nacional por cuanto «es una obra clave para tener un desarrollo energético sustentable y sigue adelante”.
El secretario de Estado valoró que la empresa Interchile haya expresado públicamente su voluntad y deseo de hacer todo lo que sea necesario para responder a las exigencias del sistema ambiental y cumplir con el plazo acordado.
En relación a la propuesta de la Asociación Chilena de Energías Renovables (Acera) de separar la construcción de la obra en tramos, Rebolledo señaló que “estamos estudiando la opción planteada por Acera, el gremio de las empresas de energías renovables. Es una alternativa que técnicamente es factible y a la que se podría recurrir”.
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