(Diario Financiero) El abogado Ariel Mihovilovic, que hace unos días fue nombrado socio del estudio Claro & Cia, tiene especialidad en temas de energía, particularmente en financiamiento de proyectos, fusiones y adquisiciones, así como derecho corporativo en general.
El profesional comenta respecto de esta tendencia de los grandes consumidores eléctricos a buscar mejores precios de energía y las alternativas a partir de las cuales están pudiendo conseguirlo, aunque aún un poco lejos de los niveles récord de la reciente licitación de regulados.
-¿Han notado este interés por parte de los clientes libres de buscar mejores alternativas de precio?
-Lo hemos notado, particularmente en el caso de clientes que tienen contratos próximos a vencer, quienes quieren capturar de la mejor forma posible la reducción en los niveles de precio. Eso sí, los niveles que hemos visto todavía se encuentran por sobre los US$47,6 promedio que se vieron en la última licitación pública, aunque se han alejado del horizonte de US$100 por MWh que estábamos acostumbrados a ver hace unos pocos años.
-¿Ven espacio para que estos procesos puedan concretarse?
-Sí. En algunos casos se está tratando de aprovechar mediante licitaciones privadas de energía. Si bien estos procesos se vienen usando desde hace bastante tiempo en el país, pareciera ser que, con la notoriedad que el tema eléctrico ha tenido gracias a la licitación del año pasado, sumado al dinamismo y crecimiento de las ERNC y a la menor actividad que ha tenido la industria minera, se están volviendo más populares.
-¿En Claro & Cia. han analizado este tema de clientes libres abastecidos por distribuidoras que estén buscando eliminar a ese intermediario negociando en forma directa con las generadoras?
-Es algo que nos ha tocado ver respecto de clientes cuya potencia conectada es superior a 500 kilowatts.
Hasta hace unos pocos años, las condiciones económicas que podían lograr esos clientes no eran particularmente ventajosas con respecto a los suministros regulados. Sin embargo, los resultados de la última licitación, que dejaron capacidad instalada sin contratar, han sido una oportunidad para que esos clientes puedan encontrar condiciones atractivas contratando directamente con generadores.