Entre noviembre de 2023 y marzo de este año Transelec reemplazó con éxito los cables conductores de energía en la línea de transmisión de 220 kV Atacama-Esmeralda, ubicada entre las comunas de Antofagasta y Mejillones. Se trata de una infraestructura de gran relevancia, porque abastece de electricidad al 70% de la población de la ciudad de Antofagasta.
El diseño y ejecución de las tareas enfrentó dos grandes desafíos a nivel técnico: realizar las obras con la línea energizada, es decir, sin desconectar el suministro eléctrico porque la ciudad no cuenta con respaldo y, además, efectuarlas en una zona donde actualmente viven 1.600 personas.
“La línea de transmisión se construyó en el año 2000 en un sector despoblado de la comuna, pero con el pasar de los años se han instalado irregularmente en su entorno y franja de seguridad un número creciente de viviendas y personas, a pesar de los riesgos que esto implica. Esta situación nos obligó a trabajar por fases y maximizar las medidas de seguridad, para proteger la integridad de las personas, tanto habitantes como trabajadores”, explicó el gerente zonal de Transelec y líder del proyecto, Luis Pérez.
Los trabajos en la zona habitada se planificaron bajo un robusto plan de relacionamiento comunitario que implicó trabajar en tres etapas, donde se hicieron traslados diurnos de los habitantes a una sede social y a una escuela, que fueron recibidos con alimentación y actividades para adultos y niños. Además, se contrató un servicio de seguridad privada para vigilar las viviendas y sus enseres en el intertanto.
La seremi de Energía, Dafne Pino, sostuvo que “se realizó una mesa con varios actores como Seremi de la Mujer y la delegación presidencial, entre otros, y nos coordinamos desde lo público para también colaborar con que esto se realizara de forma segura y poder asegurar el suministro eléctrico a la ciudad de Antofagasta”.
Innovación
En el contexto de las obras, se reemplazaron cerca de cinco kilómetros de conductor, sin afectar el suministro eléctrico de la ciudad, en una faena en que trabajaron 140 personas y que requirió de una cercana colaboración con las comunidades para concretar más de 10 mil traslados. Transelec reconoció y destacó este trabajo mancomunado con los vecinos durante una ceremonia de término de obras.
“Como empresa, cumplimos con nuestro rol, que es asegurar la continuidad del suministro eléctrico y la correcta operación del sistema de transmisión resguardando como prioridad la seguridad de las personas, pero también podemos decir que hemos crecido como equipo humano, aprendiendo nuevas formas para relacionarnos y para colaborar con las comunidades que nos rodean”, concluyó el gerente general de Transelec, Arturo Le Blanc.