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Otra complicación para el litio: Acuerdo con Albemarle no define el producto ni a qué precio debe venderlo

Hubo un llamado internacional de parte de Corfo e InvestChile, ganaron grandes consorcios tecnológicos chilenos, chinos y coreanos, quienes firmaron compromisos de inversión por más US$ 700 millones y 650 empleos calificados. Y hasta ahora ni siquiera se ha fijado un precio para vender el litio a estas empresas, ni qué producto va a ser el que van a comercializar.

Fue en los contratos que firmó Corfo con Albermarle, en enero de 2017, y con SQM en el mismo mes de este año, donde se estableció que el 25% de la producción de litio de estas compañías se ofrecerá a un precio preferente a firmas que dieran un valor agregado en el país.

Chile se inserta de esta manera en la cadena de la electromovilidad a nivel mundial, lo cual es una muy buena noticia para las regiones del norte del país, donde empezamos a generar industrias manufactureras en regiones que hasta ahora dependían fundamentalmente de recursos mineros”, explicó Eduardo Bitran, el 9 de marzo de este año, a dos días de dejar su puesto como vicepresidente ejecutivo de Corfo.

Ese día se anunció que la empresa china Fulin, el consorcio coreano Samsung SDI-Posco, y la chilena Molymet habían sido seleccionadas para industrializar el litio a partir del contrato con Albemarle. En el caso de Fulin, se comprometió a producir en régimen cerca de 20.000 toneladas al año de material catódico. En su oferta ofreció invertir un monto total de US$ 100 millones, y consideraba el emplazamiento de una planta y su equipamiento. La inversión del primer año sería de US$ 45 millones y al tercer año se completaría la inversión.

Según recuerda El Mercurio, Samsung SDI-Posco prometió elaborar cerca de 19.000 toneladas al año de material catódico con diversas líneas de producción. Este consorcio ofreció invertir US$ 285 millones, que también consideraba planta y equipamiento. La inversión inicial sería de US$ 52 millones, y al cuarto año se completaría la inversión.

Por último, Molymet, propuso fabricar 19.000 toneladas al año de material catódico, ofreció invertir US$ 360 millones en planta y equipamiento. La inversión inicial sería de US$ 35 millones y al quinto año se haría un escalamiento de la producción hasta completar la inversión total. A diferencia de las dos anteriores, Molymet ya cuenta con operaciones e infraestructura en el Complejo Portuario de Mejillones a través de Molynor.

Ninguna de las empresas ha podido avanzar con sus inversiones.

Samsung pide hidróxido de litio, pero Albemarle no lo produce en Chile. A partir del litio que se extrae del Salar de Atacama se elaboran principalmente dos productos, carbonato de litio e hidróxido de litio, ambos empleados para componentes de acumulación energética, pero el hidróxido tiene mayor pureza y mejor reacción. Y, por ende, es más caro. Este producto es el que necesita Samsung para poder iniciar la construcción de su planta. Pero la respuesta de la empresa de capitales estadounidenses es una sola: Albemarle no produce hidróxido en Chile, por lo que mal podría venderle.

De hecho, en el contrato entre la estatal y la ex Rockwood, única competidora de SQM en Salar, se establece que habrá una “opción independiente de construcción de planta de hidróxido de litio grado batería de 5.000 toneladas. Sujeto a desarrollo tecnológico eficiente que permita procesar directo desde salmuera a hidróxido, con una cuota adicional de 34.776 toneladas de litio metálico equivalente”. El tema pasa porque esa tecnología aún no es desarrollada por Albemarle en Chile, y tampoco hay un plazo estimado para ello.

“La venta de hasta el 25% de nuestra producción a precio preferente para las empresas que se instalen en Chile sigue avanzando según lo planificado en total normalidad. Es un proceso en el que priman la buena fe y la voluntad de alcanzar los acuerdos necesarios. Para ello estamos en continuo contacto con Corfo y, de igual manera, nos hemos reunido con las empresas seleccionadas para conocer sus necesidades, de manera de poder responderlas de la mejor forma, sabiendo que el horizonte es generar un ecosistema productivo en torno al litio, que va en directo beneficio del país”, respondieron desde Albermarle a “El Mercurio”.

David Klanecky, vicepresidente de la división de Litio de Albemarle Corporation, de visita en Chile, señaló que “he viajado especialmente para seguir avanzando en este proceso en el cual Albemarle ha prestado toda su colaboración, poniendo en contacto a empresas interesadas con Corfo, apoyando la difusión internacional de la convocatoria y, por cierto, cumpliendo los compromisos adquiridos de entregar hasta 25% de nuestra producción a un precio preferente a las empresas que se instalen en el país. Por ello es que tengo en estos días reuniones con Samsung-Posco y Sichuam Fulin, para seguir avanzando en esta iniciativa que tendrá un impacto muy positivo para Chile”.

Desde esa fecha a esta parte, cuentan conocedores del proceso, no se ha podido concretar un contrato con las empresas ganadoras de la licitación, por dos motivos: no está claro qué producto van a comercializar, ni a qué precio.

Sobre el primer punto, la estadounidense ha incluso analizado vender hidróxido de litio de sus instalaciones en Australia o en Estados Unidos, donde sí elaboran ese subproducto.

 

Otra complicación para el litio: Acuerdo con Albemarle no define el producto ni a qué precio debe venderlo

Otra complicación para el litio: Acuerdo con Albemarle no define el producto ni a qué precio debe venderlo

Hubo un llamado internacional de parte de Corfo e InvestChile, ganaron grandes consorcios tecnológicos chilenos, chinos y coreanos, quienes firmaron compromisos de inversión por más US$ 700 millones y 650 empleos calificados. Y hasta ahora ni siquiera se ha fijado un precio para vender el litio a estas empresas, ni qué producto va a ser el que van a comercializar.

Fue en los contratos que firmó Corfo con Albermarle, en enero de 2017, y con SQM en el mismo mes de este año, donde se estableció que el 25% de la producción de litio de estas compañías se ofrecerá a un precio preferente a firmas que dieran un valor agregado en el país.

Chile se inserta de esta manera en la cadena de la electromovilidad a nivel mundial, lo cual es una muy buena noticia para las regiones del norte del país, donde empezamos a generar industrias manufactureras en regiones que hasta ahora dependían fundamentalmente de recursos mineros”, explicó Eduardo Bitran, el 9 de marzo de este año, a dos días de dejar su puesto como vicepresidente ejecutivo de Corfo.

Ese día se anunció que la empresa china Fulin, el consorcio coreano Samsung SDI-Posco, y la chilena Molymet habían sido seleccionadas para industrializar el litio a partir del contrato con Albemarle. En el caso de Fulin, se comprometió a producir en régimen cerca de 20.000 toneladas al año de material catódico. En su oferta ofreció invertir un monto total de US$ 100 millones, y consideraba el emplazamiento de una planta y su equipamiento. La inversión del primer año sería de US$ 45 millones y al tercer año se completaría la inversión.

Según recuerda El Mercurio, Samsung SDI-Posco prometió elaborar cerca de 19.000 toneladas al año de material catódico con diversas líneas de producción. Este consorcio ofreció invertir US$ 285 millones, que también consideraba planta y equipamiento. La inversión inicial sería de US$ 52 millones, y al cuarto año se completaría la inversión.

Por último, Molymet, propuso fabricar 19.000 toneladas al año de material catódico, ofreció invertir US$ 360 millones en planta y equipamiento. La inversión inicial sería de US$ 35 millones y al quinto año se haría un escalamiento de la producción hasta completar la inversión total. A diferencia de las dos anteriores, Molymet ya cuenta con operaciones e infraestructura en el Complejo Portuario de Mejillones a través de Molynor.

Ninguna de las empresas ha podido avanzar con sus inversiones.

Samsung pide hidróxido de litio, pero Albemarle no lo produce en Chile. A partir del litio que se extrae del Salar de Atacama se elaboran principalmente dos productos, carbonato de litio e hidróxido de litio, ambos empleados para componentes de acumulación energética, pero el hidróxido tiene mayor pureza y mejor reacción. Y, por ende, es más caro. Este producto es el que necesita Samsung para poder iniciar la construcción de su planta. Pero la respuesta de la empresa de capitales estadounidenses es una sola: Albemarle no produce hidróxido en Chile, por lo que mal podría venderle.

De hecho, en el contrato entre la estatal y la ex Rockwood, única competidora de SQM en Salar, se establece que habrá una “opción independiente de construcción de planta de hidróxido de litio grado batería de 5.000 toneladas. Sujeto a desarrollo tecnológico eficiente que permita procesar directo desde salmuera a hidróxido, con una cuota adicional de 34.776 toneladas de litio metálico equivalente”. El tema pasa porque esa tecnología aún no es desarrollada por Albemarle en Chile, y tampoco hay un plazo estimado para ello.

“La venta de hasta el 25% de nuestra producción a precio preferente para las empresas que se instalen en Chile sigue avanzando según lo planificado en total normalidad. Es un proceso en el que priman la buena fe y la voluntad de alcanzar los acuerdos necesarios. Para ello estamos en continuo contacto con Corfo y, de igual manera, nos hemos reunido con las empresas seleccionadas para conocer sus necesidades, de manera de poder responderlas de la mejor forma, sabiendo que el horizonte es generar un ecosistema productivo en torno al litio, que va en directo beneficio del país”, respondieron desde Albermarle a “El Mercurio”.

David Klanecky, vicepresidente de la división de Litio de Albemarle Corporation, de visita en Chile, señaló que “he viajado especialmente para seguir avanzando en este proceso en el cual Albemarle ha prestado toda su colaboración, poniendo en contacto a empresas interesadas con Corfo, apoyando la difusión internacional de la convocatoria y, por cierto, cumpliendo los compromisos adquiridos de entregar hasta 25% de nuestra producción a un precio preferente a las empresas que se instalen en el país. Por ello es que tengo en estos días reuniones con Samsung-Posco y Sichuam Fulin, para seguir avanzando en esta iniciativa que tendrá un impacto muy positivo para Chile”.

Desde esa fecha a esta parte, cuentan conocedores del proceso, no se ha podido concretar un contrato con las empresas ganadoras de la licitación, por dos motivos: no está claro qué producto van a comercializar, ni a qué precio.

Sobre el primer punto, la estadounidense ha incluso analizado vender hidróxido de litio de sus instalaciones en Australia o en Estados Unidos, donde sí elaboran ese subproducto.

 

Mercado de energía de clientes libres crece un 14% el último año

Mercado de energía de clientes libres crece un 14% el último año

(El Mercurio) El mercado de los clientes libres en materia de consumo eléctrico -aquellos que poseen una potencia instalada de 500 kW y que son abastecidos de manera directa por las generadoras- no para de crecer. Según datos actualizados entregados por el Coordinador Eléctrico Nacional, las ventas a este segmento en los últimos doce meses han presentado un crecimiento acumulado de un 14% a mayo, mostrando un importante contraste con lo visto en el área los clientes regulados, cifra que en el mismo período cayó un 6%.

La tendencia se ha visto impulsada desde el cambio normativo que permitió que grandes consumidores de electricidad puedan elegir a cuál régimen adscribirse, lo que incluso puede significar ahorros de hasta 30%.

Esta tendencia ha elevado el apetito de las generadoras, que incluso, a través de avisos publicitarios, buscan captar una mayor cantidad de clientes.

Según el último reporte del Coordinador al mes de abril, aún hay más de 2.600 firmas que cumplen el requisito para cambiar de régimen.

[VEA TAMBIÉN: Tarifas para el sector de clientes libres suben 10% en el último año]

Pero estas empresas se quejan de la asimetría en la información a la que acceden, que según ellos sigue favoreciendo a las distribuidoras. «Creemos que es importante eliminar las barreras que aún dificultan una competencia pareja en este segmento de clientes», dicen en Colbún.

Desde AES Gener agregan que para emparejar la cancha debiese haber detalles respecto a temas como el punto de retiro preciso de electricidad, el perfil de demanda mensual e ideal horaria y la potencia suministrada. «Es información mínima que debería publicarse a todos los actores del mercado, con lo que el cliente contaría con ofertas más competitivas», añaden.

Plantean desafío de masificar uso de motores de alta eficiencia en el país

Plantean desafío de masificar uso de motores de alta eficiencia en el país

La necesidad de avanzar hacia la masificación de motores de alta eficiencia en el sector industrial del país fue uno de los principales objetivos planteados en la segunda versión del Encuentro de Motores de Alta Eficiencia, Emae 2018, organizado por la Agencia Chilena de Eficiencia Energética (AChEE) y Procobre, donde el foco estuvo puesto en los motores eléctricos en el marco de la electromovilidad, así como en los desafíos a futuro para implementar la eficiencia en estos equipos.

Ignacio Santelices, jefe de la División de Eficiencia Energética del Ministerio de Energía, destacó la necesidad de aumentar la eficiencia de los motores, precisando que estos equipos «son críticos para la eficiencia energética, pues en torno a un tercio de la energía del país lo consumen los motores y solo un 5% de estos son de alta eficiencia, por lo que tenemos que ver cómo avanzamos a masificar esto, con un esfuerzo público-privado».

El personero recordó la importancia que tiene este tema en el Ministerio de Energía, señalando que «tres de los diez compromisos de la Ruta Energética son de eficiencia energética, como el proyecto de ley sobre la materia, mejorar la calidad de la biomasa y avanzar en electromovilidad».

Santelices mencionó que dentro de las líneas de acción que realizan este año, junto a la AChEE, está un proyecto de ley para que las grandes empresas hagan gestión de la energía, «que sean capaces de identificar sus potenciales, y conocer las oportunidades que tienen para implementar medidas de eficiencia energética».

AChEE

Emae 2018 también contó con la participación de Sebastián Jure, director ejecutivo (s) de la AChEE, quien sostuvo que el tema de los motores es «una parte importante de los costos energéticos del sector productivo y es también donde hay mayores oportunidades de hacer eficiencia energética de la mano de mejor tecnología».

Según indicó Marcos Sepúlveda, director ejecutivo de Procobre, el aumento en la eficiencia de los motores que se utilizan en el sector industrial en el mundo ha significado triplicar la demanda de cobre por cada uno de estos equipos, en un proceso productivo que se incrementará también por el mayor consumo de este metal debido a la masificación de la electromovilidad.

El ejecutivo planteó que en los últimos 30 años el nivel de eficiencia de los motores se elevó, de un 89% hasta 94%, “lo ha significado triplicar el consumo de cobre por unidad. En un motor de 40 HP (caballos de fuerza) esto implica pasar de 10 a 30 kilos por cada unidad”.

 

[VEA TAMBIÉN: Buscan posicionar motores eléctricos de alta eficiencia en la industria y minería]

Electromovilidad

Sepúlveda sostuvo que la electromovilidad es otro de los pilares que aumentarán la demanda de cobre para su uso en los motores de vehículos eléctricos: “En los próximos diez años el consumo de cobre por electromovilidad será 1,8 millón de toneladas y, dentro de esto están los motores, principalmente por los cables y circuitos”.

“Como industria del cobre la electromovilidad es un pilar fundamental, tanto para nuestro país en particular, que somos uno de los principales productores de cobre y litio en el mundo, sino también por el cuidado medioambiental”, afirmó.

El primer panel de Emae 2018 abordó el tema de los motores en el marco de la electromovilidad, donde el presidente de la Corporación de Normalización Electrotécnica, Víctor Ballivián, señaló la necesidad de avanzar hacia una estandarización de las piezas de los autos eléctricos, pues aseguró que un freno para la mayor incorporación de estos vehículos es que la industria mantiene sus tecnologías propias de carga, «lo que implica un desarrollo de infraestructura tremendamente costoso».

«Si queremos que los autos eléctricos se convierta en productos masivos en el mercado, el uso de estándares internacionales para infraestructura, suministro eléctrico y para el propio vehículo son esenciales, por lo que las normas internacionales proporcionan una base para la seguridad de una inversión para los reguladores, para los proveedores de la infraestructura y finalmente para los consumidores», agregó Ballivián.

Impuesto verde: Eléctricas recibirán compensación hasta el 90% de lo pagado por tributo

(Diario Financiero) Relativo terminó siendo para varias eléctricas el impacto del primer año de aplicación del impuesto a las emisiones, gravamen que es parte de la reforma tributaria.

Esto, porque la normativa legal considera un mecanismo de compensación que se activa en determinadas circunstancias y que corre por parte de todas las generadoras del sistema, el cual permitirá que a algunas empresas se les devuelva hasta el 90% de lo que les correspondió pagar en abril recién pasado, con cargo al ejercicio 2017.

De acuerdo con los cálculos del Servicio de Impuestos Internos (SII), las generadoras explicaron el 94,8% del monto anual total a pagar por este gravamen y que alcanzó a $ 115.362 millones, equivalentes a casi US$ 181 millones.

Esto implica que de esta cifra, las productoras de electricidad asumieron $109.312 millones, unos US$ 171 millones.

El artículo 8 de la ley de reforma tributaria establece que dado que el impuesto a las emisiones no debe ser considerado en la determinación del costo marginal instantáneo de la energía, que es el factor que representa la operación de la central menos eficiente del sistema en un momento determinado y es el indicador con el que se valorizan los intercambios de energía entre las generadoras, aquellas unidades cuyo costo total unitario sea mayor o igual al costo marginal deberán recibir una compensación. Esta será solventada por todas las eléctricas del sistema a prorrata de la cantidad de energía que hayan retirado de la red en ese período, independiente de si se trata de unidades que no producen emisiones, como las eólicas o solares, por ejemplo.

Hace pocos días, el Coordinador Eléctrico Nacional liberó el balance de este reintegro, el que en algunos casos ascenderá hasta el 90% de lo pagado al fisco y se recibirá a fines de junio, cuando vence el plazo para que las generadoras realicen este pago.

Las cifras del organismo que administra la operación del sistema dan cuenta de que las compensaciones ascenderán a casi al 15% del monto total de impuesto calculado por el SII, lo que alcanza a poco más de US$ 25 millones ($ 16.174 millones).

Si bien los productores renovables esperaban un monto como el informado por el Coordinador, insisten en la crítica a este mecanismo.

“Nuestro desacuerdo es de fondo, con la disposición que obliga a que todas las empresas que efectúan retiros de energía concurran al pago de la compensación, con lo cual se obliga a empresas que no contaminan a pagar una parte de la compensación. Esta situación es única en el mundo y es imposible sostener su racionalidad cuando se la explicamos a inversionistas extranjeros”, asegura Carlos Finat, director ejecutivo de Acera, el gremio del sector.

[VEA TAMBIÉN: Impuestos verdes recaudan casi US$ 300 millones y 94% de tributos a fuentes fijas lo pagan termoeléctricas]

Caso a caso

El balance del Coordinador muestra que un operador pequeño como Orafti, que posee una central de biomasa, recibirá como compensación el 90% del monto que tributó por este concepto, es decir $55 millones de un total de $ 61,2 millones, siendo el porcentaje más alto de devolución en este cálculo.

Entre las empresas más grandes destaca la filial de BHP Tamakaya, de la que depende la central a gas natural Kelar, a la que se le compensará el 65,3% de lo tributado, es decir, casi $800 millones.

Le sigue en importancia Engie Energía Chile, a la que el sistema le pagará el equivalente al 51,7% de los $11.702 millones que pagó como impuesto a las emisiones, es decir, más de $ 6.000 millones.

A las otras líderes de la industria, como Enel Generación Chile, AES Gener y Colbún les compensarán el 10,4% ($ 1.485 millones), 6% ($ 1.205 millones) y 1,56% ($ 219 millones), respectivamente.

Sin embargo, a las dos primeras hay que sumarles las devoluciones de sus filiales como GasAtacama (26% con $ 546 millones) y Guacolda (23% con $ 2.490 millones), respectivamente.

Reforma tributaria incluiría cambios a la manera en que se paga el gravamen

La forma en que tributan las fuentes fijas contaminantes está bajo la lupa del Ministerio de Hacienda. En el marco del proyecto de simplificación de la reforma, la cartera se encuentra analizando fórmulas para ajustar su tributación, haciéndola más simple y evitando distorsiones.

Uno de los temas que están analizando en la cartera es la propuesta de gremios como Chilealimentos y AB Chile, que han planteado críticas por la manera en que se paga el tributo, ya que advierten que la ley no considera la naturaleza del negocio agroindustrial.

Por ejemplo, han señalado que las empresas del sector han debido pagar el impuesto ya que superan el límite de emisiones en apenas tres meses del año (la temporada alta para la agroindustria), mientras que otras fuentes fijas han cancelado un gravamen menor aunque funcionen durante los 12 meses del año.

Fuentes de la cartera señalan que miran «con atención» dicha propuesta, señalando que los cambios irían por ese lado más que por incrementar el gravamen: «Ese impuesto ya está recaudando mucho», dicen.