(El Mercurio) El crecimiento del sector salmonero predomina en la Región de Los Lagos. Pero también existen otros, como el de la construcción, marítimo-portuario y turismo que están tomando fuerza, y es ahí donde se necesitan más jóvenes técnicos calificados.
Bajo este contexto se realizó ayer en Puerto Varas el II seminario «Educación Técnica para el Desarrollo» -organizado por la ONG Canales y la gremial de armadores de la zona sur del país, Armasur-, que tuvo como tema la necesidad de impulsar la educación técnica en el país e instar a las empresas a que apoyen ese desarrollo.
«La educación técnica debe ser uno de los pilares más fundamentales para el desarrollo del país. Pero también una de las tareas más difíciles de enseñar. Es teoría y mucha práctica (…) Todos tenemos un rol que cumplir», dijo Jorge Pacheco, presidente de la ONG Canales, que se dedica a crear nexos entre empresarios y liceos técnicos.
El encuentro, al que asistieron más de 600 personas, contó con dos paneles. El primero de ellos conformado por Pablo Bosch, gerente general de B. Bosch; Cristóbal Huneeus, asesor de la ministra del Trabajo; y la hermana Karoline Mayer, de la Fundación Cristo Vive, donde se abordó el rol del empresario. «Como sociedad, debemos valorar más la capacidad que el título. Tenemos que ser capaces de poner en puestos a gente descollante, aunque no tengan título», dijo Bosch, quien agregó que hay que cambiar la creencia de que el universitario está por sobre un técnico.
Huneeus, en tanto, enfatizó en la necesidad de recortar la brecha entre el empleo masculino y femenino. Agregó que el país también necesita producir bienes y servicios, «y sin técnicos eso no va a pasar», dijo.
El segundo panel estuvo integrado por el gerente general de Maersk Container Industry-San Antonio, Francis Mc Cawley, y dos expertos noruegos, Bjørnar Johansen y Robert Skarpnes, quienes explicaron el modelo educativo que han implantado en ese país. Enfatizaron la importancia de crear lazos entre los colegios técnicos y las empresas que tienen la maquinaria para que los alumnos practiquen. «Hay que incentivar a las empresas a que tomen estudiantes y los formen, que inviertan en esto», dijo Skarpnes. Mc Cawley, en tanto, dijo que «la empresa es absolutamente necesaria para armar la base de la educación técnica. No seremos un país desarrollado con salmones y fruta. El futuro es el sector industrial».