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Cómo han vivido la pandemia las mujeres líderes de empresas

(La Tercera-Pulso) Cinco mujeres al timón: Nuria Hernández, gerente general de Unilever; Marta Colet, de Aguas Andinas; María Teresa González, gerente general de Statkraft; Ximena Auli, de 3M, y Loreto Silva, presidenta de Enap, nos muestran cómo han vivido la situación de emergencia que ha generado el coronavirus. Para todas, una de las crisis más relevantes que han tenido que enfrentar.

Nuria Hernández, Unilever: “Nada seguirá siendo como era hasta ahora”

Nuria Hernández sabe de crisis: como integrante de Unilever le ha tocado vivir varios eventos que han marcado su carrera profesional. Uno de ellos fue la crisis económica global del año 2007, cuando ella aún estaba en España. “Ese país fue tremendamente golpeado y arrastrado por una profunda crisis que llegó a generar un desempleo mayor al 50% en gente joven. En ese momento, como compañía nos vimos obligados a reinventarnos y adaptar nuestro portfolio a un nuevo consumidor con menor poder económico, persiguiendo la oportunidad”, recuerda hoy la ejecutiva.

Pero también tuvo que enfrentar un desastre natural cuando le tocó vivir de cerca el paso del huracán María por Puerto Rico y parte del Caribe. En ese momento, cuenta Hernández, ella estaba recién asumiendo como director general de Caribe para Unilever.

“En esa oportunidad, lo primero y más importante fue poner el foco en nuestros trabajadores y en su seguridad, al punto de dedicar varios días de trabajo hasta tener la certeza de que todos estaban a salvo, ya que con la caída de las comunicaciones se hizo muy difícil. Muchos de ellos se vieron afectados y quedaron en condiciones muy vulnerables, sin electricidad por meses y con falta de servicios básicos, por lo que salimos con toda la fuerza en apoyo de nuestro equipo primero, para luego salir en apoyo de la comunidad a través de muchas acciones”, recuerda.

Hoy, indica, “esta crisis sin precedente es la más difícil que me ha tocado enfrentar, porque tiene implicancias no sólo para el negocio, sino que para la vida de las personas. Y lo único que sabemos es que nada seguirá siendo como era hasta ahora”.

En lo personal, señala que echa de menos el contacto físico y las relaciones presenciales, “pero nos hemos ido adaptando con el fin de que estemos todos seguros y saludables”. Es que todos los administrativos de la firma están trabajando desde sus casas desde el 16 de marzo. Pero la firma se estaba preparando para la pandemia desde febrero, cuenta Hernández. “Sabíamos que la pandemia llegaría al país más temprano que tarde, por lo que no nos tomó por sorpresa”, dice.

La firma ya contaba con el stock suficiente de mascarillas para sus empleados. Además, ya habían armado un plan de trabajo que incluía la aplicación de home office y los protocolos que tendríamos que aplicar en nuestras plantas productivas y centro de distribución. “La planificación anticipada resultó fundamental”, recalca. Junto con esto, la firma, entre marzo y abril, adelantó el pago de remuneraciones a sus trabajadores con el fin de alivianar sus cargas y evitar las aglomeraciones de las compras de fin de mes.

María Teresa González, Statkraft: “Esto va a marcar un antes y un después”

Para María Teresa González, gerenta general de Statkraft, las crisis ayudan a fortalecer los lazos en las compañías y eso es lo que está viendo en la eléctrica que lidera, pese a que esta, indica, “es una gran crisis por la magnitud global y la incertidumbre que genera”.

Recuerda que en febrero del año 2010, cuando fue el terremoto, era gerenta de Recursos Humanos de Esbbio y rememora que para ella, esa crisis fue durísima, pues tenían trabajadores afectados por la tragedia natural. “Fue una gran experiencia, porque la crisis sacó lo mejor del trabajo en equipo y finalmente fue muy épico, que es lo mismo que estamos viendo hoy en Statkraft: la crisis ha fortalecido nuestros lazos y la preocupación por la compañía y por el servicio esencial que prestamos”, señala.

Statkraft, eléctrica de capitales internacionales que opera en Chile desde el año 2014 -cuando absorbe los activos de SN Power- lleva más de un mes con la gran mayoría de sus trabajadores teletrabajando, situación que para ella, reconoce, no ha sido fácil, pues “se mezcla con las labores de la casa, la educación de los hijos y el cuidado personal, todo en el mismo espacio y tiempo”.

Por eso, la firma ha implementado una serie de canales de apoyo para sus colaboradores, los que van desde la entrega de un bono para la compra del equipamiento necesario para trabajar, capacitación y apoyo emocional, a través de una serie de consejos para abordar el trabajo desde casa y conversatorios en línea para mantener la comunicación y conocer cuáles son las principales preocupaciones de las personas. Incluso esperan, prontamente, implementar la asistencia sicológica para quienes lo requieran.

Pero María Teresa cuenta que la compañía ha ido un paso más allá y han implementado una nueva medida que espera se mantenga en la firma post Covid. Se trata de un modelo de recursos humanos denominado Yupi, que define de forma sencilla los diferentes grupos de trabajo que tiene la compañía, evaluando carga laboral, características familiares, situación de salud física y emocional y otros factores personales, para así poder definir horarios de trabajo diferenciados, redistribuir cargas de trabajo y potenciar el trabajo colaborativo.

“Claramente cambiará nuestra forma de trabajar. El teletrabajo y las labores a distancia son totalmente compatibles con los objetivos de una empresa y también con la familia. Esto va a marcar un antes y un después en materia de conciliación trabajo y familia. Además, siento que estamos volviendo a dar valor a lo esencial del ser humano, el contacto, la comunicación, la colaboración y esto es fundamental para el desarrollo sostenible de una compañía”, relata la ejecutiva.

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Loreto Silva, presidenta del directorio de Enap: “Para mí, ha sido la peor crisis”

La peor crisis que ha tenido que enfrentar en su vida profesional. Así describe la presidenta de Enap, Loreto Silva, la pandemia que tiene a casi el 40% de la dotación de Enap trabajando de manera presencial. Es que algunas labores de la petrolera requieren mantener la rutina laboral y no aplica el teletrabajo.

“Para mí ha sido la peor crisis. En los otros trabajados que he tenido mi labor se relacionaba con obras que generan impacto económico, pero no es lo mismo que sentir que eres responsable de la seguridad y la vida de los trabajadores. El factor humano es muy fuerte, porque uno siente que las personas están con un nivel de angustia muy alto y que están asustados por la vida, la salud, el trabajo, en fin, por todo y el deber de uno es generar contención”, explica la exministra de Obras Públicas durante el primer gobierno de Sebastián Piñera.

Por eso, la presidenta de la mesa de la petrolera no dudó en enviar un mensaje cercano a los trabajadores, donde les agradecía el compromiso y también les recalcaba que estos son “tiempos difíciles y de incertidumbre para todos” y que por lo mismo, “quiero manifestarles el total y completo compromiso del directorio con su salud y seguridad”, recuerda.

Loreto Silva detalla que la compañía comenzó a aplicar una cuarentena voluntaria a todos aquellos empleados que, producto de sus vacaciones, venían del extranjero. Luego, se comenzó a implementar, de manera gradual, el trabajo desde el hogar, modalidad que ha tenido éxito, afirma. “Estoy gratamente sorprendida y muy admirada del sentido de propósito y de servicio que tienen los trabajadores, todos tienen conciencia en lo que están”, recalca.

La firma implementó un canal de apoyo psicológico para enfrentar la cuarentena y también diseñó un comité Enap Saludable, para implementar medidas que beneficiarán tanto el trabajo a distancia como el autocuidado y lo que vendrá en la próxima operación retorno. También se reforzó el comité financiero, pues hoy el escenario que enfrenta la compañía es complejo. “Hay una situación más difícil, porque a nivel global tenemos menos demanda. Hoy tenemos más requerimientos porque estamos obligados a seguir funcionando más allá de la situación mundial en materia de combustible… y el crédito es algo que se mira de manera permanente. Hoy estamos tranquilos, pero estamos monitoreando la situación como estoy segura lo están haciendo todos”, reconoce Silva.

Sobre el futuro, indica que es probable que el teletrabajo se mantenga. “Creo que todos hemos aprendido a valorar el teletrabajo como una forma eficiente de trabajar y como una forma que ayuda a las personas a compatibilizar mejor su vida laboral con su vida familiar. Todos le hemos perdido el miedo al teletrabajo”, recalca.

Ximena Auil, 3M: “Volveremos a lo simple”

Volver a lo simple. Eso dice Ximena Auil, gerenta general de 3M, será una de las cosas que cambiará el coronavirus. “Volveremos a lo simple, nos preocuparemos de cosas más básicas que nos dan satisfacción y cada uno tendrá nuevos desafíos personales en torno a lo que hemos reflexionado”, asevera.

La ejecutiva que lleva 25 años en la compañía, recién venía llegando al país, desde Estados Unidos, donde estuvo tres años y medio. Ya en Chile estuvo unos días en la oficina -ubicada en la comuna de Providencia- y luego comenzó a hacer teletrabajo. “Es probable que este sea uno de los grandes desafíos de mi carrera, no solamente por la situación de crisis y contingencia, sino porque es una nueva manera de trabajar”, señala.

Es que a Ximena le ha costado trabajar desde la casa, donde aprendió a hacerse una rutina y también comenzó a establecer horarios para el ocio y los hobbies. “Me cuesta desconectarme los fines de semana o en las noches. En general, estoy, en cantidad de horas, trabajando mucho más. Por eso necesito entrar en una disciplina de no ocupar mucho tiempo en el trabajo. Ahora, por ejemplo, como no soy buena para cocinar, estoy aprendiendo”, cuenta.

Idea que le ha servido, pues una de las medidas que implementó la compañía para estar cerca de sus trabajadores fue crear espacios para mostrar cómo ha sido el teletrabajo en las casas. “Apenas empezó la cuarentena pusimos en marcha un programa denominado ‘#QuedateEnCasa… En 3M, más unidos y motivados que nunca’, un nuevo programa de actividades e información para acompañar a la gente durante el trabajo desde casa en el contexto de la crisis sanitaria”, explica. Y esto incluye, por ejemplo, enviar selfies cocinando o practicando alguna actividad distinta de trabajar. También comenzaron a impartir clases de yoga y de nutrición, para soportar el encierro, entre otras cosas.

A su favor jugó que conocía a la gente con la que iba a trabajar, porque ya había estado 20 años en Chile. “Esa fue, sin duda, una gran ayuda, porque en estos momentos la cercanía y conocer a las personas es clave”, relata.

3M es la fabricante de mascarillas respiratorias, las que generalmente se utilizan en el mundo industrial, pero dado el avance de la pandemia, se comenzó a usar en el sector de la salud. Por eso, la firma, cuenta la ejecutiva, ha tenido estrechos lazos con la autoridad y con Cenabast, con quienes han trabajado con anticipación para abastecer del insumo, el que hoy se transformó en un elemento de primera necesidad.

Marta Colet, Aguas Andinas: “El planeta nos ha hecho un llamado en esta crisis”

Dos crisis está viviendo hoy Marta Colet. La gerenta general de Aguas Andinas pide no olvidar el crítico escenario hídrico que vive el país, ya que la falta de agua podría agravar el control de la pandemia en Chile. “Reconozco que ahora nos enfrentamos a dos crisis al unísono, la del coronavirus y la grave escasez hídrica que nos golpea por más de 10 años. Y nadie debe olvidar la realidad y las posibles consecuencias de esta crítica combinación. ¿Alguien puede imaginarse cómo podríamos afrontar esta pandemia sin agua?”, sentencia.

La compañía comenzó a prepararse para enfrentar el coronavirus cuando la enfermedad estaba en fase 2, relata la ejecutiva, época donde la empresa implementó varias medidas paliativas. “Desde ese momento, y como es la tónica general en nuestra compañía, hemos mantenido una comunicación diaria y permanente con toda la organización, porque entendemos que ello también disminuye la incertidumbre y reciben información de primera fuente, sobre lo que está ocurriendo en relación con la empresa”, señala.

Una de las medidas adoptadas fue la implementación de conversatorios online con expertos en salud pública y epidemiología de la Universidad Católica. “Los trabajadores han podido plantear todas sus preguntas y recibir orientación respecto del virus y cómo prevenir contagios en casa y en el trabajo”, explica Colet. Asimismo, la firma ha abierto líneas telefónicas de asistencia directa y permanente con expertos de salud para atender todas las dudas de sus colaboradores, “porque queremos que estén tranquilos y que dispongan de toda la información necesaria sobre la situación actual”, recalca.

La ejecutiva cambió su oficina, ubicada en calle Balmaceda, por una en su casa, para trabajar de manera remota, ocasión que le ha permitido valorar estar diariamente con su familia. “Siempre se agradece estar más tiempo con tus seres queridos”, dice. Sobre el futuro, piensa que la pandemia cambiará las normas de relación social e incluso las formas de trabajar. “Desde el punto de vista económico, quisiera que la gente que ha perdido su trabajo vuelva a recuperarlo lo antes posible y que el país salga pronto de esta crisis. Pero, sobre todo, me gustaría que saliéramos de esta pandemia con mayor sensibilización medioambiental. El planeta nos ha hecho un llamado en esta crisis y agradecerá que lo escuchemos”, señala la ejecutiva.

Gobierno y empresas buscan ampliar beneficiarios por cuentas básicas

Gobierno y empresas buscan ampliar beneficiarios por cuentas básicas

(La Tercera-Pulso) Este miércoles podría votarse en sala del Senado el proyecto de ley impulsado por parlamentarios de oposición y que busca prohibir los cortes de servicios básicos a todos los clientes, y que quines acumulen deudas en este período puedan pagarlas sin multas ni interés durante los próximos 24 meses.

El tema genera preocupación en el gobierno, pues creen que de llegar a convertir-se en ley, la situación de pequeños distribuidores de ser-vicios eléctricos, sanitarios e incluso de telecomunicaciones, sobre todo en zonas aisladas, podría complicarse. A juicio del ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, no tiene mucho sentido realizar este sacrificio para ayu-dar a personas que sí pueden pagar la cuenta.

El tema choca, además, con el acuerdo firmado entre el gobierno y las empresas de luz, agua y telefonía móvil, que permitirá ir en ayuda del 40% más vulnerable de la población -y no del 100%, como plantea el proyecto- y de grupos como adultos mayores y personas que hayan perdido su empleo.

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Este jueves, el ministro Jobet dijo ante los senadores de la Comisión de Economía que están dialogando con las empresas para profundizar en la ayuda y que, más aún, el sector sanitario realiza algo parecido. Uno de los nuevos grupos que podrían beneficiarse se-rían los trabajadores suspendidos luego que su empresa se acogiera a la Ley de Protección del Empleo, lo que aumentaría sustancialmente el universo de beneficiarios.

“Creemos que es importan-te precisar o ampliar estos casos especiales, que están fuera del 40% y que evidentemente necesitan ayuda. Hemos avanzado muy bien en las conversaciones con el sector eléctrico, y entendemos que hay un avance también en el sector sanitario, para que además del 40% se puedan incluir a todas las personas que hubieran activado el seguro de cesantía, a todos quienes hayan sido suspendidos en virtud de la Ley de Protección del Empleo, ser adulto mayor de acuerdo con la definición del Senama, y todos los trabajadores inde-pendientes que, sin estar dentro de los otros grupos, acrediten dificultades, presentando una declaración jurada simple”, dijo Jobet.

Ricardo Falú, AES Gener: “Nuestra estrategia como compañía no ha cambiado»

Ricardo Falú, AES Gener: “Nuestra estrategia como compañía no ha cambiado»

(La Tercera-Pulso) Una extensa junta de accionistas tuvo ayer la generadora eléctrica AES Gener, en la que los ejecutivos se refirieron a la crisis sanitaria que atraviesa el país y al futuro de sus operaciones e inversiones. En la instancia, el gerente general de la compañía, Ricardo Falú, aseguró que, si bien la situación de pandemia ha tenido impacto en algunos de los exportadores mundiales que les suministran combustible, “hemos tomado las medidas requeridas para contar con el inventario necesario por varias semanas.

La pandemia también nos ha desafiado a adaptarnos ágilmente a un nuevo escenario”. En relación al funcionamiento de sus operaciones, el máximo ejecutivo señaló que están funcionando debidamente, con planes de contingencia para asegurar que ante un escenario de medidas sanitarias aún más restrictivas se pueda contar con la dotación necesaria para asegurar el cumplimiento de sus obligaciones ambientales y de seguridad en los diversos frentes de trabajo.

Agregó que “hemos mantenido comunicación permanente con las  autoridades y comunidades”. En los proyectos Mesamávida y Los Olmos, ubicados en la Región del Biobío, se sinceró que hay retrasos principalmente ocasionados por disrupciones en la cadena de suministros -partes que se fabrican en países como China o India. No así, la expansión de Andes Solar que está en su fase final para ponerse en pruebas. El sector eléctrico ha tenido diversas modificaciones en los últimos meses como el mecanismo de estabilización de precios de la energía o el apoyo al 40% más vulnerable de la población para el pago de sus cuentas de luz. En este último aún no hay definición de cómo se dividirá la industria los cobros, por lo que el escenario es incierto en cuánto a lo que AES podría verse afectado. “Como compañía, nuestro rol no es predecir el futuro, pero sí planificar en no es predecir el futuro, pero sí planificar en base a distintos escenarios para garantizar la seguridad de nuestra gente y la continuidad del negocio”, dijo Falú.

Ayer, los accionistas de la compañía aprobaron un aumento de capital por US$500 millones, para seguir avanzando en las inversiones de la firma.

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¿Cree que se podría ver afectada la cadena de pago, dado el contexto actual?

—Nuestra empresa, que no es inmune a los impactos de la pandemia, tiene una estrategia comercial, operacional y financiera resiliente.

¿Ve un posible atraso en Alto Maipo?

—El proyecto Alto Maipo tiene el 87,4% de avance y continúa su construcción. Res-tan solo 4,5 kilómetros de túneles para que el proyecto comience a generar energía con sus dos plantas. Al igual que con nuestras operaciones, hemos imple-mentado todas las medidas y protocolos para garantizar la seguridad de nuestros trabajadores, nuestros contratistas, sus familias y la comunidad.

¿Cambió el foco de inversión para este año?

—Nuestra estrategia como compañía no ha cambiado. Nuestras metas y el camino que nos hemos trazado siguen vigentes y seguiremos trabajando para acelerar la descarbonización de la matriz energética de Chile y di-versificar el sistema eléctrico colombiano.

¿Cómo ven el proyecto que avanza en el Congreso sobre gratuidad en cuentas de luz y otros servicios básicos al 40% de la población? ¿qué efecto tendría en AES si se aprueba?

—Confiamos que el Ejecutivo y los parlamentarios encontrarán una solución que alivie a las familias chilenas más vulnerables y, al mismo tiempo, no afecte a las empresas del sector eléctrico que hoy están realizando un trabajo heroico para mantener el suministro de la energía eléctrica que el país re-quiere para afrontar los desafíos de la pandemia. Los generadores estamos con-tribuyendo con el financia-miento de US$ 1.350 millones del Fondo de Estabilización Tarifaria.

Coronavirus: Seis rostros del sector energético responden a seis preguntas sobre la crisis

El efecto de la actual crisis sanitaria en la industria energética, desencadenada por el coronavirus, así como la relevancia que ha adquirido la infraestructura eléctrica en el funcionamiento del país, junto a los desafíos futuros, entre los cuales está enfrentar la pobreza energética, son parte de los temas abordados con ELECTRICIDAD por parte de seis integrantes de Escenarios Energéticos, instancia que agrupa a asociaciones gremiales y de la sociedad civil, vinculados con el sector de la energía.

Los dirigentes coinciden en la importancia que tiene seguir avanzando en materia de descontaminación, descentralización y digitalización en la industria energética, como parte de la actual transición que se vive en el mundo y en Chile, lo cual también tendrá impacto a causa de la pandemia.

Diego Luna, director ejecutivo de Escenarios Energéticos y representante en Chile de Fundación Futuro Latinoamericano, señala que, desde la perspectiva de la revisión y actualización de la Política Energía 2050, «la crisis sanitaria el covid-19 plantea dos retos fundamentales: poner a las personas al centro de la política pública y en particular a los sectores más vulnerables, en términos de que se generen beneficios directos en una mejor tarifa para los consumidores, en mejor calidad del aire que se respira en las ciudades, mejores condiciones para calefacción de las viviendas y reducir, de manera real, las brechas de pobreza energética que existen en Chile.

«El segundo reto, tiene que ver con como la política energética incorpora mecanismos para responder a escenarios de emergencia, pues las crisis han llegado para quedarse. Primero fue el estallido social, ahora el covid-19 y de seguro vienen más crisis en el horizonte. Es por eso que la Política Energética debería trazar objetivos específicos, acciones, metas e indicadores, desde los cuales poder responder de manera oportuna y efectiva a esta nueva realidad», agrega.

Los integrantes de Escenarios Energéticos que dieron su visión sobre estos temas son: Carlos Finat, director ejecutivo de Acera A.G.; Carlos Cortés; director ejecutivo de la Asociación de Distribuidores de Gas Natural; Hernán Blanco, representante país de Fundación Avina; Sara Larraín, directora ejecutiva de Chile Sustentable; Annie Dufey, gerenta de Desarrollo de EBP, y Claudio Seebach, presidente ejecutivo de Generadoras de Chile.

Análisis

¿Qué análisis hacen respecto a la crisis sanitaria actual y su efecto en el consumo de energía?

Carlos Finat: El efecto de corto plazo directo ya se está viendo con la baja de algunos puntos porcentuales de la demanda. Sin embargo, hay otro efecto, de más largo plazo, del cual hay que preocuparse. Me refiero al desafío de cómo llevar al consumidor final a que se beneficie de los menores costos de las renovables y cómo darle una relativa estabilidad tarifaria que lo defienda de variaciones de la tasa de cambio.

Carlos Cortés: Uno de los principales desafíos para la industria del gas natural en el contexto de esta crisis sanitaria es mantener la continuidad del suministro de éste, tanto desde los terminales de Quintero y Mejillones, como desde Argentina, y al interior de nuestro país, resguardando la salud y seguridad de sus colaboradores y clientes.

Hernán Blanco: Adicional a lo mencionado aquí más arriba, es clave considerar que los paquetes de rescate que los gobiernos lancen para superar la crisis económica que desata la pandemia, busquen fomentar el consumo energético limpio y sustentable, y que no suceda como en experiencias previas (i.e.: crisis subprime 2008), que tras la crisis los paquetes de medidas condujeron a mayores consumos energéticos y por ende emisiones de GEI.

Sara Larraín: El confinamiento, teletrabajo y reducción del trasporte automotriz, de pasajeros y aéreo sin duda ha implicado menor demanda/consumo de energía eléctrica y de combustibles a nivel nacional. Pero al mismo tiempo ha generado una mayor conciencia sobre el uso de la energía al transitar, desde la frenética automatización de su rutina laboral, al contacto directo y dedicación a actividades domesticas que incluyen uso de electricidad y combustibles. Ciertos sectores han apreciado la notoria reducción de contaminacion atmosférica y se han preguntado si el fin de las limitaciones para controlar el Covid-19, significará volver a respirar aire sucio o si podemos empezar a cambiar el rumbo.

Annie Dufey: En lo inmediato, se observa una reducción en el consumo de energía, por ejemplo, en el transporte. El llamado a quedarse en casa y la baja en la actividad económica en general asociada al coronavirus, ha incidido en una baja, por ejemplo, en el transporte, simplemente no se ve tráfico. Sin desmerecer lo preocupante de esta situación, la baja en el transporte se ha acompañado de una mejora en la calidad del aire, habiendo estudios que indican una reducción importante para este año de muertes asociadas a la contaminación atmosférica. Asimismo, otros estudios asocian a la contaminación atmosférica, al material particulado, como vehículos que ayudan a propagar el coronavirus, lo cual surge como una gran preocupación para el invierno que se avecina en el centro y sur de Chile. Ello hace pensar de la importancia de impulsar fuerte y rápidamente las energías limpias como son la electromovilidad o la calefacción eléctrica, y, a un nivel más agregado, una matriz eléctrica 100% renovable.

Claudio Seebach:  La crisis de la pandemia refuerza la importancia de la electricidad y la seguridad de suministro en todos los ámbitos vinculados a responder adecuadamente a ella: funcionamiento de hospitales, cadenas de frío en los alimentos, trabajo y educación online, comunicaciones y acceso a la información. Así, la prioridad de las empresas generadoras en la crisis ha sido, en primer lugar, la seguridad de sus trabajadores y el bienestar de la comunidades donde operan, asegurando a la vez el suministro. Producto de las cuarentenas y restricciones por razones sanitarias, observamos una reducción del consumo de energía eléctrica a nivel industrial y comercial, con el riesgo de menor demanda asumido por las empresas generadoras. Asimismo, y ya en respuesta a la crisis social de 2019, las empresas generadoras están debiendo financiar una estabilización de las tarifas producto del alza del tipo de cambio, riesgo que se ve incrementado en la crisis de la pandemia. La respuesta a la crisis debe conjugar mantener seguro y operativo el suministro eléctrico, junto con asegurar la sostenibilidad económica del sector que está liderando la transición energética.

Este tipo de crisis, ¿Cómo deja el sector energético en cuanto a la importancia que tiene como servicio público?

Carlos Finat: La crisis sanitaria simplemente ha venido a reafirmar la dependencia que el buen funcionamiento de nuestra economía y nuestra sociedad tienen en el suministro de electricidad. De allí que pensamos que se debe hacer un esfuerzo especial en desarrollar fuentes de energía que permitan a las personas que así lo deseen autoabastecerse con energías renovables distribuidas, sector en el cual prácticamente no se ha avanzado nada desde la promulgación de la ley de generación domiciliaria.

Carlos Cortés: El sistema energético y su continuidad son críticos para toda la población, principalmente en lo que respecta a la entrega de servicios que brindan hospitales, centros de atención sanitaria, redes de comunicaciones, suministro de agua potable, provisión de alimentos y otras actividades necesarias para la vida diaria. Es por esto, que distintos actores de la industria de la energía están haciendo sus mayores esfuerzos para que el suministro de gas, el eléctrico, de combustibles líquidos y de la energía en general, no se vean afectados.

Hernán Blanco: Los sistemas energéticos deben ser concebidos como un bien público y estratégico, que proveen un servicio clave para las dinámicas de los sistemas socio-económicas en los países, en ese sentido la autoridad debe priorizar que los sistemas energéticos estén preparados para responder a situaciones de emergencia como la actual, promoviendo también sostenibilidad e independencia de dichos sistemas antes trastornos en el sistema energético global (i.e.: fluctuaciones precios hidrocarburos, enfrentamientos OPEP, etc.).

Sara Larraín: La emergencia sanitaria ha mostrado la centralidad de los servicios energeticos como un sector esencial para sostener las comunicaciones, la continuidad laboral y la cadena de produccion y abastecimiento de bienes críticos como alimentos. La emergencia mostro varios desafios para el sector tales como la pobreza energética de sectores que tienen carencias de suministro y dificultades para pagar el servicio; la necesidad de pensar en una matriz mas independiente de combustibles externos; la conveniencia de un desarrollo electrico mas distribuido e idealmente con mayores porcentajes de autogeneracion y consumo; y definitivamente mas limpias. Pues poblaciones sometidas a contaminacion atmosferica y en consecuencia con prevalencia de enfrermedades respiratorias, broncopulmonares cronicas o cardiovasculares son mas vulnerables al COVid 19.

Annie Dufey: Las medidas de aislamiento y cuarentena decretadas por la autoridad para reducir la tasa de contagio del Covid 19. Asimismo, ello requiere sostener el funcionamiento de actividades esenciales como son los hospitales y las necesidades de nuestras casas, las telecomunicaciones, etc, todo lo cual pone a los servicios energéticos, junto a otros servicios básicos, como elementos fundamentales para sobrellevar el funcionamiento de nuestra sociedad.

Claudio Seebach: La crisis deja de manifiesto que el sector eléctrico tiene un rol clave como servicio público. El sector eléctrico es el motor que permite movilizar prácticamente toda actividad existente en nuestra sociedad moderna, y está además impulsando el avance del mundo hacia la necesaria carbono neutralidad y la descontaminación local del aire. La electricidad, junto a las tecnologías de la información han permitido que la gran mayoría de las personas puedan seguir trabajando de manera remota, conectando con sus seres queridos y seguir recibiendo los bienes y servicios de manera cotidiana.

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Digitalización

¿Cómo cree que se ha comportado la digitalización en esta crisis y qué perspectiva a futuro post crisis ven para estos procesos?

Carlos Finat: La somera digitalización que ha ocurrido en Chile ha reportado grandes beneficios, especialmente en seguridad. Por ejemplo, permite la operación remota de las centrales generadoras y líneas de transmisión, la supervisión del estado de las unidades generadoras y la detección temprana de condiciones que podrían significar una falla mayor de no ser conocidas con anticipación. Por supuesto, tenemos un amplio espacio de mejoras por delante, como con la instalación de medidores inteligentes.

Carlos Cortés: En el ámbito de los terminales de GNL, el transporte y la distribución y, en general, en toda la industria de gas natural, se han potenciado en tiempo récord los canales digitales para mantener la comunicación con los clientes y los procesos internos para impactar al mínimo posible a los clientes.Creemos que está crisis marcará un antes y un después en lo que se refiere a la digitalización de los procesos y formas de trabajar.

Hernán Blanco: La digitalización de sistemas energéticos es clave para la gestión inteligente de éstos. En la medida que un sistema energético puede ser gestionado con mayor precisión mediante innovación digital, las respuestas específicas ante situaciones de crisis como la actual pueden ser diseñadas ‘a la medida’.

Sara Larraín: La información y coordinación via digitalización ha sido clave pues permitió mantener un sistema fluido y robusto en el ámbito eléctrico y de los combustibles a nivel micro y macro. Permitió mostrar un avance cualitativo en el desempeño del sector en relación a crisis pasadas, y transparencia. La institucionalidad del Coordinador también resulto de gran eficiencia.

Annie Dufey: La cuarentena y aislamiento decretadas a raíz del Coronavirus ha impulsado fuertemente el teletrabajo lo cual ha sido posible gracias a las tecnologías digitales. Ello no solo permite vigilar el funcionamiento de las operaciones eléctricas en forma remota, lo cual es crucial para la seguridad del sistema y la provisión de este servicio esencial, sino que también ha acelerado un cambio estructural importante. El teletrabajo, y también la mayor automatización asociada al Coronavirus no solo tendrán un fuerte impacto en el empleo, en la forma que trabajamos y en nuestra productividad en el mediano y largo plazo, sino también en el cómo nos relacionamos como sociedad en general. Sin duda habrá una antes y un después del Coronavirus y se deben diseñar las políticas adecuadas para poder transitar adecuadamente. 7

Claudio Seebach: La digitalización radical que ha producido la crisis del Covid19 ha sido una fuerza transformadora muy superior a lo que los líderes de las instituciones públicas o privadas creían posible, y se espera que lo que ahora repentinamente se comenzó a hacer en forma digital, y que antes “no se podía”, se sostenga en el tiempo. En el ámbito netamente de la gestión del sistema eléctrico, la digitalización permite operar en forma remota los sistemas protegiendo la salud de los trabajadores, u optimizando la generación y despacho de electricidad, reduciendo pérdidas y ayudando a hacer más eficiente su consumo. Esta crisis nos ha demostrado la importancia de seguir avanzando con las tecnologías de digitalización, para poder, por una parte, operar de manera remota más sistemas, pero también para poder ayudar a que las personas gestionen sus consumos y se tenga retroalimentación inmediata de ellos para las empresas, haciendo más eficiente el sistema actual de toma de lectura, facturación y luego revisión de los consumos en la boleta.

¿Cómo se puede ver fortalecida la lucha contra la pobreza energética frente a esta crisis?

Carlos Finat: La oferta de las ERNC en cuanto a energía de bajo costo, estable y sostenible, debe abrirse especialmente hacia las personas y familias del sector más vulnerable de nuestro país. Por ejemplo, la estabilización de tarifas puede apoyarse con generación domiciliaria financiada en pesos, con el fin de aislar el efecto de tasa de cambio, que tanto impacto ha tenido en los últimos meses en la tarifa eléctrica.

Carlos Cortés: El gran desafío en una situación de crisis como ésta es impedir un crecimiento de la pobreza energética en el país, manteniendo el acceso de los servicios y, por lo mismo, garantizar la continuidad del suministro energético es fundamental y en ese sentido, las distintas empresas del sector han adoptado medidas para hacer frente a esta crisis tendientes a resguardar la continuidad del suministro de gas natural.

Además, estamos próximos a un nuevo período invernal, donde los efectos del COVID-19 se podrían sumar a otras enfermedades respiratorias y donde la contaminación causada por el extendido uso de la leña en la zona centro sur del país podría agravar las condiciones de salud de la población más vulnerable.

El último reporte de calidad de aire urbano dado a conocer a comienzos de mayo por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que analizó los datos de más de 4.300 ciudades de 108 países, reveló que nueve ciudades chilenas figuran entre las 15 más contaminadas de América, considerando las emisiones de material particulado fino, el más riesgoso para la salud de la población. Todas ellas superan con creces los niveles de concentración anual de particulado fino recomendados por la OMS (10 mg/m3).

La llegada del GN a algunas de esas ciudades, podrías contribuir a mejorar las condiciones ambientales de las mismas, con todos los beneficios objetivos que ello implica para la salud y calidad de vida de las personas.

Hernán Blanco: El proceso constituyente pronto a decidirse en el país debiese sacar lecciones de la actual crisis covid-19 en lo que respecta a suministro energético, y en base a ello elaborar en la formalización del derecho ciudadano a tener acceso a un suministro energético limpio, sustentable y de calidad.

Sara Larraín: La pobreza energética debe ser resuelta mediante políticas sociales, de desarrollo energético y desarrollo regional. Por un lado debe incluir la definición de un nivel de necesidad y confort energético básico según región; que incluyen afinar los programas de energización, de vivienda social, de conservación de alimentos, de producción artesanal y de subsistencia ; regularización del marcado de la leña como combustible dentro del desarrollo rural e independiente de este; revisión de las estructuras tarifarias de electricidad, gas y petroleo. Es un camino largo porque tiene la complejidad de una política de desarrollo; y tiene diferencias para el sector urbano y para el sector rural. Seria un error creer que todo se resuelve si electrificamos todo.

Annie Dufey: La baja en el consumo energético, por ejemplo del trasporte, se ha acompañado de una mejora en la calidad del aire, habiendo estudios de universidades chilenas que indican una reducción para este año, solo en Santiago, en cerca de 1,000 las muertes asociadas a la contaminación atmosférica para este invierno. Al mismo tiempo, los impactos sobre la salud debido a la contaminación intradomiciliaria es una de las grandes consecuencias asociadas a la pobreza energética. Si además se considera que hay estudios que asocian a la contaminación atmosférica, al material particulado, como vector que ayuda a propagar el coronavirus, el apoyo a los hogares de la zona central y sur del país a recambiar sus sistemas de calefacción a tecnologías limpias, surge como una medida de política pública esencial a reforzar en forma urgente, ya que no sólo mitigará la propagación del coronavirus y reducirá las muertes por contaminación, sino que aliviará la vulnerabilidad energética y reducirá la presión sobre los hospitales para atender enfermos.

Claudio Seebach: La pobreza energética dice relación con tres factores: el acceso a la energía, la equidad en relación a la calidad de los diversos energéticos consumidos en los hogares como leña, parafina o la propia electricidad; y al gasto en energía y su relación con los ingresos del hogar. Esta crisis pone de manifiesto la importancia de contar con energéticos de calidad tanto por la contaminación intradomiciliaria como por los efectos sobre la contaminación de las ciudades. En Chile se estima que la mala calidad del aire, principalmente de Santiago y las ciudades del sur producto de la combustión de diésel en el transporte y leña húmeda en calefacción, genera más de 3.500 muertes prematuras al año. La pandemia pone en evidencia la urgencia de reducir esa contaminación de las ciudades, y es una oportunidad para Chile de relevar la importancia de la eficiencia energética en las viviendas como primera medida de equidad energética, y acelerar el reemplazo de la leña húmeda por sistemas de calefacción seguros y eficientes, así como también de acelerar el reemplazo del transporte, en especial público y de logística, por electricidad.

¿Cómo ve el proceso de electrificación de la matriz energética, a partir de esta crisis?

Carlos Finat: No veo efectos especiales de la crisis en la electrificación. El cambio climático, como consecuencia de los GEI emitidos por los combustibles fósiles, sigue avanzando y nada ha cambiado en cuanto a la exigencia de llegar a economías con cero emisiones netas

Carlos Cortés: Creemos que existen temas mucho más prioritarios en la agenda de Energía, como por ejemplo avanzar en la agenda de descarbonización, la salida y el reemplazo de las centrales a carbón en el sector eléctrico, disminuir el consumo de diésel en el sector transporte y reemplazarlo por alternativas más sustentables y hacer frente al desafío que nos impone desplazar a la leña en la matriz residencial, entre otros.

Hernán Blanco: Seguramente el ratio anual de penetración de electrificación se verá afectado, producto de la paralización de actividades durante la crisis, pero la tendencia de electrificación debiese continuar una vez superada la crisis por la pandemia.

Sara Larraín: No he visto ningún cambio, salvo el retraso en la aplicación del alza en las cuentas de la luz para la gente y las quejas de las empresas generadoras que por la reducción de la demanda, y por tanto de sus operaciones y ganancias.

Annie Dufey: Más que efectos veo como un imperativo de impulsar urgentemente las tecnologías limpias como es la electromovilidad, calefacción limpia en tandem con una matriz eléctrica 100% renovable como clave para avanzar hacia una menor propagación del virus, reducir las muertes por contaminación atmosférica y también las emisiones de gases de efecto invernadero.

Claudio Seebach: La actual crisis ha dejado en evidencia la baja en las emisiones de contaminantes locales y cómo éstas han disminuido producto de la baja en la movilidad de las personas para llegar a sus trabajos por la cuarentena. Son precisamente estos contaminantes los que agudizan sustancialmente las enfermedades respiratorias que saturan el sistema de salud y causan muertes prematuras en invierno, como fue mencionado anteriormente, y el transporte urbano, los que más aportana generar emisiones que producen estos episodios. Acelerar la electrificación del transporte es una medida clave para poder reducir emisiones de estos contaminantes y de los gases de efecto invernadero de impacto global que están produciendo el cambio climático. Adicionalmente, la electrificación de usos residenciales y comerciales, como los sistemas de calefacción que utilizan leña y que también agudizan los problemas respiratorios y la contaminación intradomiciliaria como ha sido mencionado, son una gran alternativa para poder reducir muchas de las enfermedades que se producen en la población a raíz de un uso de leña húmeda e ineficiente. La leña representa alrededor del 13% del consumo de energía del país y un 27% de la energía consumida en las edificaciones del país (BNE, 2018), por ende podemos buscar sistemas más limpios y eficientes para reemplazar ese consumo de leña a través de calefacción eléctrica por ejemplo, ayudando a reducir la contaminación intradomiciliaria.

¿Qué retos plantea lo que estamos viviendo desde el punto de vista del uso de la energía?

Carlos Finat: La actual crisis ha aumentado las exigencias por energía eléctrica de bajo costo, segura, inclusiva y sustentable.

Carlos Cortés: En el contexto de la actual contingencia las empresas de gas natural han implementado una serie de modificaciones en los procesos diarios para mantener la continuidad del suministro energético, con un máximo de eficiencia, salvaguardando la salud de los colaboradores, los clientes y la comunidad en general.

Hernán Blanco: Se han escuchado/visto estos días sinnúmero de paralelos y semejanzas entre la actual crisis sanitaria covid-19 y la crisis climática: ambas tienen un enemigo invisible, requieren coordinación y cooperación inter-gubernamental, mirada intergeneracional, acción decidida de los gobiernos con base científica y requieren de manera fundamental cambios en los hábitos cotidianos de los individuos. En ese sentido, al analizar la crisis climática y su origen nos damos cuenta que el consumo energético desde la revolución industrial ha venido en constante aumento. Dicho patrón en hábitos de consumo energético de crecimiento constante es insostenible si realmente queremos limitar el aumento de la temperatura media del planeta en los 1,5 – 2 ºC acordados en París el 2015. Más cuando, si bien la penetración de energías renovables ha venido en aumento, su participación en el balance energético global es marginal, comparado con el 80% aproximado que hoy en día siguen representando las fuentes de energéticas de origen fósil. La pregunta no debe ser solo ‘¿de dónde sacar energía limpia y sustentable?’, sino también ‘¿para qué utilizar la menor disponibilidad energética que tendremos si realmente queremos evitar el colapso climático?’

Sara Larraín: Desde mi perspectiva como ONG trabajando en politicas de interes publico, creo que la crisis nos ofrece tremendas oportunidades de reducir la intensidad energetica, planificar las acciones anuales con mas coordinacion, menos viajes y mayor sobriedad energetica. Y definitivamente mantener el aire limpio para lo cual debieramos ahora planificar una reactivacion economica con energia mas limpia, para lo cual tenemos que poner los objetivos de la salud y la estabilidad climatica por sobre la actual neutralidad tecnologica en el sector electrico.

Annie Dufey: Los retos son diversos. Sin duda avanzar hacia un uso de la energía inteligente, esto es un uso eficiente de energía limpia en forma asequible el es desafío. Para los hogares, implica ser racionales y solo consumir lo que es esencial. Desde la industria, sostener el aprovisionamiento en forma segura para distintos clientes y por ejemplo, el anuncio de no cobro de sobreconsumo de invierno ciertamente es una muestra de solidaridad hacia los hogares. Desde el punto de vista de la calefacción, el apoyo a los hogares de la zona central y sur del país a recambiar sus sistemas de calefacción a tecnologías limpias, surge como una desafío de política pública esencial a reforzar en forma urgente, ya que no sólo mitigará la propagación del coronavirus y reducirá las muertes por contaminación y los gases de efecto invernadero, sino que aliviará la vulnerabilidad energética y reducirá la presión sobre los hospitales para atender enfermos. A nivel del transporte el impulso a la electromovilidad y a un nivel más agregado de una matriz eléctrica 100% renovable, son esenciales.

Claudio Seebach: Asegurar en primer lugar el suministro de electricidad para los procesos críticos de respuesta a la pandemia, manteniendo la confiabilidad del sistema y seguir abasteciendo así de manera segura a los habitantes. Hacia adelante, implica velar que la crisis no detenga la transformación de nuestra matriz energética hacia un uso y consumo sustentable y responsable, como la generación de electricidad renovable, el plan de retiro del carbón, y la electrificación de los usos de la energía en transporte, hogares e industria.

María Teresa González asume presidencia del directorio de Generadoras de Chile

María Teresa González asume presidencia del directorio de Generadoras de Chile

María Teresa González asumió la presidencia del directorio de Generadoras de Chile, la asociación gremial que reúne a 13 empresas de este segmento, las cuales en su conjunto producen más del 90% de la energía eléctrica del país.

La ejecutiva actualmente es gerenta general de la empresa noruega Statkraft en Chile, siendo primera vez que la asociación es presidida por una mujer.

«Estamos quizás en uno de los momentos más complejos como país y eso nos debe motivar a trabajar unidos, siempre con el compromiso de asegurar la energía que Chile necesita, para sus servicios básicos, de urgencia, y de una industria que continúa trabajando con la prioridad puesta en la salud de sus trabajadores y bienestar de las comunidades donde operamos», comentó la nueva presidenta del directorio.

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En la sesión fue electo también Axel Levêque, gerente general de Engie Chile, como tercer vicepresidente del directorio. Además, continúan en la mesa Thomas Keller, gerente general de Colbún, como primer vicepresidente; y Renzo Valentino, gerente general de Pacific Hydro como segundo vicepresidente.

El directorio está compuesto además por un representante de cada una de las otras empresas socias: AES Gener, AME, Cerro Dominador, EDF, Enel, GPG, Latin America Power, Inkia Energy y Prime Energía.

«Agradezco enormemente la labor del directorio, que con su diversidad, alto nivel de compromiso humano y profesionalismo contribuye de manera fundamental a la misión de Generadoras de Chile. La electricidad es un pilar esencial para el desarrollo sostenible de las ciudades, las industrias, del futuro del transporte; y la importancia de la seguridad del suministro ha quedado especialmente evidente en la crisis de la pandemia actual», enfatizó Claudio Seebach, presidente ejecutivo de la asociación.