(El Mercurio) En el discurso del 21 de mayo de la Presidenta Michelle Bachelet, no se estableció una meta concreta para la creación de empleos. Esto, a diferencia de los tres gobiernos anteriores, en que este tema no estuvo ausente.
La ministra del Trabajo, Javiera Blanco, plantea que sí existen metas, pero no se trata solo de un número.
-¿Por qué no se habló de una meta de creación de empleo en el discurso del 21 de mayo?
«Hoy, hay un compromiso real con la creación de empleos. Hoy día, las metas están claras. La meta es crear más empleo estable y en un contexto económico estable. Yo creo que haberse focalizado exclusivamente al alcance de una meta en la administración pasada, sin todos esos contextos, es lo que genera el riesgo de que esos buenos logros puedan ser más frágiles en el tiempo».
«Lo otro que también nos preocupa, es que seguimos evidenciando que el mayor crecimiento de empleo en porcentajese se da en relación a los trabajadores por cuenta propia que crecieron un 18% (entre el primer trimestre de 2010 y 2014), seguido de los asalariados, que creció 14,1%».
«Nosotros quisiéramos que los empleos que mayormente crezcan sean asalariados, para generar proyección de estabilidad y que no sean empleos que el próximo mes podrían no estar en la encuesta».
-¿Se optó por no plantear poner una cifra este año porque estamos en un proceso de desaceleración?
«Lo que se fija ahí es una carta de navegación clarísima, que habla del tipo de crecimiento y empleo que queremos tener. Hay una crítica infundada cuando se dice que no se establecieron metas. Cómo no va a ser una meta decir que nosotros queremos que la empleabilidad vaya de la mano de simetrías cuando hablamos de fortalecer los derechos colectivos. Y eso tiene que ver con lo que la Presidenta anunció claramente, que es avanzar en este segundo semestre, en robustecer la negociación colectiva y los derechos colectivos».
«Lo que a todas luces se está demostrando en el discurso del 21 de mayo es una política que va a tender a generar más empleo».
-¿Cuánto más?
«Lo que ocurre es que nosotros lo que queremos es crear empleo de calidad. Lo que tenemos es un compromiso de que no nos vamos a quedar solamente con anuncios de números, que sería mucho más fácil».
-¿Le preocupa que el menor crecimiento afecte la generación de puestos de trabajo?
«Lo que estamos viendo es una desaceleración heredada, que nos ha hecho perder empleos con rapidez en relación a la que habían creado.
Los esfuerzos de creación, cuando no
van de la mano con todas estas políticas para generar estabilidad y robustez, pueden ser crecimientos que se terminan revirtiendo rápidamente, y eso es lo que no queremos».
-El programa de gobierno plantea la creación de 600 mil a 650 mil empleos en cuatro años, con una economía que crece al 4%. ¿Está en evaluación?
«Las metas uno siempre las tiene para generar, para que los esfuerzos apunten a lograrlo. Pero también hubo un énfasis muy fuerte del otro gobierno en hablar de un número. Y resultó que los números terminaron no siendo necesariamente el fuerte del gobierno anterior».
-Prometió un millón de empleos y lo cumplió.
«No se trata de demonizar los datos. Yo no estoy diciendo que sea malo crear un millón de empleos. Nadie podría pensar eso. Lo que estoy diciendo es que como sociedad no nos basta dar un número. Tenemos que dar cuenta de que esos números, primero, se van a mantener en el tiempo y, además, que son números que hablan de igualdad de oportunidad, de protección social, de trabajo decente. A una sociedad que avanza como avanzamos nosotros, no le basta con quedarse con la cifra».
-¿Por lo tanto, no veremos estos números en los próximos años tampoco?
«Eso es algo que habrá que evaluar en su oportunidad».