En un hito para la transición energética en Chile, Freirina se convirtió en la primera comuna en establecer un modelo de gobernanza para una Mesa de Energía Territorial. Esta iniciativa destaca por su enfoque inclusivo y sostenible, promoviendo la colaboración entre el sector público, privado y las comunidades locales.
La firma de esta gobernanza es un paso significativo dentro de la Agenda de Energía 2022-2026, que busca empoderar a las comunidades en las decisiones energéticas que afectan sus territorios. La seremi de Energía de Atacama, Yenny Valenzuela, subrayó que el objetivo del gobierno es “que la transición energética sea una oportunidad para todas y todos. Un proceso en el que cada comunidad pueda participar, decidir y beneficiarse de los proyectos energéticos que se desarrollan en su territorio».
Por otro lado, el alcalde de Freirina, César Orellana, expresó su satisfacción por este logro, resaltando la importancia de la participación de las empresas y las comunidades en la construcción de un futuro energético más armónico. “Hoy día hemos escuchado el testimonio de las organizaciones, relevando la consideración en lo que queremos para nuestro territorio (…) estamos cumpliendo hoy día un tremendo desafío y, además, siendo un hito importante, esta primera mesa a nivel nacional”, afirmó.
Desarrollo local
La nueva Mesa de Energía Territorial, que se concibió a partir de la Mesa Eólica creada en 2016, se define como un espacio democrático y colaborativo. Este mecanismo permitirá generar beneficios sociales y sostenibles a largo plazo, con iniciativas como los Fondos de Inversión Comunitaria (FIC), que financian proyectos de alto impacto social y fomentan la educación ambiental.
Cecilia Dastres Abarca, jefa de la División de Participación y Diálogo Social del Ministerio de Energía, enfatizó que “la transición energética no será efectiva si las comunidades no ven beneficios en los proyectos que se desarrollan en su entorno». En ese sentido, añadió que la mesa simboliza un compromiso con el desarrollo local y la mitigación de los impactos del cambio climático.
Freirina, que alberga seis parques eólicos, es un ejemplo de cómo la energía renovable puede integrarse en la comunidad, generando no solo electricidad, sino también oportunidades de desarrollo y bienestar para sus habitantes. La región de Atacama, con una capacidad instalada de 1.131 MWp en energía eólica, aporta el 22% de la energía eólica generada en el país, consolidándose como líder en este ámbito.