(El Mercurio) Hoy se realizará en la comuna de Coronel el cierre de otra central termoeléctrica a carbón. Se trata de Bocamina I, unidad operada por Enel Chile que llega a su fin de manera definitiva, siendo desconectadas del sistema eléctrico nacional.
De esta manera, a la compañía solo le restará la unidad II de Bocamina para salir del carbón, lo que sucederá a más tardar en mayor de 2022. El gerente general de Enel Chile, Paolo Pallotti, explica que los cierres de estas centrales, al igual que lo que ocurrió con Tarapacá, serán definitivos.
En cuanto al proceso, el ejecutivo señala que se enmarca dentro de la transición energética que impulsa la compañía, y que se encuentran trabajando en el destino del terreno que alberga a la generadora, el cual podría destinarse al sector industrial o incluso a la industria energética. En cuanto a las comunidades, con las que ha existido una larga historia de desencuentros, sostiene que se dejó de lado el asistencialismo y han avanzado en la creación de fondos concursables para el desarrollo de la ciudad.
Pallotti agrega que a diferencia de otras empresas, decidieron no acogerse al Estado de Reserva Estratégica instaurado en el proceso de descarbonización, porque no es rentable para la matriz económica de la compañía y porque el plan es salir definitivamente del carbón al año 2022.
«Es un conjunto de una convergencia de estrategia y análisis económico, nuestra estrategia es salir de las energías contaminantes y nuestro análisis demuestra que no tiene valor en nuestra cartera seguir teniendo plantas en reserva, por eso fue una decisión sencilla. Nuestro juicio lo hacemos sobre los análisis nuestros, donde claramente no vemos la necesidad. Si el sistema lo necesita, es una pregunta para otra persona», dice Pallotti.