(El Mercurio) Crystal Lagoons y el instituto alemán Fraunhofer se unieron en una alianza de cooperación científica para construir la primera planta piloto de desalinización con la tecnología de Crystal Lagoons, que reduce radicalmente el consumo energético en la obtención de agua dulce.
En efecto, el costo de producción de agua desalinizada con la tecnología de la multinacional es un 60% menor que con las tecnologías convencionales de «osmosis inversa», de acuerdo con las simulaciones y análisis realizados previamente por Fraunhofer Alemania.
Para este proyecto se busca un sitio en el norte de Chile, a objeto de iniciar la construcción durante 2019, con una inversión de $207 millones. Una vez en funcionamiento y operando bajo condiciones reales, se procederá a escalar a nivel industrial.
La principal innovación respecto de la tecnología actual de Crystal Lagoons (osmosis inversa), es que el nuevo sistema no utiliza energía adicional, sino que emplea energía residual de procesos industriales derivados del sistema de enfriamiento.