El Coordinador Eléctrico Nacional puso a disposición de los distintos actores de la industria eléctrica, el «Estudio de Integridad del Sistema de Transmisión del año 2019 (EIST-2019)», el cual presenta un diagnóstico actual, y la evolución hacia 2024, de los niveles de corriente de cortocircuito para un conjunto de instalaciones del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), con tensión entre 100 kV y 154 kV.
A partir de estos resultados, se realiza una evaluación del estado de vulnerabilidad de los interruptores de poder asociados a dichas instalaciones, considerando como valor de referencia la capacidad de ruptura nominal.
Según indicó el organismo coordinador, el estudio también «sensibiliza los resultados obtenidos para un escenario de máxima capacidad de generación y máximo enmallamiento del SEN, con la finalidad de identificar el parque generador que tiene mayor influencia en la alta concentración de corriente de cortocircuito que presentan las subestaciones (SS/EE) localizadas en la Región de Valparaíso y en la Región Metropolitana, y evaluar el efecto sobre los niveles de cortocircuito que tiene la configuración de conexión de los interruptores seccionadores de barra, en la red que alimenta a la Región Metropolitana en 110 kV».
«Finalmente, considerando la primera etapa del cronograma del Plan de Descarbonización de la matriz energética chilena, este estudio presenta una evaluación del impacto que ocasiona la salida de las ocho unidades de generación a carbón que se tiene prevista para 2024, en términos de las variaciones que experimenta el nivel de corriente de cortocircuito en diferentes zonas del SEN entre 100 kV y 154 kV», precisó el organismo.