(El Mercurio de Valparaíso) Hasta el cierre de esta edición, tres personas en representación de la Comunidad La Dormida, ubicada en Olmué, permanecían a unos 40 metros de altura tras tomarse una de las doce torres de alta tensión que la empresa Interchile mantiene en sus terrenos como parte del proyecto Cardones-Polpaico. A ellos, se sumaron en la madrugada otros cuatro comuneros que se encadenaron a la estructura.
La situación fue advertida por una de las empresas contratista de Interchile, por lo que rápidamente se hizo presente en el lugar personal de Carabineros. Sin embargo, lejos de calmarse, la situación empeoró y por momento el personal policial incluso fue atacado con piedras que eran lanzadas desde las alturas.
En medio del enfrentamiento, otras ocho personas que se encontraban protestando arrancaron por los cerros, siendo detenida una mujer por alteración del orden público.
Según comentó uno de los directores de la comunidad, Mario Aravena, las siete personas no iban a bajar la protesta hasta que se les cumpliera un petitorio de tres puntos, que incluía el retiro de la presencia policial del sector (que luego retiraron, según mencionó la gobernadora Carolina Corti), que el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) los evalúe como una zona de amortiguación de la Reserva de la Biósfera La Campana-Peñuelas y que se hiciera presente en el lugar las ministras de Medio Ambiente y Energía «para que vean en terreno el grave daño que han realizado como Estado».
«Este es el momento en que vengan a dar la cara a los ciudadanos. Hoy (ayer) son tres las personas que están en altura y cuatro encadenados, pero mañana pueden ser diez arriba y pasado mañana quizás cuántas», sostuvo Aravena.
Tras el fracaso de las primeras negociaciones, cerca de las 14 horas arribó al lugar personal del Gope de Carabineros, el que tampoco logró que los comuneros descendieran.
Por lo mismo, ya cerca de las 17.30 horas tuvo que acudir la gobernadora Corti, junto a los seremis Gonzalo LeDantec (Energía) y Victoria Gazmuri (Medio Ambiente). Al respecto, la jefa provincial dijo que «hicimos una propuesta que nos parece interesante, porque lo que más nos interesa hoy es que no exista la posibilidad de poner en riesgo la vida de nadie».
En tanto, desde Interchile condenaron «estas arriesgadas e irresponsables acciones», agregando a través de un comunicado que «actualmente se están evaluando las acciones legales a adoptar».