Tras dos años de construcción, Eléctrica Carén, una empresa de Latin America Power (LAP), puso en marcha la central de pasada Carilafquén-Malalcahuello (CMA) y conectó la unidad generadora, de 29 MW, al Sistema Interconectado Central (SIC) en la subestación Pitrufquén, ubicada en la comuna del mismo nombre.
Este proyecto utiliza las aguas de los ríos Carilafquén y Malalcahuello para lograr una capacidad instalada de generación de 29 MW, lo que equivale a la potencia necesaria para satisfacer la demanda de una ciudad de 290.000 habitantes, similar a toda la comuna de Temuco.
En este proceso se desviará parte del caudal natural de ambos afluentes mediante tuberías principalmente subterráneas, las que tendrán una longitud de 2,6 kilómetros en el caso del Carilafquén y de 3,2 kilómetros en el de Malalcahuello, para luego ser restituidos a los respectivos ríos.
“El diseño de este proyecto se hace cargo de las características del lugar en el que se emplaza. Cada decisión de ingeniería tuvo como finalidad lograr la mayor eficiencia con la menor alteración del entorno posible”, aseguró Giovanni Vinciprova, superintendente de Sustentabilidad de Latin America Power (LAP).
Según el ejecutivo, es posible realizar proyectos de esta envergadura en La Araucanía mientras se consideren las características del entorno. “Ejecutar iniciativas de inversión en esta región es posible, pero se requiere que los proyectos se hagan cargo de las singularidades de esta zona, tanto ambientales como culturales y sociales. Con un buen diseño, trabajo coordinado y transparente con los vecinos y las autoridades es factible llevar adelante iniciativas importantes para el país y la región”, aseguró.
La energía generada en la Central de Pasada Carilafquén-Malalcahuello será conectada al Sistema Interconectado Central (SIC) a través de una línea de transmisión de 110 kV, que tiene una extensión cercana a los 100 km y se caracteriza por su similitud a las líneas de distribución doméstica o residencial ya existentes en la zona, al estar soportada en postes de hormigón.
De acuerdo al desarrollador del proyecto, «sólo se utilizaron torres metálicas de mayor tamaño en los cruces de cauces naturales y la Ruta 5, lo que permitió no alterar sustancialmente las condiciones paisajísticas del entorno, permitiendo la convivencia entre este proyecto y actividades turísticas o productivas en el sector».
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