Anesco Chile A.G. se refirió este jueves al apagón masivo que este martes afectó a más del 90% de la población del país, entre las regiones de Arica y Parinacota y Los Lagos.
“Este evento nos recuerda no sólo los desafíos pendientes en el sector eléctrico, sino también la oportunidad de impulsar la eficiencia energética (EE) como una herramienta clave para estar mejor preparados ante contingencias como esta”, afirmó la asociación gremial a través de una declaración pública.
Desde la mirada de Anesco, el sector eléctrico requiere grandes inversiones, planificación a largo plazo y una actualización de la regulación vigente. “Sin embargo, mientras estos cambios estructurales se materializan, la EE se presenta como una solución costo-efectiva e inmediata, que permite reducir el consumo, integrar de mejor manera la electrificación y la electromovilidad, disminuir la dependencia energética del país, mejorar el confort de las personas y reducir la huella de carbono, entre muchos otros beneficios”, aseguraron.
Asimismo, plantearon que “el sistema debe operar basado en varias soluciones y bien integradas. En esta línea, hemos impulsado el retrofit de edificaciones en Chile, una medida ampliamente reconocida como fundamental para la sostenibilidad energética”. Sin embargo, advirtieron que su implementación requiere voluntad política que garantice, por ejemplo, las condiciones necesarias para masificar estos proyectos y un mayor desarrollo del modelo ESCO (Energy Services Companies).
“Esto permitiría modernizar centros de salud, edificios públicos, empresas y viviendas, incorporando soluciones de eficiencia energética que no solo aliviarían la carga del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), sino que también fortalecerían la resiliencia energética, asegurando un suministro más confiable y sostenible para el país con un mayor equilibrio para el país (gasto energético vs el PIB), determinante para su desarrollo”, añadieron.
Según Anesco, a nivel nacional la eficiencia energética podría reducir en un 10% el consumo total anual del país, lo que equivale a 30.000 GWh, evitando la emisión de 14 millones de toneladas de CO2 por año y generando un ahorro de 3.000 millones de dólares anuales.
“Ser eficiente energéticamente en cada segmento de consumo (mejor uso de la energía, más autoconsumo y baterías, que son parte de nuestras soluciones) debiera permitir enfrentar los riesgos climáticos, contingencias técnicas o simplemente aportar a que las personas puedan tener una mejor situación mientras se produce la respuesta de las autoridades o la reposición del servicio”, plantearon desde la entidad.
Por último, señalaron que “mientras más EE hay en una empresa o un hogar, menos estrés tendría el sistema eléctrico nacional, por sobre consumos, horarios punta o emergencias como las suscitadas”.