(Diario Financiero) Hace exactamente un año, No Alto Maipo y Ecosistemas, dos grupos opositores al proyecto hidroeléctrico que impulsa AES Gener en la precordillera de la Región Metropolitana, presentaron un documento con una serie de quejas contra la iniciativa ante dos de sus financistas: el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el IFC del Banco Mundial.
La queja estaría a pasos de dar los primeros resultados, ya que según publicó El Mercurio Inversiones, el Mecanismo Independiente de Consulta e Investigación (MICI) del BID habría optado por recomendar al directorio ejecutivo de la organización aprobar el inicio de una investigación.
Según fuentes consultadas por DF, el directorio del BID podría tomar una decisión hacia mediados de febrero o inicios de marzo.
El banco aclaró ayer que no había iniciado “ninguna investigación sobre su participación en el proyecto. La implementación del proyecto por parte del Grupo BID es monitoreado y supervisado regularmente por empresas externas e independientes, y por medio de inspecciones trimestrales realizadas por nuestros especialistas”.
Los grupos opositores a Alto Maipo reclamaron que al financiar esta iniciativa, los organismos internacionales estaban transgrediendo sus propias normas internas, ya que -a juicio de estas organizaciones- la magnitud del proyecto ocasionarían un alza en el riesgo del abastecimiento de agua de la zona y otros problemas, por ejemplo en el potencial turístico del lugar.
[SMA deberá pronunciarse ante modificaciones a central Alto Maipo tramitadas por AES Gener]
El MICI es una unidad independiente al interior del BID, y que cada queja -explicaron en el organismo- es revisada con rigor, dando garantías a todas las partes.
De optar por formalizarse una investigación, esta podría tomar nueve meses. “Una eventual investigación del MICI no implica que el Grupo BID termine su participación en el proyecto”, informó el organismo.
Consultada la titular del proyecto, comentó que la iniciativa sigue su curso y ya lleva 60% de avance, con 5.000 personas en la faena en los distintos frentes que trabaja la contratista y socia de la iniciativa Strabag.
AES Gener explicó que los representantes del MICI visitaron el proyecto en abril y tuvieron la oportunidad de hablar directamente con encargados del proyecto y reclamantes.
“Alto Maipo ha estado llano en facilitar transparentemente toda la información que ha sido requerida hasta la fecha, como también ha estado abierto a una etapa de diálogo con los reclamantes, alternativa que se da en este proceso, pero lamentablemente fue rechazada por ellos”, explicaron.
Cambios al proyecto: firma analiza nuevos antecedentes
Recién comenzado 2018, Alto Maipo retiró una consulta que había realizado al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) respecto de si algunos cambios que piensa realizar al proyecto eran necesario someterlos a una nueva fase de obtención de permisos.
Consultada AES Gener, señalaron que «Alto Maipo retiró la pertinencia presentada para evaluar los permisos y las materias que debemos incluir en ellas de acuerdo al nuevo contrato de construcción del proyecto», que fue tomado por la austriaca Strabag.
La variación estaba relacionada con que la ingeniería de detalle «arroja un cálculo mayor del volumen del material a disponer respecto al estimado con la ingeniería básica, y otros aspectos derivados de las necesidades de construcción», específicamente aumentando la capacidad de los 14 sitios que tiene dispuesto para esto. Además se explicaban otros cambios relacionados con los accesos para instalar la maquinaria que hace túneles (TBM), lo que buscaba hacer más eficiente el proceso constructivo.
La empresa precisó que actualmente no tiene obras detenidas. «El contratista Strabag ha tomado el control de los frentes que tenía hace algunos meses CNM (consorcio que dejó la obra acusando problemas en el modelo constructivo que implicaban problemas de seguridad), operando la TBM que se encuentra en la zona, y continúa trabajando en sus frentes originales, con más de 5.000 personas contratadas directamente».
Además, explicó que las negociaciones por la reestructuración del contrato de construcción del proyecto avanzan.