Q
ERNC totalizan 76% de la inversión en generación eléctrica de 2015

ERNC totalizan 76% de la inversión en generación eléctrica de 2015

(La Tercera) Más de 25 mil MW de potencia bruta en Energías Renovables No Convencionales (ERNC) se podrían inyectar al sistema eléctrico nacional hacia fines de la década. Esto, si logran avanzar los 279 proyectos eléctricos que impulsan la generación de energía sustentable y que se identificaron en 2015.

Según el Observatorio de la Inversión en su versión 14, informe elaborado por la gerencia de Estudios de la Sofofa, estas iniciativas suman inversiones por US$ 58.200 millones, un 76% de la cartera total de la industria de generación eléctrica del país.

“El gran dinamismo exhibido por el sector energético durante los últimos años ha significado transitar, en materia de inversión, de US$ 19.402 millones en 2011, a US$ 88.826 millones en 2015, esto sin considerar los proyectos en estado de “detención”. Este mayor desarrollo se ha visto impulsado, esencialmente, por el abultado stock de proyectos asociados a las Energías Renovables No Convencionales (ERNC), que al cierre de diciembre pasado sumaron 279 iniciativas y US$ 58.208 millones de inversión. Vale decir, concretan el 76% del total de la inversión en generación eléctrica”, destaca el informe de la Sofofa.

El objetivo de la entidad de destacar este tipo de inversiones va de la mano con la necesidad que está mostrando el país para avanzar en el desarrollo de nuevos proyectos de inversión para generar empleo e impulsar la economía. Así lo explica el presidente de Sofofa, Hermann von Mühlenbrock: “Este estudio nos muestra una gran cartera de proyectos en el área de las energías renovables que, de concretarse, podrían impulsar de manera importante el crecimiento económico y los empleos de calidad en nuestro país, lo que redundaría en contribuir a sacar de la pobreza al millón de chilenos que todavía sufre este flagelo”, afirma.

El auge de este tipo de iniciativas también es relevante para el sistema eléctrico, sobre todo, considerando que el propio gobierno ha sido un importante impulsor de este tipo de proyectos, con el fin de aprovechar las bondades naturales que tiene el país, como es el abundante viento y sol que se genera, especialmente en la zona norte del país.

“El desarrollo de fuentes de energía renovables se presenta como un motor importante para Chile. Nuestro país tiene condiciones naturales únicas que pueden impulsar la generación limpia y, de esta forma, hacer competitiva a nuestra economía y aportar a tener una matriz sustentable”, explica von Mühlenbrock.

Estado de los proyectos

De acuerdo con el catastro de Sofofa, en la cartera de generación de energía, durante 2015 se invirtieron US$ 12.995 millones en proyectos termoeléctricos, totalizando 7.856 MW, y sólo US$ 5.337 millones para hidroeléctricos, por una capacidad total de 2.472 MW.

De los 279 proyectos de ERCN, detalla el documento, 44 proyectos están clasificados “en construcción”, involucrando US$ 8.866 millones en saldos por invertir y una generación de 4.857 MW como potencia bruta. Casi un 50% de esa inversión, es decir US$ 4.375 millones, corresponde a proyectos de energía solar fotovoltaica y US$ 2.532 millones para centrales eólicas.

Sin embargo, la mayor parte de las iniciativas están catalogadas en fase “por ejecutar”, es decir, que están en pleno proceso de aprobación ambiental o ya tienen su Resolución de Calificación Ambiental (RCA), pero que aún no comienzan sus obras.

Se trata de 235 proyectos que suponen inversiones por US$ 49.342 millones, el 84,8% del total de la cartera renovable. De ese total, US$ 24.506 millones son proyectos solares fotovoltaicos y US$ 11.956 millones para iniciativas eólicas.

En esta fase también se concentra la mayor capacidad de producción de energía proyectada. Se trata de 20.154 MW, un 80,6% de la inyección de energía total estimada. De este último grupo, las tecnologías más destacadas son las solares fotovoltaicas, que esperan inyectar 11.537 MW al sistema, y las eólicas, con 6.303 MW de potencia bruta. En tanto, 435 MW están considerados para las plantas de biomasa y 369 MW para las centrales minihidráulicas, entre otras tecnologías consideradas.

El año de mayor inyección

El informe de Sofofa detalla, además, que será el año 2017 el que tendrá una mayor inyección de ERNC. “El año 2017 será el más intensivo en conexión de energía al sistema eléctrico nacional, con 9.940 MW, es decir, reúne el 39,7% del total estimado”, señala el documento.

Añade que de esa capacidad, un 70% será inyectado en el Sistema Interconectado Central (SIC), lo que significa 6.985 MW.

En tanto, en el Sistema Interconectado del Norte Grande (Sing) se conectarán 2.706 MW. Los 250 MW restantes serán utilizados como fuente de respaldo para actividades y desarrollos industriales, indica el informe.

Para 2018 se espera inyectar al sistema 5.748 MW y, finalmente, para 2016, la proyección de conexión de energía se prevé en 3.401 MW, de los cuales 2.069 MW serán inyectados al SIC y 1.332 pasaran al Sing.

Antofagasta lidera inversiones

En cuanto a las regiones, el Observatorio de la Inversión indica que el mayor monto de inversión se desembolsará entre las regiones de Antofagasta, Atacama y Coquimbo, las que en conjunto totalizan US$ 39.856 millones, el 68,5% del total catastrado.

Al hacer un desglose, se detalla que es Antofagasta la región que concentró durante 2015 el mayor monto de inversión. La II Región registró US$ 20.209 millones del total de la inversión en 54 proyectos de ERNC. “Con este número se espera una generación de 7.271 MW”, señala el documento.

De este total, la mayor parte, es decir 6.568 MW, será conectada al Sing y 703 MW restantes se suministrarán al SIC.

En Atacama, la inversión ascendió a US$ 15.772 millones en 64 iniciativas de inversión en este tipo de tecnologías y con el que se proyecta generar 6.712 MW. En Coquimbo, en tanto, la inversión en ERNC sumó US$ 3.875 millones a través de 18 proyectos, los que buscan inyectar al SIC 1.884 MW.

La región con un menor monto de inversión fue Tarapacá, con 13 iniciativas que sumaron US$ 3.047 millones.

[“Inversión en el sector eléctrico es 36% mayor a la inversión en minería”]

Aprueban mini central de pasada Cipresillos en la Región de O´Higgins

Aprueban mini central de pasada Cipresillos en la Región de O´Higgins

La Comisión de Evaluación Ambiental de la Región de O´Higgins aprobó el Estudio de Impacto Ambiental del Proyecto “Mini Central Hidroeléctrica de Pasada Cipresillos”, el cual tiene por objetivo construir y operar una Mini Central Hidroeléctrica de Pasada para producir Energía Renovable No Convencional (ERNC), con una potencia eléctrica instalada bruta de 12 MW.

En la nota publicada por el Ministerio de Energía se detalla que la energía eléctrica generada será entregada al SIC a través del sistema de transmisión existente, a partir de la Subestación Sierra Nevada, lo que permitirá satisfacer la demanda energética del país mediante la utilización de ERNC.

El proyecto tendrá una vida útil indefinida, y presentará para la región una inversión que asciende a US$19 millones. Además, otorgará empleos a más de 200 personas entre la etapa de construcción y operación.

[Reforma al Código de Aguas afectaría meta de potenciar minihidro]

Impresiones

La Intendenta de la Región de O´Higgins (s), Teresa Núñez, señaló durante su voto que “el proyecto deberá resguardar el cumplimiento de todas las exigencias ambientales aplicables y aquellas condiciones establecidas durante el riguroso proceso de evaluación, desarrollado por los servicios con competencia ambiental de la Región y coordinados en el marco del Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), administrado por el SEA”.

Por su parte, la Seremi de Energía, Alicia Barrera Lagos, manifestó su satisfacción tras la aprobación del Proyecto Mini Central Hidroeléctrica de Pasada Cipresillos, en la Comisión de Evaluación Ambiental, destacando que “En la Región de O´Higgins seguimos impulsando la inversión para producir energía limpia y a menor costo, la que se sumará a nuestra matriz energética, aportando 12 MW al Sistema Interconectado Central,  dinamizando, además,  la economía local”.

Asimismo, destacó que “con este tipo de proyectos estamos impulsando el enorme potencial energético de la Región O’Higgins y contribuyendo a alcanzar la meta de la política energética lanzada recientemente por la Presidenta Michelle Bachelet,  de lograr un 70% de participación de energías renovables a 2050, para un desarrollo sustentable y amigable con nuestro medio ambiente”.

¿Cómo construir una matriz energética ideal?

¿Cómo construir una matriz energética ideal?

Lo primero es contar con un catastro del estado actual de las centrales y saber cuáles son las condiciones del mercado, las tecnologías disponibles, con qué recursos contamos en el territorio, etc. Por ejemplo, en Chile no disponemos de combustibles fósiles, pero somos ricos en fuentes de energía hídrica y en energías renovables no convencionales tales como eólica y solar. Sin embargo, en estas últimas está el problema de la intermitencia, lo que unido a la dependencia que genera apostar por completo a una u otra fuente de energía hace que la mejor opción sea una diversificación y combinación de tecnologías, teniendo en cuenta la futura interconexión entre el SING y el SIC, así como también una validación ambiental y social de los proyectos.

Uno de los objetivos es construir un sistema robusto que sea capaz de: Evitar intermitencias o caídas de la red, que permita la rápida conexión y desconexión de distintas centrales de generación y soporte de la mejor forma posible la entrada de grandes consumidores de energía (como las mineras) así como también esté preparado para enfrentar desastres naturales (como terremotos).

Para esto, debemos aprovechar y optimizar lo que tenemos como base que es la generación hídrica y termoeléctrica, para luego ir incorporando otras fuentes de energía renovable, pero tomando en cuenta que generan intermitencia (dejando de lado la geotérmica, biomasa y mini hidro), por lo que se debe incorporar tecnologías de punta en distintas partes del sistema eléctrico (generación, transmisión y distribución) que eviten, por ejemplo, que se deje de entregar energía cuando no hay sol o viento.

En este sentido, es que se han desarrollado tecnologías tales como dispositivos de almacenamiento de energía, volantes de inercia y sistemas de batería de iones de litio. Los volantes de inercia, suministran electricidad inmediata a la red para contrarrestar las variaciones de potencia ocasionadas por nubes o cambios repentinos de la velocidad del viento. Los sistemas de baterías, almacenan electricidad en mayor cantidad y durante más tiempo para cubrir los cambios de fuente de energía. Así es como pueden almacenar la energía solar producida durante el día cuando la demanda es baja y liberarla por la noche.

A partir del año pasado en Chile se comenzó a licitar bloques de horas de generación en vez de suministros diarios, lo que facilita la introducción de ERNC como la solar o eólica al sistema.

E-CL prepara nueva división para proyectos hidroeléctricos

(Pulso) Un giro hacia la hidroelectricidad es el que planea dar la principal generadora eléctrica del Sistema Interconectado del Norte Grande (SING), E-CL, filial de Engie, ex GDF Suez.

La cuarta eléctrica más grande del país informó la creación de una nueva área de negocios para el desarrollo de proyectos hidroeléctricos de menor envergadura. De concretarse alguna iniciativa, sería la primera inclusión de E-CL en este tipo de energía, ya que la totalidad de sus proyectos se relacionan con energía térmica y, en menor nivel, con energía renovable no convencional.

“Nuestros esfuerzos están enfocados en buscar oportunidades en el Sistema Interconectado Central (SIC), tanto greenfield como plantas de gas y pequeñas hidroeléctricas, además de centrales eólicas y solares y M&A (fusiones y adquisiciones) que veamos en el SIC. (Miramos) especialmente centrales locales que busquen compradores”, dijo el gerente de finanzas de la eléctrica, Carlos Freitas.

E-CL tiene el 50% del mercado eléctrico en el norte grande y su primera incursión en el SIC se concretó con la adjudicación de un volumen de 5.040 GWh/año por un plazo de 15 años en la licitación de suministro eléctrico para empresas distribuidoras.

Sin embargo, hasta la fecha no tiene ningún proyecto en la zona central. La energía adjudicada será suministrada con el proyecto de generación Infraestructura Energética Mejillones (IEM) de 375 MW brutos, ubicada en la región de Antofagasta, y transmitida por medio de la línea de interconexión que la misma firma, a través de su filial Transmisora Eléctrica del Norte (TEN), está desarrollando.

Actualmente E-CL tiene un agresivo plan de negocios que incluye IEM, la línea de interconexión y el proyecto solar Pampa Camarones. Además, evalúa la concreción del proyecto solar de 34 MW El Águila II y la central eólica Calama, de 309 MW.

En el mercado hay preocupación acerca de que una incursión en el SIC por medio de plantas gasíferas y centrales hidroeléctricas presione el apalancamiento de la eléctrica, considerando que la deuda neta cerró en US$613 millones al término de 2015.

En la empresa aseguran que “tratarán lo más posible” de evitar un aumento de capital.  Antes de esta opción se analiza la venta de activos no estratégicos -como parte de sus activos de transmisión- u optar por bonos híbridos. Para el 2016, la empresa proyecta un Capex de US$ 482 millones.

Construcción y montaje: Ferretería eléctrica en centrales generadoras

La importancia de la ferretería eléctrica en el segmento de la generación pasa por las tecnologías de las herramientas a la hora de construir las centrales, especialmente en el área metal mecánica y en el montaje y construcción civil de las instalaciones, sean convencionales o de energía renovable, donde se destacan elementos de interrupción y las estructuras que soportan la conexión a líneas de transmisión como abrazaderas y aisladores de suspensión.

Martín García, profesor de la Universidad Técnica Federico Santa María, señala a Revista ELECTRICIDAD que las principales herramientas que se utilizan en ferretería eléctrica se agrupan en “elementos de protección personal (guantes dieléctricos, fundas, mantas, ropa dieléctrica); equipamiento de trabajo en líneas (pértiga, elementos de escalada, probadores de tensión), y en herramientas manuales (llaves, trinquetes, destornilladores)”.

De acuerdo a las estadísticas de comercio exterior del Banco Central, China es el principal país desde donde se importan materiales de ferretería eléctrica para el montaje de plantas generadoras.

La ferretería eléctrica se usa en el sector hidroeléctrico para el montaje de tuberías y compuertas, entre otros elementos.

Andrés González, académico de la carrera de Electricidad y Automatización Industrial de Duoc UC Valparaíso, señala que el uso de materiales para la construcción de centrales está regulado por la Norma Técnica de Seguridad y Calidad de Servicios Eléctricos de 2013, en que se establecen estándares mínimos, como el diseño, fabricación, ensayos e instalación, las cuales se realizará de acuerdo a las normas nacionales e internacionales.

“Cuando dichas normas nacionales específicas no existan, se aplicarán normas internacionales emitidas por organismos tales como: la International Electrotechnical Comission (IEC); la Conférence Consultatif International des Télegraf e Télecommunications (CCITT); la International Organization for Standardization (ISO); las normas DIN/VDE; la American Society of Testing Materials / American National Standards Institute (ASTM/ANSI); y el Institute of Electrical and Electronics Engineers (IEEE)”, explica el académico.

Construcción

Víctor Ballivián, presidente de la Corporación de Normalización Electrotécnica (Cornelec) aclara que la ferretería destinada a la construcción de plantas generadoras también se concentra en el área metal mecánica, como el montaje de estructuras y construcción civil. “En el caso de los conectores para la transmisión hay más elementos de ferretería, porque hay un fenómeno eléctrico a tomar en cuenta al diseñar una estructura, con un fuerte componente metálico”, sostiene.

“Si hablamos de las centrales térmicas, en que se debe construir el edificio donde va la central, indudablemente tiene que seguir todos los estándares que tienen las construcciones metal mecánicas, como ver si está a nivel de la costa o en altura, así como el cumplimiento de la calidad de los materiales”, detalla el especialista.

Mario Betancourt plantea que en el sector hidroeléctrico “la ferretería ocupará su lugar, como por ejemplo en especificaciones técnicas para el suministro y montaje de compuertas y rejas; suministro y montaje de turbo grupos, y para el suministro y montaje de tuberías de presión”, agrega Betancourt.

Mauricio Vallejos, investigador e ingeniero de proyectos del Centro de desarrollo energético de la Universidad de Antofagasta, indica que otro aspecto relevante en la construcción de centrales generadoras se ubica en las subestaciones, “que deben tener elementos de interrupción, estructuras que soportan las uniones de las líneas de transmisión, como abrazaderas, aisladores de suspensión, y ahí la ferretería es bastante importante”.

Según el académico, “cuando se hace la conexión de los terminales de la máquina para la transmisión y otros elementos de la central, como motores y ventiladores en centrales convencionales, también hay elementos de ferretería eléctrica”.

Construcción metal mecánica en el parque Solar Rijn Capital.

Tecnología

En este sentido Andrés González detalla que, “gracias al desarrollo de la tecnología de los materiales, los proyectos de generación de potencia han crecido por el uso de herramientas asociadas a la construcción, reparación y mantención de estas centrales”.

“Esta relación significa que las nuevas tecnologías logran −de forma más eficiente− trabajos que en el pasado resultaban más largos o de mayor complejidad”, concluye el académico del Duoc UC.

[Ferretería eléctrica: Los cambios que atraviesan los materiales para la Media y Alta Tensión]