La directora de Asuntos Corporativos y Personas de Grupo Cerro, María José López, fue la invitada a la última edición del programa radial “Girl Power”, de TXSPlus. Durante la conversación con la periodista especializada Fernanda Varela, la ejecutiva destacó la importancia de la energía de Concentración Solar de Potencia (CSP) para la transición energética de Chile.
En ese sentido, López calificó como un hito para el país la puesta en marcha de la central Cerro Dominador, primera central termosolar de torre de Latinoamérica, ubicada en la comuna de María Elena, en la región de Antofagasta. “Estos son espejos que hacen un efecto muy similar al de una lupa, dirigen la energía que captan hacia el punto más alto de una torre de 250 metros en pleno desierto de Atacama», explicó la profesional.
Agregó que la tecnología CSP “puede generar energía renovable 24/7 y, a su vez, almacenar el calor del día e inyectarlo durante la noche (…) tenemos una torre inyectando energía renovable durante la noche en pleno desierto de Atacama. Si esa es la tecnología que necesitamos tener en el país, potenciarla ahora, es clave y urgente”, sostuvo.
Al ser consultada sobre las proyecciones de Grupo Cerro y la posibilidad de desarrollar nuevas centrales de CSP en el país, señaló que proyectos de este tipo, que entregan seguridad y estabilidad al sistema, están en carpeta, pero “por su gran envergadura funcionan con inversiones más costosas, por lo tanto, cuando la tecnología está en una etapa inicial resulta muy difícil levantar este financiamiento”.
Al respecto, detalló que la aspiración actual de la empresa es “tener un portafolio 24/7 renovable y poseer distintas tecnologías que puedan aportar a eso”.
Desde la mirada territorial, María José López indicó que Cerro Dominador también ha impactado positivamente en la comuna de María Elena, generando programas de inserción de mujeres, como también entregándole al municipio la administración de un mirador turístico ubicado en la misma central. “Cuando pensamos inicialmente el proyecto queríamos poder generar una industria local que entregara valor, y así desarrollamos espacios de colaboración y de oportunidades de capacitación con los proveedores locales, especialmente, considerando que esta tecnología no era muy conocida en su minuto”.
A través del proyecto Espejos, la compañía logró la vinculación de mujeres de la comunidad de María Elena con la central. “Cerro Dominador, al contar con 10.660 mega espejos, necesitaba muchas personas para instalarlos y limpiarlos, por lo que decidimos capacitar a vecinos del territorio. El gran vuelco fue que un 30% de mujeres se involucró en este proceso, permitiendo derribar mitos -de que no pueden estar en terreno- y empoderarlas para seguir trabajando con nosotros o en otras áreas, pero ya con más conocimiento y práctica”.