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La Moneda compromete cumplimiento de medidas pese a catástrofe en Valparaíso

Abr 15, 2014

Desde el Ejecutivo buscaron dar una señal de normalidad tras el incendio que afecta a la región, y que ya cobró la vida de 15 personas. Desde el gabinete confirmaron que se analiza el uso del 2% constitucional para financiar la reconstrucción, entre otras medidas.

(Pulso) “El cuadro es francamente desolador”, señaló ayer el vocero de Gobierno Álvaro Elizalde, al término de la reunión de ministros sectoriales que La Moneda convocó ante la emergencia que se vive en la región de Valparaíso y el incendio forestal que afecta a la zona desde el sábado pasado.

A través de una videoconferencia, el ministro de Interior Rodrigo Peñailillo, el director nacional de Onemi, Ricardo Toro, y personal de la Conaf, relataron paso a paso la situación y los daños, hasta ahora incontables, en pérdidas materiales, por el paso del fuego.

En lo inmediato, las órdenes fueron dos: volver a la normalidad lo antes posible y no descuidar el cumplimiento el cronograma fijado para los primeros 100 días de gobierno.

Trabajar el triple

La agenda se mantiene intacta repiten una y otra vez los ministros encargados de cumplir con los 50 compromisos presidenciales para la primera etapa del gobierno.

Pero lo cierto es que varios anuncios que se harían esta semana han sido pospuestos, aunque se busca dar una señal de avance y de que se puede manejar la emergencia, trabajando en dos frentes. “Nos estamos haciendo cargo como nos ha pedido la Presidenta por seguir nuestro impulso y nuestro ritmo de trabajo”, destacó la ministra secretaria general de la Presidencia, Ximena Rincón.

Prueba de aquello es que desde Palacio insistieron en dar cumplimiento a uno de los compromisos, presentando el comité de expertos que buscará reformar la ley de Isapres, justo tras la reunión de los titulares con la mandataria. Eso sí, se debió suspender la presentación de la indicación sustitutiva al Multirut, que iba a ser presentada e ingresada ayer al Congreso. Desde el gobierno informaron que la indicación se materializará durante la próxima semana, dado el despliegue que deberán hacer esta semana los ministros y la propia jefa de Estado.

De hecho, la ministra del Trabajo, Javiera Blanco, quien está a cargo de la presentación, junto a los subsecretarios de Trabajo y Previsión Social, llegarán hoy hasta Valparaíso para reunirse con las ramas del comercio, turismo, construcción y la CUT regional, con la idea de aclarar los derechos laborales de los trabajadores en episodios de catástrofes.

Se retrasó también la entrega de los resultados finales del catastro de daños del terremoto del norte. De hecho, el ministerio de Vivienda ya había entregado las cifras preliminares a Hacienda, y ayer se daría a conocer la forma concreta en que el Estado pretende conducir la reconstrucción de las regiones de Arica-Parinacota y Tarapacá.

A pesar de que la carga de trabajo aumenta para los ministerios, desde el gabinete aseguran que no se verá afectado el cronograma para los primeros 100 días. La única voz disidente es la de la titular de Salud, Helia Molina, quien destacó que el incendio y su manejo “de alguna manera, altera” la ejecución de lo planificado. “Yo tenía estos días muchas reuniones con distintos actores, con los cuales tenemos que construir las políticas públicas y eso obviamente que se está postergando (…). Esperamos poder cumplir”, afirmó la secretaria de Estado.

Desde el Congreso también dan señales de continuidad. Los jefes de bancadas de la Cámara, junto al presidente de la corporación, el DC Aldo Cornejo, ratificaron que el cronograma legislativo sigue tal como estaba estipulado.

Despliegue en terreno

Bachelet también determinó en la cita con parte de su gabinete que varios ministros debían hacerse presente en terreno. Al interior del gobierno se dice que es el sello que busca imprimirle a las situaciones críticas que pueda enfrentar en el futuro.

Por eso desde ayer, los ministros de Vivienda, Desarrollo Social, Salud, Obras Públicas y Segegob se encuentran en la zona, para monitorear de cerca la tragedia. También destaca la presencia permanente del titular de Interior, Rodrigo Peñailillo, en la zona, lo que en La Moneda se considera como una señal de que es la propia jefa de Estado la que está tomando las decisiones en la zona, y no que sólo se derivó el manejo a los ministros “sociales”.

Durante la cita con los ministros, confiesan, no se pusieron fechas para entregar el nuevo catastro de daños de la ciudad puerto, ya que se estima que recién en 20 días más podrá empezar el levantamiento de datos.

Mientras, en Santiago, los que se quedan se ocupan de dar curso a la agenda trazada con anterioridad. La ministra Rincón, por ejemplo, visitará hoy la comisión de Constitución de la Cámara, a un día de que la sala se pronuncie sobre el voto chileno en el extranjero.

El hombre de las finanzas públicas, Alberto Arenas, debe ver cómo se financiará la reconstrucción de la zona. Una de las alternativas es la del uso del dos por ciento constitucional, fondo de emergencia que contempla redestinar dos puntos del presupuesto vigente para labores no contempladas para dicho año. Así lo confirmó la ministra de Vivienda Paulina Saball, que consultada por la eventualidad de inclinarse hacia esa medida, destacó que en la cita se analizó la posibilidad de utilizar fondos “tanto del presupuesto como del dos por ciento constitucional. Pero lo primero que tenemos que hacer es concluir el catastro dimensionar los datos y definir cuáles son las herramientas que vamos a usar”.

Ayuda internacional

Junto al trabajo que los distintos organismos que monitorean la tragedia en terreno, también se ha hecho presente la colaboración de las naciones vecinas. El canciller Heraldo Muñoz destacó que “he recibido numerosas llamadas de cancilleres de Brasil, Argentina, Ecuador, México. La Presidenta ha conversado con el Rey Juan Carlos de España, con el presidente Humala y la presidenta Cristina, de modo que ha habido una actitud muy generosa, de solidaridad en los países amigos”.

De hecho, Argentina confirmó el envío de seis aviones lanza aguas para proteger las zonas que han sido descuidadas, dada la concentración de los esfuerzos en lo que ha sido calificado desde La Moneda como “la mayor operación de combate de incendios forestales del cual se tenga recuerdo en nuestro país”.

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