(El Mercurio) «Me gustaría ser el que ayudó a liderar la transición del sector energía a uno más moderno, abierto y al servicio de las personas».
Al final de una jornada extensa como todas las que ha tenido en las últimas tres semanas desde que asumió en el cargo, Juan Carlos Jobet define lo que espera sea el sello de su gestión como ministro de Energía.
Su ritmo de trabajo ha sido intenso, y mediante una combinación de estudio de las materias técnicas propias del sector, numerosas reuniones con representantes de la industria y profesionales del propio ministerio, el ingeniero comercial se ha formado una imagen de prácticamente todos los temas más sensibles en las distintas áreas que abarca la cartera, tanto en el corto como en el largo plazo, donde espera focalizar la gestión, una vez que resuelva algunos frentes puntuales que, a su juicio, están distrayendo a los actores del sector.
«El único cargo al que me invitaron fue a este», asegura respecto de los rumores que apuntaron a que, antes de energía, el Presidente le habría ofrecido asumir en Vivienda, cartera de la que fue subsecretario durante el primer gobierno de Sebastián Piñera. También aclara las versiones en torno a supuestos conflictos de interés con los que habría asumido: «En 2014, después de salir del gobierno, con algunos socios evaluamos desarrollar un proyecto para generar electricidad con residuos de animales, pero en una etapa muy temprana lo desechamos, porque no era rentable con el precio de la energía del momento. Esa sociedad está sin actividad hace más de tres años y estamos esperando que se cumplan los plazos legales para poder cerrarla», explica.