(El Mercurio) Argumentos legales y técnicos presentará el próximo lunes ante la comisión de Hacienda del Senado, la Asociación Nacional Automotriz de Chile (ANAC) para rechazar la intención del Gobierno de implementar un impuesto a la adquisición de vehículos diésel mediante la reforma tributaria.
La ANAC encargó diversos estudios jurídicos que le permiten concluir que la norma propuesta por el Ejecutivo posee al menos seis aspectos que “la hacen contraria a derecho”, indica el gremio. Especialmente considerando los tratados comerciales entre Chile y diversos países.
En primer lugar, la entidad afirma que es un “error grave, que posee comprobación científica” el argumento que justifica aplicar el impuesto a los vehículos más contaminantes que usen diésel. Esto atenta contra el principio de no discriminación entre productos importados, “presuponiendo a dicha tecnología como más sucia, sin base alguna”.
Agrega que los motivos ambientales que se aducen como argumento en el proyecto son “arbitrarios e injustificados”.
Un cuarto punto, según ANAC, es que el impuesto desconoce un principio fundamental del derecho internacional, el cual establece que no se puede invocar el derecho interno para violar el internacional y añade que los tratados entre países priman por sobre la ley nacional.
También indica que el gravamen es contrario a la libre circulación de las mercancías y que atenta contra los principios internacionales de la buena fe y la protección de las legítimas expectativas.
“Se trata de ilegalidades contrarias a normas internacionales”, recalca el presidente de la ANAC, Álvaro Mendoza.
Respecto al impacto en los consumidores, Mendoza señala que “de aplicarse el impuesto en la forma que está proyectado, éste implicaría gravar la primera inscripción de cada vehículo diésel liviano con una tasa de entre un 18% y un 30% sobre su respectivo valor de importación”.
Agrega que existen “situaciones complejísimas. Por ejemplo la que se presenta con Tailandia, cuyas exportaciones a Chile están representadas en un 87% por camionetas. Con ese país se firmó un Tratado de Libre Comercio en cuya virtud los tailandeses se ahorrarán un 6% de derechos de internación. Pues bien, de aplicarse este impuesto, los vehículos de esa procedencia incrementarán sus costos entre un 18% y un 20%. Impresentable”.
Mendoza afirma que países como Corea o Japón y todos los que conforman la Unión Europea “han hecho saber, a través de la Cancillería o de reuniones en las embajadas de Chile, su preocupación en torno a este tema”.
El proyecto de reforma tributaria establece que el impuesto a los vehículos diésel afecta a los primeros compradores. Ellos deberán pagar ante la Tesorería un impuesto antes de inscribir la unidad en el Registro de Vehículos Motorizados. Afectará a modelos menores a dos mil kilos de carga, pero si quien lo adquiere tiene giro de empresa y lo incorpora como activo fijo, podrá pedir devolución del impuesto.