El Grupo Saesa oficializó el inicio de la campaña “No + Pilas”, cuyo propósito es reducir la cantidad de pilas en desuso actualmente en circulación, reuniendo estos elementos en contenedores especiales y contribuyendo así a reducir la contaminación por este tipo de residuos.
Recientemente, la Municipalidad de Castro anunció su adhesión a la iniciativa, que cuenta con el apoyo de municipios, entidades públicas y establecimientos educacionales y que pretende reunir estos residuos, catalogados como peligrosos y altamente contaminantes, para luego trasladarlos a un relleno sanitario y darles un tratamiento adecuado.
Al respecto, la jefa de Servicio al Cliente de Saesa en Chiloé, Javiera Fontecilla, afirmó que “la campaña de recolección de pilas es un pilar fundamental para concretar ese compromiso. Y la verdad es que estamos muy contentos de estar haciendo un nuevo lanzamiento”. La ejecutiva añadió que a través de esta iniciativa el año pasado se logró reunir 1.500 kilos de pilas en el archipiélago.
Por su parte, el director de Medio Ambiente, Aseo y Ornato de la Municipalidad de Castro, Nelson Cárcamo, sostuvo que “nos encanta generar estas alianzas entre el mundo público y el privado en pos de buscar soluciones a una problemática que tenemos hoy día con las pilas (…). En el minuto en que cada vecino suelta su pila el problema se le termina, pero a nosotros como municipio el problema recién empieza porque hay que tener lugares adecuados para hacerlo y en la provincia no existen”.
Disposición final
El daño que causa una pila en el medio ambiente es muy significativo. Una sola pila de reloj tiene la capacidad de contaminar toda el agua de una piscina olímpica. Además, estas baterías poseen metales y elementos peligrosos como mercurio, cadmio, níquel, litio, plomo, manganeso y zinc, pudiendo causar daños irreparables al medio ambiente y a la salud de las personas.
Puesto que en Chile no se reciclan estos elementos, lo que hace Saesa es reunir las pilas en el archipiélago de Chiloé y luego hace un envío masivo a la comuna de Florida, en la región del Biobío, donde una compañía de gestión y tratamiento de residuos las encapsula para evitar sus efectos nocivos en el medio ambiente.