(El Mercurio) «Servel», «juegosfriv» y «jaidefinichon» fueron las búsquedas con mayor crecimiento en 2012 entre los chilenos según el último informe Google Zeigeist con respecto a 2011, es decir, las que han tenido la mayor cantidad de tráfico a lo largo de un período continuo de 2012. Sin embargo, en la categoría denominada «¿Cómo?» los temas que despertaron mayor interés fueron «Cómo hacer genograma» y «Cómo ser innovador», siendo esta última un reflejo más de la importancia que está adquiriendo la innovación en el espíritu del tiempo -algo a lo que los alemanes llaman zeigeist , de ahí el informe- de los chilenos.
Arturo Herrera, gerente de general de la consultora en innovación INNSPIRAL MOVES, dice que este resultado se debe a iniciativas como el pasado Año del Emprendimiento y el actual Año de la Innovación
«Tanto las diferentes entidades públicas y privadas potenciaron la idea de que todo el mundo podía emprender y desarrollar un producto, servicio o negocio innovador y eso ha contribuido muchísimo a despertar el interés de las personas por la innovación», dice.
De acuerdo con Herrera, para ser innovador hay que estar constantemente expuesto a estímulos de cosas diferentes a las que se realizan habitualmente. «Si estás todo el día en la misma oficina, hablando con la misma gente y leyendo las mismas cosas, es muy poco probable que te expongas a descubrir oportunidades o problemas que nadie haya visto antes», advierte.
Por ello, ser mucho más curioso, conocer gente distinta, viajar más y tratar de conocer problemas que aún no tienen solución, son algunas de las acciones a las que apunta Herrera a la hora de convertirse en alguien innovador.
«Otro punto clave es compartir las ideas», afirma y agrega que «en general, en Chile somos muy desconfiados y si a alguien se le ocurre una idea de negocio, suele mantenerla bajo secreto, con lo cual no la puede mejorar», opina.
Salir del confort
Herrera asegura que para innovar hay que «salir del escritorio». «Sentado delante del computador es improbable que se te ocurra algo novedoso, tienes que visitar a tus potenciales consumidores para entender cuál es realmente su necesidad», comenta. El siguiente paso sería hacer un prototipo para que el cliente visualice la oferta.
«En la universidad nos enseñaron que si se te ocurría una idea tenías que construir un modelo de negocios y cuando estuviese perfecto, después de varios meses, ya podía salir al mercado. Eso es un derroche de recursos enorme porque si lo diseñaste detrás de tu escritorio probablemente estás muy desconectado de la realidad», dice
«Mi consejo es crear un Producto Mínimo Viable (PMV) y salir a vender para generar tus primeros recursos», concluye Herrera.
Dime con quién andas
Alfonso Gómez, presidente ejecutivo del Centro de Innovación UC-Anacleto Angelini, recurre al adagio «dime con quién andas y te diré quién eres» para mostrar que «estar expuesto a un medio donde se valora y se fomenta una actitud y conductas creativas, ayuda a desarrollar no sólo la base de conocimientos, sino también el estado de ánimo que se necesita para tomar los riesgos, y apreciar las eventuales recompensas de emprender e innovar».
Según el también consejero del CNIC, son muchos los contextos que pueden ser fértiles para innovar y no existe una única «receta» para alimentar la capacidad de generar ideas. «En general, es más fácil innovar en contextos donde no se castigan el ensayo ni el error y donde, por el contrario, se fomenta el pensar diferente y se estimula el atreverse a imaginar mundos inéditos».
Sin embargo, afirma que tanto o más importante que el ambiente externo es la capacidad de las personas «de ver, de escuchar, de ser conscientes de sí mismas, de desarrollar una convicción y un compromiso vital con la posibilidad de crear y de innovar». Y agrega que «no son pocos los ejemplos en los que un ambiente adverso se traduce en un mejor estímulo que uno demasiado generoso y favorable».
Valeria Cox, gerenta de Desarrollo Corporativo de Mujeres Empresarias (ME), coincide con Gómez en que los entornos donde hay tolerancia a la equivocación potencian la innovación y destaca la influencia de los programas educacionales desde la infancia para generar la capacidad de ser creativo e innovador. «En preescolar y escolar es importante tener libertad para poder crear y jugar sin muchas estructuras», afirma.
Y añade que, cuando se es más mayor, la seguridad en uno mismo y la perseverancia son «temas clave» para potenciar la creatividad.
Para alimentar la capacidad de generar ideas, Cox recomienda «viajar, viajar y viajar». «Creo que esa es la mejor forma de abrir la mente, ver cosas nuevas, conocer otras culturas, idiomas, necesidades, lugares. Culturas como la nuestra son muy cerradas y eso entorpece la generación de ideas», considera.
«Soy un convencido de que la capacidad de innovar es inherente a la condición humana, por lo que toda persona tiene una parte innovadora que hay que descubrir», puntualiza Gómez.
Una persona creativa genera nuevas ideas, una innovadora las implementa además en el mercado.
Fuente / El Mercurio