Aunque la hora final de la decisión aún no ha llegado, José Luis Rodríguez Zapatero dio ayer importantes indicios de cuál puede ser la postura del Gobierno definitiva y decisoria sobre la OPA de Gas Natural sobre Endesa. En una conferencia coloquio que sirvió para estrenar y marcar las grandes líneas del nuevo año político, el jefe del Ejecutivo aseguró que «es muy bueno» para España que existan empresas energéticas «fuertes y poderosas en el ámbito internacional». «No conozco a ningún presidente de Gobierno -prosiguió- que no quiera que su país tenga una empresa potente en este sector». Zapatero daba a entender así que el Gobierno está dispuesto a autorizar la OPA pese al dictamen contrario del Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC).
Las consideraciones del presidente estuvieron precedidas por unas reflexiones previas acerca de la necesidad de tener en cuenta el principio de la competencia y el del beneficio para los consumidores y usuarios a la hora de tomar la decisión, pero marcan el camino por el que quiere ir el Ejecutivo.
Zapatero indicó que la ley otorga al Gobierno «la última palabra» en este tipo de operaciones y, posteriormente, a los accionistas. «Lo vamos a hacer (tomar la decisión) con una tranquilidad enorme, porque fíjese que diferencia, nosotros no hemos puesto ni quitado a ningún presidente de ninguna empresa», subrayó. Además, precisó que el Ejecutivo va a tomar una decisión al respecto cumpliendo con sus responsabilidades y teniendo en cuenta tanto el informe del Tribunal de Defensa de la Competencia como el de la Comisión Nacional de la Energía. «Para eso nos han elegido los ciudadanos», añadió.
Preguntado por la posibilidad de que, tal como asegura el TDC, la aprobación de la OPA pudiera derivar en graves perjuicios, Zapatero insistió en que el Gobierno tomará una decisión que «irá en beneficio de los ciudadanos, de los usuarios y de España».
El Ministerio de Economía dispone de un mes para elevar al Consejo de Ministros una propuesta de decisión, plazo que empezó a contar el pasado 5 de enero, fecha en la que recibió el informe del TDC. El ministro de Industria, José Montilla, insistió ayer que «todo se hará en los plazos que marca la legislación vigente». Otras fuentes gubernamentales señalan que la intención del Ministerio de Economía es dar el visto bueno a la operación sin agotar los plazos estipulados.
Frente al dictamen contrario a la OPA que ha emitido el TDC, el Gobierno también deberá analizar el informe de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que recomienda autorizar la operación, aunque con severas condiciones.
El Gobierno ha descalificado el dictamen del TDC por entender que está politizado, pues se aprobó con la imposición de la mayoría que tiene el PP en el pleno del tribunal. El presidente del PP, Mariano Rajoy, dijo ayer que comparte el dictamen del TDC y pidió al Ejecutivo que defienda los intereses de los consumidores por encima de los que pueda tener el «tripartito catalán y algunas empresas». En declaraciones a Onda Cero, Rajoy señaló que, visto el dictamen del TDC y el «espectáculo» dado por la CNE, el Gobierno «no debe autorizar esta OPA» porque, en su opinión, «perjudica a los consumidores».
Fuente: La Vanguardia.