La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático 2024 (COP29), que se llevó desde el 11 de noviembre en Bakú, Azerbaiyán, finalizó este domingo con la firma de un millonario acuerdo para financiación climática.
Durante más de diez días, líderes de gobiernos, empresas y organizaciones de la sociedad civil se reunieron para discutir soluciones concretas a la crisis climática, con la participación de representantes de 197 países.
Al finalizar el encuentro, se arribó al acuerdo consistente en la entrega de 300.000 millones de dólares anuales desde las naciones desarrolladas a los países en desarrollo, con el fin de apoyarlos en el financiamiento de acciones para mitigar los efectos del cambio climático. Este consenso fue el resultado de intensas negociaciones y se considera un paso importante hacia la movilización de recursos para enfrentar la crisis climática a nivel global.
Según informó Naciones Unidas a través de su portal de noticias, los países en desarrollo, que habían solicitado más de un billón de dólares de ayuda, calificaron el acuerdo de “insulto” y afirmaron que no proporciona el apoyo fundamental que necesitan para afrontar con eficacia la crisis.
Asimismo, se acordaron las normas para un mercado mundial del carbono respaldado por la ONU. Este mercado facilitará el comercio de créditos de carbono, incentivando a los países para que reduzcan sus emisiones e inviertan en proyectos respetuosos con el clima.
Base para construir
Al hacer los balances, el secretario general del organismo, Antonio Guterres, afirmó que esperaba un resultado más ambicioso, tanto en materia de financiación como de mitigación, para hacer frente “al gran reto al que nos enfrentamos”.
“Este año ha sido brutal; un año abrasado por temperaturas récord y marcado por el desastre climático, todo ello mientras las emisiones siguen aumentando”, dijo Guterres.
Así, en el centro de la agenda de la COP29 estuvo la financiación, ya que los países en desarrollo se encuentran “ahogados por la deuda, azotados por condiciones meteorológicas extremas y luchando por la transición a las energías renovables”, subrayó el máximo representante de la ONU.
“Un acuerdo en la COP29 era absolutamente esencial para mantener vivo el límite de 1,5 grados. Y los países han cumplido”, añadió Guterres. Por lo tanto, a su juicio, el acuerdo alcanzado proporciona una “base sobre la cual construir”.
La COP29 también fue un momento propicio para que los países presentaran los estados de avance de sus planes nacionales de acción climática actualizados bajo el Acuerdo de París, los cuales deben entregarse a principios de 2025.
Plataforma global de gestión
La delegación de Chile a la COP29 fue encabezada por la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, acompañada por el ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, y representantes de distintas reparticiones de gobierno.
En el marco de la Cumbre de Líderes Mundiales para la Acción Climática (WLCAS), la ministra Rojas participó en representación del Presidente Gabriel Boric en la segunda reunión del Club del Clima. Esta, instancia presidida por los gobiernos de Chile y de Alemania, cuenta con la participación de líderes de 44 países y hace un año coordina acciones internacionales para promover la inversión verde y acelerar la descarbonización de la industria pesada, responsable de producir materiales y bienes que se comercializan intensamente en todo el mundo, y que generan una cuarta parte de las emisiones globales.
En ese contexto y considerando los objetivos del Acuerdo de París, la secretaria de Estado anunció el lanzamiento de una plataforma global de gestión. Se denomina Global Matchmaking Platform y tiene como objetivo facilitar a los países miembros del club como a los que no lo son, el acceso a recursos técnicos y financieros internacionales que les permitan a las economías emergentes y en desarrollo implementar tecnologías y prácticas que reduzcan emisiones de carbono de manera más efectiva.
Hacia la movilidad sostenible
Por su parte, el ministro Juan Carlos Muñoz reafirmó el compromiso de Chile con la acción climática y su liderazgo en la transición hacia sistemas de movilidad sostenibles e inclusivos.
En el marco de la cita multilateral, la autoridad sostuvo que “participar de la COP29 es muy relevante para nuestro país, porque acá estamos reafirmando que Chile es una nación que pone el cuidado medioambiental como eje prioritario”.
Agregó que “un ejemplo concreto es cómo desde el transporte público estamos impulsando la transformación más importante que ha tenido el país en décadas, incorporando cada día más buses eléctricos y no solo para la capital, sino también para las regiones, con una visión de país que va en línea con las políticas climáticas que acá se están discutiendo”.