Si los precios de las gasolinas y el diésel se mantienen en los niveles actuales, los US9 millones que tiene el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc) alcanzan para entregar subsidios a los usuarios sólo por dos meses.
El gerente general de la Asociación de Distribuidores de Combustibles (Adico), Luis Avila, explica que esta semana el Fepc está entregando unos US,7 millones en subsidio, monto que puede subir a US,7 millones en abril, una vez que deje de operar el seguro que Enap contrató con JP Morgan. Ayer la Presidenta Bachelet confirmó que este seguro no será renovado.
A la semana se están consumiendo en el país unos 55.000 metros cúbicos de gasolina y 105.000 metros cúbicos de diésel. Actualmente el Fepc está subsidiando en 2 el litro de bencina que pagan los automovilistas y en el precio que cancelan los usuarios del diésel. Este nivel de subsidio se podrá mantener sólo por unas semanas, si se toma en cuenta los recursos del Fepc alcanzan para dar un subsidio de 0 por litro.
No obstante, hay que considerar que el agotamiento de ese fondo está sujeto a la evolución que sigan teniendo los precios de los combustibles en el exterior. El Fepc está entregando un subsidio, porque los precios están ubicados sobre una banda que se usa como referencia para definir si corresponde estabilizar el valor interno de los combustibles. No obstante, para la próxima semana el sector privado espera que las gasolinas bajen. Si esto se concreta, será necesario un menor nivel de subsidios. En todo caso, el petróleo ha estado subiendo en las últimas jornadas -está en US7 el barril-, lo que anticipa que vendrán alzas de combustibles el próximo mes.
La mayor presión estará puesta sobre el diésel, combustible que estaba siendo estabilizado bajo de 30 a través de subsidios directos dados por Enap y por el seguro de JP Morgan, que deja de operar hoy. El próximo mes el Fepc deberá compensar los recursos que no entregará ese banco de inversión al diésel.
Un aspecto que molesta a los distribuidores es que en los últimos meses el Fepc recaudó cerca de US millones gracias a los impuestos que pagaron los usuarios que tienen autos que usan gasolina -otra cantidad similar la aportó el cobre- y ahora parte de los fondos se gastarán a subsidiar a los automovilistas que tienen autos a diésel. Luis Avila califica esto como una expropiación.
«Hoy subsidiamos particularmente al diésel y que es el combustible más contaminante (…) no tiene mucho sentido. El único sentido es mantener tranquilos a quienes son usuarios de diésel importantes, que es básicamente el gremio del transporte. Les estamos dando un subsidio a ellos versus el resto de la población», concluye el director de Econsult, José Ramón Valente.
Fuente: La Tercera.