Chile y Argentina se encuentran negociando la integración del anillo energético con el megagasoducto de US0.000 millones que unirá Venezuela con el Río de la Plata.
Así lo confirmó a «El Mercurio» una fuente que siguió de cerca el encuentro que tuvieron el jueves pasado los titulares de energía de ambos países en Buenos Aires.
Ella agregó que hay consenso en que, a mediano plazo, «el verdadero diseño (del anillo energético sudamericano) pasa por unir Camisea, el gasoducto proveniente de Venezuela y una tercera fuente, que es Bolivia».
De todas formas, en lo inmediato, así como Chile manifestó su interés por lograr la sinergia máxima de los dos proyectos hoy en estudio, «Argentina -se dijo- dio señales de la mantención de su interés en Camisea».
Lo anterior tiene su lógica, ya que, al menos hasta Salta y el noroeste argentino, el gas del yacimiento peruano es competitivo en precio con las fuentes disponibles al día de hoy.
La misma fuente indicó también que ambos gobiernos buscaban alejar la impresión, originada en las negociaciones entre Venezuela, Brasil y Argentina, de que habían desactivado el anillo energético.
Expectativas
En cuanto al siempre candente tema de las restricciones de los envíos de gas argentino a Chile, la fuente indicó que en la reunión las autoridades argentinas aseveraron su sorpresa por las notas aparecidas en la prensa chilena, ya que «Argentina ha tenido todo el gas que nos piden», en las últimos meses.
Es más, argumentaron que «las solicitudes (de las empresas) chilenas han sido todas satisfechas», de modo que no podría hablarse de cortes o falta de oferta de parte de Argentina.
La fuente agregó también que la expectativa de un verano con cortes totales no estaba contemplada por los representantes de ninguno de los dos países.
Y como ejemplo se citó la crisis del verano pasado se agravó por la salida de producción, durante tres meses, de Loma La Lata, lo que restó 10 millones de m3/día al sistema. Y que la única posibilidad de una restricción se derivaría de alguna ola de calor de 40 grados que durase muchos días en Argentina.
La fuente concluyó que lo anterior no significa que no va a haber problemas, sino que era más probable que adquirieran gravedad para la temporada 2007-2008, ya que por ahora ayuda la buena situación hidroeléctrica para este verano.
Fuente: Emol.