El proceso de desinversión de Shell en América Latina en el giro de la distribución de combustibles ha sido casi total. La petrolera europea no sólo vendió sus activos en Ecuador a Enap y Dionisio Romero, sino que también vendió a Petrobras, las 261 estaciones de servicio que posee en Paraguay, Colombia y Uruguay. En total, pagó US40 millones por las gasolineras de los tres países, según informó la firma brasileña.
La operación, que se espera esté finiquitada durante el primer semestre de 2006, considera la venta en Paraguay y Uruguay de 223 gasolineras, los negocios de lubricantes, queroseno, combustible para la navegación y gas licuado.
Pero Petrobras no corrió solo en su interés de adjudicarse las 89 gasolineras de Shell en Uruguay, que representan cerca de 20% del mercado. El presidente de la petrolera estatal uruguaya (Ancap), Daniel Martínez, lamentó perder la oportunidad de esta compra en la que tenían planeado participar junto a algunos socios.
Colombia
En Colombia Shell deja en manos de Petrobras 38 estaciones de servicio, una planta de almacenamiento y una planta de lubricantes y productos básicos. Con ello, la brasilera ingresa al mercado colombiano de la distribución minorista de combustibles, con un 4% de participación de un mercado que lideran las compañías ExxonMobil, ChevronTexaco, Terpel y Brío.
La petrolera estatal brasilera tiene cerca de 6.000 estaciones de servicio en Brasil y unas 1.000 en Argentina.
Desde que Shell anunciara el año pasado su decisión de desprenderse de algunos negocios en el área de downstream para enfocarse en la exploración y producción de petróleo, el primer interés público de la brasilera fue negociar la compra de los activos de Shell en Chile. No obstante, las conversaciones no llegaron a puerto.
Fuente: El Diario, Chile.