El Gobierno Federal de Brasil vendió las siete concesiones de nuevos proyectos hidroeléctricos con una capacidad combinada de 805 MW que se ofrecieron en su primera subasta de capacidad de generación futura efectuada el viernes, anunció el directorio de la Cámara de Comercio de Energía Eléctrica (CCEE) de Brasil.
Las concesiones requerirán 3.271 millones de reales (US.410 millones) en inversiones y debieran comenzar a entregar electricidad en enero del 2010, según CCEE.
La única firma extranjera que se adjudicó una concesión fue la española Iberdrola mediante su holding brasileño Neoenergia. Todos los otros adjudicatarios fueron brasileños.
Entre éstos figuran las unidades del holding eléctrico federal Eletrobras Furnas y Eletrosul y la eléctrica del estado de Minas Gerais Cemig, así como las empresas privadas de ingeniería Orteng Engenharia y Alusa Engenharia.
Alusa es uno de los mayores operadores y desarrolladores de transmisión de Brasil y es la primera oportunidad en que será dueña de activos de generación. Orteng es un proveedor de equipos eléctricos.
Grandes grupos privados tales como la brasileña CPFL Energia y Energias do Brasil, unidad de la eléctrica estatal portuguesa EDP, no ofertaron porque consideraron que el precio de inicio de 116 reales por MWh no les permitía obtener una tasa de retorno mínima de 15% con los proyectos.
El gobierno ofreció sólo 7 proyectos en la subasta de los 11 para los que había obtenido la autorización de las autoridades ambientales. Los 4 proyectos que quedaron fuera se vieron obstaculizados por fallos de tribunales o licenciamiento insuficiente.
El proyecto de 382 MW Maua, por ejemplo, se retrasó por un mandato judicial y el de 261 MW Dardanelos todavía necesita obtener aprobación de los legisladores estatales pese a haber obtenido la luz verde de las autoridades ambientales del estado de Goiás.
Se esperaba que las adjudicatarias de los proyectos hidroeléctricos confirmaran sus concesiones al obtener contratos de venta de electricidad a 30 años con 32 distribuidoras que se registraron para comprar en la tercera etapa de la subasta efectuada en las últimas horas de la tarde del viernes, según CCEE.
De acuerdo con el gobierno, los nuevos proyectos son considerados esenciales para ampliar la capacidad instalada de Brasil el 2010, cuando se prevé la demanda supere a la oferta.
Sin embargo, la cantidad de nueva electricidad instalada garantizada para el 2010 en adelante en esta subasta está muy por debajo de los 2.800 MW que el gobierno había planeado ofrecer a principios de año. La idea inicial del gobierno era vender 17 proyectos, pero sólo obtuvo licencias para 11 de ellos.
Ahora el gobierno pretende efectuar el 2006 otras subastas para nuevos proyectos hidroeléctricos, entre ellos iniciativas no adjudicadas en este primer proceso.
La realización de la subasta este viernes estuvo en duda debido a un fallo de último minuto de un tribunal que cuestionó la transparencia de las reglas de la subasta, pero abogados del gobierno lograron revocar el fallo unas horas antes del comienzo programado de la subasta.
Los proyectos y sus adjudicatarios son los siguientes: el de 140 MW Baguarí, al consorcio Baguari conformado por Cemig, Furnas y Neoenergia; el de 77 MW Passo São Joao, a Eletrosul; el de 334 MW Simplicio, a Furnas; el de 51 MW São Jose, a Alusa Engenharia; el de 82 MW Retiro Baixo, a Orteng Engenharia; el de 68,4 MW Foz do Rio Claro, a Alusa Engenharia; y el de 52,2 MW Paulistas, a Furnas.
Fuente: BNamericas.