(El Mercurio) Hace casi un año, parte de las generadoras involucradas en el mecanismo de estabilización de precios de la energía -la fórmula que el Gobierno encontró para evitar nuevas alzas en las cuentas de luz de los clientes regulados, entre ellos los residenciales- se  acercaron al Banco Interamericano de Desarrollo (BID) a negociar un crédito para cubrir la parte de sus ingresos que quedaría retenida en función de este sistema, el cual contempla un techo de US$1.350 millones.

Y ahora, cuando las estimaciones del Gobierno apuntan a que el fondo cerrará el año con más de US$1.000 millones acumulados, las  compañías aún no logran amarrar el financiamiento que, según dijeron ejecutivos del BID hace unos meses, rondaría los US$1.000 millones.

Conocedores del tema dicen que aunque la operación está en la fase final, los recursos no estarían disponibles antes de 60 días, pues aún hay aprobaciones pendientes.