La Tercera Con 140 proyectos energéticos activos, por un valor de US$ 35.500 millones, es natural que Chile esté preocupado por las tendencias que este sector protagonizará en los próximos años, especialmente en soluciones para la generación y transmisión eficiente de la energía, además de la gestión eficiente de recursos en el sector.

Este será el tema central de las Jornadas Económicas Alemania-Chile 2010, organizadas por la Cámara Chileno-Alemana de Comercio e Industria (Camchal), que se desarrollarán en Santiago el miércoles y jueves de esta semana en el Crowne Plaza.

«Los recursos que hoy requieren mayor eficiencia y mejor gestión son los recursos realmente clave: energía y agua. En ambos, Chile tiene limitaciones en términos de ser importador. Aunque tiene mucha agua, las industrias que más requieren este recurso están donde hay menos», explica Cornelia Sonnenberg, gerenta general de Camchal, sobre las razones por las que se eligió el tema energético como el centro de las jornadas.

Desafíos y oportunidades

«Si hay una cosa que pienso es que Chile podría evaluar más de cerca, ser un poco más audaz en la apuesta a más largo plazo. Hay que preguntarse «¿quiero ser un simple importador de tecnologías de energías renovables?» o toma una posición en que dice «veo una oportunidad en esto y quiero ser un actor relevante, aprovechando las condiciones que el país me ofrece»», dice Sonnenberg sobre el desafío del país en la materia. «Por las condiciones que tiene Chile para las energías renovables, debería poner énfasis en eso», agrega.

La experiencia que traerán varios políticos, expertos y empresarios del sector energético germano -entre ellos el presidente de la Federación de la Industria Alemana (similar a la Sofofa chilena), Hans-Peter Keitel, serán de valor en el país, considerando el fuerte sello verde que Alemania le ha impuesto a su matriz energética.

«Chile tiene potencialidad. Tiene litio para baterías; sales y nitratos, que usan las plantas termo solares, como medio de guarda para la energía», dice la ejecutiva.

Alemania recientemente pospuso la salida de las centrales termonucleares de la matriz energética. Respecto de la conveniencia de apostar por este tipo de energía, Sonnenberg comenta que «no se trata de reemplazar una por otra». «Las energías fósiles, termoeléctricas seguirán existiendo por un buen rato. La energía nuclear tiene una participación importante en la matriz de Alemania, pero la apuesta por las energías limpias y renovables es de futuro», afirma.

Fuente / La Tercera