Fines de 2008. Esa es la estimación que manejaría Energía Austral para reingresar el Estudio de Impacto Ambiental (EIA) de la central Río Cuervo, que planea construir en la región de Aysén. Sin embargo, tal estimación dista de lo manifestado por el ex gerente general de Energía Austral, Robert Biehl, quien había afirmado anteriormente que, a su juicio, el EIA estaría aprobado durante el próximo año, de modo tal que la instalación podría operar en 2013.

Por ello, considerando los tiempos que habitualmente demora la evaluación de la autoridad ambiental, se preveía que el EIA de la central hidroeléctrica desarrollada por la filial de la suiza Xstrata Copper debería ser presentado durante este semestre.
No se trata de la primera vez que la central ingresa al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA). El 2 de enero, el estudio entró en calificación para ser estudiado por la Corema de la Undécima Región.

Sin embargo, tras cuatro meses de tramitación en la entidad, fue rechazado. El estudio fue devuelto el 27 de abril. Tras este episodio, fuentes de Energía Austral explicaron que estaban “analizando las observaciones de la autoridad ambiental”.

Hasta 1.000 MW

Por otra parte, en caso que la evaluación ambiental de Río Cuervo fuera aprobada, la iniciativa permitiría contar con una capacidad estimada de 600 MW, tras una inversión cercana a los US00 millones.

Pero, junto con este proyecto, Energía Austral estaría evaluando la posibilidad de desarrollar iniciativas en Río Blanco y Río Cóndor, con lo que la capacidad total de la empresa en la XI Región, podría llegar hasta los 1.000 MW.

Además de estas complicaciones con la autoridad ambiental, Energía Austral debe solucionar de qué modo traerá la potencia que genere en Aysén hasta la zona central. El problema es que la línea de transmisión que Transelec levantaría para el proyecto HidroAysén, de Endesa y Colbún, al menos inicialmente no consideraría el transporte de la energía de Río Cuervo.
Fuente: Estrategia.