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Irán apoya barril de crudo entre US$50 y US$60 y medidas para estabilizar al mercado

Irán apoya barril de crudo entre US$50 y US$60 y medidas para estabilizar al mercado

(América Economía / Reuters) Irán apoya un precio del crudo entre US$50 y US$60 por barril y cualquier medida que ayude a estabilizar al mercado, dijo el martes el ministro de Petróleo iraní, según citas difundidas por la televisión estatal.

«Irán quiere un mercado estable y, por tanto, cualquier medida que ayude a la estabilización del mercado del petróleo contará con el apoyo de Irán», dijo Bijan Zanganeh luego de sostener una reunión en Teherán con el secretario general de la OPEP, Mohammed Barkindo.

Irán, el tercer mayor productor de la OPEP, ha destacado la disposición de respaldar un acuerdo global para congelar los niveles de producción solo si otros exportadores reconocen su derecho a recuperar la cuota de mercado perdida como resultado de las sanciones de Occidente.

Bajo los términos de un acuerdo alcanzado con seis importantes potencias en 2015, las sanciones internacionales impuestas sobre Irán fueron levantadas en enero a cambio de que Teherán limite su programa nuclear.

Previamente este año, los esfuerzos de exportadores de la OPEP y de naciones fuera del grupo por alcanzar un pacto para congelar la producción de crudo fracasaron debido a que Irán declinó participar.

Los miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo se reunirán en el marco del Foro Internacional de Energía, que agrupa a productores y consumidores en Argelia el 27 y 28 de septiembre, a fin de discutir la posibilidad de congelar los niveles de bombeo. Se espera que Rusia, que no integra el cártel, también participe.

Presionados por el sobreabastecimiento global, los precios del crudo cayeron a mínimos de US$27 por barril este año desde un máximo de US$115 a mediados de 2014, pero desde entonces se han recuperado a casi US$47.

«Apoyamos los precios del petróleo entre US$50 y US$60 por barril», agregó Zanganeh.

Un importante funcionario iraní dijo el lunes que el país está dispuesto a elevar su producción a 4 millones de barriles por día en un par de meses dependiendo de la demanda del mercado.

Irán no congelará producción de petróleo, pero su apoyo a la medida impulsa precio del crudo

Irán no congelará producción de petróleo, pero su apoyo a la medida impulsa precio del crudo

(El Mercurio) Tras el sorpresivo acuerdo anunciado el martes en Doha por los gobiernos de Qatar, Venezuela y Arabia Saudita -países miembros de Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP)- junto con Rusia, de congelar la producción de crudo este año a niveles de enero (33,1 millones de barriles por día), Irán se negó ayer a formar parte de este pacto, destinado inicialmente a restringir el volumen de extracción y apuntalar los precios, que están en sus niveles más bajos en más de una década.

Ello, ya que las intenciones del país islámico -según sus autoridades- son recuperar la participación de mercado que perdió luego de que en 2012 se le impusieran sanciones económicas por su programa nuclear. «Pedir a Irán que congele su nivel de producción de petróleo es ilógico (…) cuando Irán estaba bajo sanciones, algunos países elevaron su producción y causaron la caída de los precios del crudo», manifestó Mehdi Asali, el enviado de Irán ante la OPEP.

No obstante, las autoridades iraníes vieron este acuerdo como una «buena noticia». El ministro del Petróleo de Irán, Bijan Zanganeh, dijo que «este es el primer paso y deberían tomarse otras medidas. Esta cooperación entre miembros de la OPEP y países fuera del grupo para estabilizar al mercado es una buena noticia. Apoyamos cualquier esfuerzo por estabilizar al mercado y sus precios».

Y si bien los iraníes no adhirieron al pacto, la jornada de ayer fue ardua para Zanganeh en un intento de la OPEP de convencerlo en unirse a la iniciativa. Luego de reunirse por casi dos horas con los ministros de Petróleo de Irak, Qatar y Venezuela en Teherán, la autoridad de energía de Irán afirmó a medios locales que «me informaron que Rusia, en su calidad de mayor productor mundial de crudo, Omán y otras naciones están listos para sumarse (al pacto). Este es un paso positivo, tenemos un enfoque positivo sobre el tema, es un buen comienzo», indicó.

Efecto en el mercado

Sus declaraciones de respaldo al acuerdo no tardaron en revertir el escenario de caídas del crudo en el mercado internacional. Así, durante la jornada de ayer los precios de los barriles WTI y Brent volvieron a situarse sobre los US$ 30. De los dos, el Brent, que marca los precios en los mercados europeos, fue el que tuvo la mayor alza diaria, con 7,21%, llegando a cotizarse en US$ 34,5 por barril. Por su parte, el WTI -de referencia también para Chile- subió 5,58%, hasta los US$ 30,66.

Analistas como Eugen Weinberg, jefe de estrategia de mercados de materias primas de Commerzbank AG, en Frankfurt, dijeron que «si Irán no es parte del acuerdo, este no vale mucho». De hecho, el país produjo 2,86 millones de barriles por día, en promedio, en enero, según Bloomberg. Weinberg, además, simpatizó con la decisión del gobierno iraní: «Después de batallar contra las sanciones durante años y finalmente estar libres de ellas, ¿por qué ahora Irán debería ponerse sanciones a sí mismo y congelar su producción?».

En cuanto a otros productores de la OPEP en el Golfo Pérsico -Qatar, Kuwait y los Emiratos Árabes Unidos-, confirmaron que se sumarían al pacto.

Líder de Irán aprueba acuerdo nuclear con condiciones

Líder de Irán aprueba acuerdo nuclear con condiciones

(Diario Financiero) El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Khamenei, aprobó el acuerdo nuclear entre Teherán y las potencias mundiales, pero dijo que el país debería esperar a ceder elementos centrales de su programa nuclear hasta que las acusaciones sobre sus programas militares del pasado hayan sido aclaradas.

En una carta al presidente Hassan Rouhani publicada por la página de Internet oficial de Khamenei, la máxima autoridad de Irán ordenó que el acuerdo del 14 de julio sea implementado sujeto a ciertas condiciones que el Parlamento iraní estipuló en una ley aprobada la semana pasada.

Agregó que Irán debería retrasar el envío al exterior de uranio enriquecido y la reconfiguración de un reactor de agua pesada para asegurar que no pueda fabricar plutonio a un nivel apto para una bomba -aspectos centrales de las obligaciones de Teherán bajo el acuerdo-, hasta que inspectores de la ONU aclaren si Teherán buscó alguna vez tener armas nucleares.

“Cualquier acción sobre (el reactor de) Arak y el envío de uranio al exterior (…) tendrá lugar después de que el archivo sobre las PMD (Posibles Dimensiones Militares, por sus siglas en inglés) esté cerrado”, escribió Khamenei en la carta.

Líder de Irán aprueba acuerdo nuclear con condiciones

Irán aprueba ley que respalda acuerdo nuclear con potencias mundiales

(Diario Financiero) El Parlamento iraní aprobó ayer una ley que respalda el acuerdo nuclear alcanzado con las potencias del grupo P5+1 (Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China, Rusia y Alemania) en julio, una victoria para el gobierno sobre los conservadores opositores al pacto, y un relevante hito que allana el camino para su implementación.

Pese a la fuerte oposición inicial de muchos legisladores al Plan Integral de Acción Conjunta (JCPOA, su sigla en inglés) que el gobierno del presidente Hassan Rouhani firmó con los líderes mundiales hace tres meses, la ley fue aprobada con 161 votos a favor, 59 en contra y trece abstenciones, según la agencia estatal de noticias IRNA. «Los miembros del Parlamento tomaron una decisión bien considerada hoy, mostrando que comprenden bien la situación del país», dijo el portavoz gubernamental, Mohammad Baqer Nobakht, según Reuters.

«Según el decreto religioso del Líder Supremo, ningún gobierno en Irán tiene derecho a producir o usar armas nucleares y el gobierno debe seguir activamente la política de desarme internacional», indica la ley parlamentaria, en referencia a la máxima autoridad del país, el ayatolá Alí Jamenei. La posición exacta del líder, que tiene la última palabra en todos los asuntos de Estado, no se conoce. Hasta la fecha, no ha aprobado o rechazado el acuerdo, pero ha elogiado el trabajo del equipo de negociación de Rouhani.

El proyecto de ley debe ser ratificado por el Consejo de Guardianes, un órgano de carácter clerical que puede aprobar la ley o devolverla al Parlamento para una evaluación más profunda, aunque los expertos ven más probable que la apruebe rápidamente.

«Si el Consejo ha permitido que el JCPOA alcance este nivel, es altamente improbable que lo rechacen ahora», afirma a Reuters Ellie Geranmayeh, miembro del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores.

Programa nuclear

El siguiente paso es que Irán empiece a eliminar partes de su programa nuclear y se prepare para un sistema de inspección más rígido por parte del órgano supervisor nuclear de la ONU, el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Según los oficiales iraníes, este proceso podría tardar alrededor de dos meses y medio y, dado que Jamenei no se ha opuesto abiertamente al pacto, se espera que el país inicie el proceso en las próximas semanas. Cuando finalice este proceso, la mayoría de las sanciones internacionales impuestas al país por parte de Estados Unidos, la ONU y otras naciones occidentales por el temor de que estuviera desarrollando armas nucleares, serán eliminadas. Esto se producirá, según las autoridades iraníes, a fines de este año o en enero de 2016 a más tardar. Si las sanciones no se eliminan, Irán podría reanudar sus actividades nucleares, según la norma.

La ley establece que los inspectores de la OIEA necesitan autorización de Irán para visitar sitios militares, un aspecto que todavía podría generar controversia. El organismo tiene hasta el 15 de diciembre para emitir un informe sobre las actividades nucleares del país.

La debilitada economía iraní apunta a la recuperación tras el acuerdo nuclear

(El Mercurio) Con sus casi 80 millones de habitantes, Irán es uno de los países más populosos del Medio Oriente y del mundo.

Su economía, medida a paridad de poder de compra, es la 17 {+a} más grande del planeta y equivale ya al billón (millón de millones) de dólares, al nivel de Australia y Turquía. Su nivel de desarrollo humano, según el indicador calculado por el Banco Mundial, es considerado «alto», similar a países como Perú y Brasil. Tiene el cuarto lugar entre los países con mayores reservas de petróleo y el segundo en gas natural. Pese a todos estos datos favorables, la economía iraní cumplirá en 2013 su segundo año consecutivo en recesión, con sus bancos aislados del sistema financiero global y sus empresarios asfixiados por las restricciones comerciales impuestas por Naciones Unidas.

Pero el fin de semana que pasó, en Ginebra, la economía iraní al parecer encontró un respiro.

El acuerdo nuclear

Luego de años de conversaciones fallidas sobre el programa nuclear de Irán, finalmente las potencias consiguieron que Teherán acepte detener el enriquecimiento de uranio a niveles mayores al uso puramente energético. Es decir, Irán se comprometió a paralizar cualquier método que le permita, al menos en teoría, desarrollar armas atómicas. De ese modo, su contraparte en la mesa de negociaciones, que son China, Francia, Alemania, Rusia, Reino Unido y Estados Unidos, reducirá algunas de las sanciones económicas a las que sometió al gobierno islámico, por un período de seis meses antes de una revisión de los términos del acuerdo.

Gracias a este respiro, Irán podrá volver a vender su petróleo a varios de los países signatarios, en especial a un cliente grande como la Unión Europea. Asimismo, cesarán las trabas para que Irán pueda importar maquinarias, automóviles, repuestos de todo tipo, y hasta metales preciosos. También se desbloquearán dólares provenientes del petróleo iraní para que pueda comprar bienes con objetivo humanitario. El avalúo de estas rebajas de sanciones es de US$ 7 mil millones. Otras medidas restrictivas, como el acceso limitado a los servicios financieros extranjeros o el congelamiento de activos iraníes en bancos internacionales, se mantienen vigentes, y se calculan en más de US$ 90 mil millones.
¿La recuperación?

En 2002 y 2003 la economía iraní creció a más del 8% anual, en particular gracias al boom del precio del petróleo. Esos años, sin embargo, marcaron el inicio del fin de su propia prosperidad financiera ante la comunidad internacional. Luego que en 2002 se descubriera el plan secreto de Teherán de enriquecimiento de uranio, que el entonces gobierno de Mahmud Ahmadinejad negó y que después defendió para desafiar a Washington, Irán fue quedando aislado. Estados Unidos y la Unión Europea fueron los más activos en sus sanciones para congelar fondos de las empresas iraníes, luego impedir los negocios con bancos de ese país, y por último prohibir la compra de su petróleo y productos petroquímicos. Las exportaciones netas de crudo de Irán se redujeron en 30% entre 2005 y 2012. Aunque pudo resistir por varios años, al final las cuentas fiscales se deterioraron. El crecimiento se estancó, y hoy está en etapa recesiva. La inflación, que llegaba al 15% anual promedio en 2002, se ha disparado a más del 40% este año, lo que podría socavar el apoyo popular al régimen teocrático.

En ese panorama llegó al poder el Presidente Hasan Rohani, a mediados de año. Reemplazó a un defenestrado Ahmadinejad, que terminó enemistado con la cúpula que supervigila al gobierno y que encabeza el ayatolá Alí Jamenei desde 1989. Con este paso, y otros más que deberían ocurrir durante 2014, Irán busca volver al concierto global como una economía en pleno uso de sus capacidades. La bolsa de Teherán, por ejemplo, ha tenido una expansión vertiginosa desde que se inició su privatización, y su valor podría aumentar gracias a que las principales compañías listadas son petroleras. El domingo pasado trascendió que empezaría una puja por las participaciones accionarias de varias empresas, y el lunes el principal indicador bursátil anotó su máximo histórico.